Life goes on *COMPLETA*

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Esta mañana me encuentro más ansioso que nunca, todo el día de ayer y la noche me la pasé repitiendo en mi mente el hermoso beso que comparti con Jimin... sólo de recordarlo mi estómago burbujea incontrolablemente, me siento como un mocoso de 17 otra vez.

Quiero verlo y volver a besar esos labios rojos.

Lamentablemente Jimin hoy no viaja conmigo, no tengo manera de comunicarme con él así que sólo me queda esperar un día más. Quizas no tenia clases hoy o tuvo algun inconveniente familiar.

Necesito mi celular urgente, así que lo primero que hago al llegar al trabajo es hablar con mi compañero para pedirle por favor que le diga a su hermano que me envíe el teléfono cuanto antes, ya que por medio de él conseguí el arreglo. Después de una llamada telefónica me confirma que ya consiguió el repuesto de la pantalla y que en unos días me lo entregaría. Un poco más animado continúe con mi día normalmente.

Extrañé conversar con Jimin hoy... el viaje fue aburrido y largo sin su agradable compañia.

Durante la tarde me ocupo de revisar el sitio web de mi Universidad, no sé muy bien para que, solo quiero ver si hay maneras para retomar algunas materias o dar exámenes libres... no es que vaya a volver pero saber las opciones no está de más.

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Pasaron 4 días y Jimin no volvió a tomar el autobús, empiezo a pensar que se arrepintió del beso y que ahora me está evitando. 

Lo sé soy un pesimista de primera.

Me siento horrible, pero no tengo manera de encontrarlo. Si tan sólo le hubiera pedido su número, pero soy un tonto y no lo hice. 

Jimin podría estar resfriado y por eso no va a la Universidad. Debe ser eso, seguro un día de estos volvemos a vernos y ahí si que no voy a dudar en pedirle su número.

El recorrido sin él es demasiado silencioso, ahora no comprendo como pase un año entero viajando así, inmerso en mis pensamientos negativos y depresión. 

Voy mirando el paisaje y buscando cosas que me inspiren para dibujar mientras el viaje sigue su curso. 

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3 Días más y Jimin sigue sin aparecer en el autobús... mis esperanzas de que sea un resfriado se desvanecen. 

No voy a dejar que los pensamientos negativos me controlen, seguramente mañana lo vea y me cuente alguna de sus anécdotas bizarras, riamos y vuelva a probar el sabor de su boca.

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Voy concentrado haciendo un retrato de una mujer mayor que está sentada unos asientos más adelante, es muy hermosa y todas sus arrugas la hacen aún más única. Pienso en todas las vivencias que esconden esas marcas y me siento inspirado por ella.

A veces el mundo puede parecer un lugar hostil y triste pero si miramos más detenidamente podemos encontrar pequeños destellos de amor escondidos, como la caricia de una madre en el cabello de su hijo mientras lo lleva a la escuela o las manos entrelazadas de una pareja de ancianos que despues de tantos años todavia anhela ese contacto tan simple y a la vez necesario. 

Conocer a Jimin me hizo volver a observar mi alrededor... como si él hubiera sacado un manto negro que cubría mis ojos, me hizo notar que no todo está tan perdido como yo creía hace tan solo unas semanas. 

Un sollozo lleno de angustia me saca de mis pensamientos, y sin dudar busco al dueño de ese sonido tan doloroso. 

Es un chico que está sentado unos cuantos asientos detrás mío, está llorando desconsoladamente y otro chico lo abraza.