²𝐀𝐒𝐇𝐄𝐒 ─ 𝗹.𝗷𝗻

19

Se había convertido en una rutina.

Después de cada turno en el hospital, Jeno recogía a Soojung, los dos evitando cuidadosamente a Jaemin antes de ir a ver a los gatos callejeros. Entonces Jeno pasaba la noche en casa de Soojung, abrazándola y dándole suficientes besos para la noche.

Era un poco extraño para Soojung evitar a Jeno durante el día, a pesar de que lo veía con Jaemin todo el tiempo. También era extraño verlo con la cruz en la mejilla, enviando a cualquiera que mirara en su dirección una mirada de muerte.

Pero cuando Jeno se sentó a su lado con un brazo alrededor de ella mientras acariciaba suavemente al gato en su regazo, todo se sintió tan bien. Se sentía cómoda y en casa con Jeno, y tenía la sensación de que el chico sentía lo mismo.

"¿Lista para irnos?" Preguntó Jeno, sosteniendo a Soojung más cerca de él mientras ella se estremecía de frío. Soojung asintió y se despidieron antes de dirigirse al apartamento de Soojung.

Como Jeno dormía aquí muy a menudo, ya había una parte del armario de Soojung para él. A Soojung no le importaba, a menudo robaba sus suéteres para usarlos en casa.

Soojung estaba usando uno de ellos cuando salió del baño después de tomar una agradable ducha tibia. Jeno estaba acomodado en el sofá, pasando los diferentes canales de la televisión, ya vestido con un pantalón de chándal y una remera negra.

"Tu cabello está empapando mi camisa." Jeno gimió cuando Soojung se deslizó en sus brazos, colocándose en su regazo antes de darle un beso en la nariz.

"Ups." Soojung dijo con una risita mientras Jeno le hacía cosquillas.

"¡Jeno, no puedo respirar!" Soojung exclamó mientras acercaba a Jeno hacia ella, con los brazos alrededor de su cuello. Jeno solo se rió cuando se detuvo, sosteniendo a la chica cerca de él.

Durante su tiempo juntos, Soojung también había aprendido más sobre el chico. Resulta que Jeno sabía tocar la guitarra, el otoño era su estación favorita y le encantaba el olor a menta, que resultó ser el mismo aroma que su champú.

A pesar de su apariencia, a Jeno le encantaba abrazarla, a menudo enterraba su rostro en el hueco de su cuello. Sin embargo, siempre fue respetuoso, asegurándose de que ella se sintiera cómoda y no empujara a Soojung más allá de sus límites.

Sin embargo, a Soojung no le importó, amaba el cálido abrazo de Jeno. Jeno estaba bien formado y a menudo se encontraba pasando los dedos por las venas de sus brazos, hipnotizada por lo guapo que era Jeno.

Lo favorito de Soojung sobre Jeno, que solo mostraba cuando estaban solos, era su sonrisa de ojos. La forma en que sus ojos desaparecían cuando se reía hacia que Soojung quisiera mirarlo todo el día, las comisuras de sus labios moviéndose hacia arriba con los de él también.

"Ve a secarte el pelo y te veré en la cama". Dijo Jeno, dándole un beso a Soojung antes de que la chica regresara al baño.

Cuando Soojung entró a su habitación, vio a Jeno sonriendo a su teléfono. Su curiosidad la invadió cuando se metió en la cama junto a él.

"¿Qué estás mirando?" Preguntó Soojung, haciendo que Jeno rápidamente escondiera su teléfono.

"¿Prometes no burlarte de mí?" Preguntó Jeno. Soojung le dio una mirada.

"¿Por qué me burlaría de ti?" Preguntó Soojung.

Jeno se encogió de hombros y respiró hondo antes de mostrarle su pantalla.

Soojung no esperaba ver una foto de ella sosteniendo a uno de los gatos, sonriendo. Jeno debió haberla tomado antes esa noche sin que ella lo supiera.

Sin embargo, Jeno bloqueó su teléfono, lo que hizo que su pantalla se oscureciera. Soojung lo miró y vio que las orejas del chico se ponían rojas.