Los jinetes de Rohan

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El pequeño niño tiritaba a si que lo cogí en brazos y lo tape con mi capa roja.
El se acurrucó agarrando un trozo de mi vestido, me causó tal ternura que no pude evitar soltar un suspiro
-Deberiamos ir en busca de Pipin y Merrin
-Si, pero como vamos ha ir, tu no puedes ir siempre cargada con  Legolas
Protestó Aragorn
-Tranquilo
Llame a Ventisca mi fiel caballo blanco desde tiempos inmemoriales
-Legolas y yo iremos aquí subidos
Subí al elfo y después me subí yo
Caminamos sin descanso durante cinco incansables días y Legolas por desgracia no mejoró en absoluto.
Llegamos a Rohan y nos encontramos con unos jinetes que nos rodearon
-Tranquilos, soy Lia, la amiga de la sobrina del rey, además Aragorn siempre ha tenido muy buena relación con Théoden
-El rey ya no distingue ni a su propia sangre
Dijo uno de los jinetes
-Nos ha exiliado por luchar contra los orcos
-Que barbarie
Se asombró el enano
-Si. Lia ¿quién es ese niño que lleváis con vos?
Mire apenada al niño que seguía inconsciente
-Legolas, le afectó un oscuro maleficio
-Lo siento,  de verdad
-No pasa nada
-¿No habréis visto una manada de orcos por aquí? Llevaban unos hobbits
-Si pero matamos a todos si eso sus cadáveres estarán allí
-Gracias
Corrimos hacia el lugar y vimos que Merri y Pipin habían entrado en un bosque en el que los árboles cobraban vida.
Entramos en el pero antes deje otra vez libre a Ventisca, ya vendría cuando la necesitase
Legolas empezó a despertar y me sonrió
-Disculpa pero no me acuerdo de vuestro nombre
Sonrreí divertida
-Yo soy Lia, el, el alto es Aragorn y el bajito Gimbli
-Ya puedes bajarme
-Pues abajo
Lo bajé y el me agarró de la mano era tan tierno.
Un hombre blanco se nos apareció al pensar que era Saruman nos pusimos en posición de ataque.
Deje a Legolas detrás mío para protejerle
-Gandalf
-Siento haberte atacado
Se disculpó Aragorn
-Pensé que eras Saruman
-Y soy Saruman o mejor dicho, como debería haber sido Saruman
Pero Gandalf me gusta más, si antes era Gandalf el gris ahora soy Gandalf el blanco
Legolas se resguardo detrás mío cogiendo mi pierna
-Y ese niño
-Legolas mi señor, un hechizo de Erudulgur
-Cuantas...
-Cinco días mi señor
-O lo siento mucho
-No es nada
-Bien, debemos ir a salvar al rey de Rohan
Llegamos al castillo del Théoden  y al ir a entrar nos pidieron las armas.
Pero aún así las dagas de las botas no las encontraron y dejaron el bastón de Gandalf. (Idiotas)
Unos soldados nos atacaron mientras Gandalf liberaba al rey Théoden de sus malévolas ataduras.
Les di dagas a Aragorn y a Gimbli
Luchamos como pudimos siempre protegiendo a Legolas.
Al final el rey fué liberado del hechizo y fuimos bien recibidos.
La noche calló sobre nosotros pero en el interior del castillo estábamos seguros.
Estaba terminado de cenar cuando
-Lia acompañarme hasta mi cuarto
-Voy Legolas
Le llevé hasta la habitación
-Lia
-¿Si?
-¿Puedes quedarte?
-No se
El chico se me agarró a la cintura 
-No me dejes sólo
-Bien me voy a tomar el postre y si cuando venga ya estás en la cama me quedo un ratito con tigo
-Vale, pero ven rápido
-Vale
Salí de la habitación y me encontré con Aragorn caminando por el pasillo.
-Hola, ¿ya se ha dormido?
-No, dice que o me quedo con el o no se duerme
-¿Qué vas a hacer?
-Me voy a tomar el postre y luego si ya está listo para dormir me quedo con el
-Ya se que es muy duro para ti, siento tanto lo que esta pasando
-Aragorn no veas lo duro que es todo esto, por qué siempre me pasan a mi estas cosas, cuando por fin podíamos estar juntos, lo transforman en un niño
Lo abracé, Aragorn se sorprendió pero después correspondió el abrazo siempre fué un gran amigo.
-Tranquila ten fe a lo mejor ocurre algo y Legolas vuelve a la normalidad
Yo asentí limpiandome las lágrimas.
Llegué al comedor y muy apurada me comí una manzana, después fui con Legolas que ya estaba en el interior de su cama
-Ven, cuéntame un cuento
-¿A esta hora? Mejor dormimos y mañana ya te lo cuento
-Porfaaaaa
-Vale:

"Hace muchos muchos años un pequeño hobbit partió junto a la compañía de Thorin escudo de roble con la noble misión de recuperar Erebor.

Vivió muchas aventuras pero la que todas las leyendas siempre narran es la siguiente.

El hobbit se encontraba frente a Smaug el terrible.

Bilvo, el hobbit, intentó que se apiadara de el pero nada sirvió a si que corrió y corrió robó la piedra del arca y hizo frente al...."
Legolas estaba dormido (que mono está así dormidito no da un ruido)
vi que estaba agarrado a mi brazo a si que me recosté en la cama y me quedé dormida.
A la mañana siguiente al no ver a Legolas me asusté bastante.
Salí corriendo gritando por los pasillos.
Irrumpí en la habitación de Aragorn despertandole
-Aragorn has visto a Legolas
-Que, no
-¡¡¡¡¡Que!!!!!
Salí corriendo por la puerta la sobrina del rey, Eowen, se preparaba para el funeral de su primo, ya estaba en la tumba
-Dime que has visto a Legolas
-No, lo siento mucho
-Nada
Corrí hacia las afueras ahí estaba, corría detrás de una mariposa.
-Legolas
El elfo se dio la vuelta y la saludó cuando un orco se acercó por detrás.
En menos de un segundo mi espada estaba bloqueando la suya otro orco apareció por detrás a ese no me dio tiempo a pararlo e insertó su espada en el indefenso niño.
-¡¡¡¡¡¡Noooooooo!!!!!!
Maté al primer orco y al segundo le di varias puñaladas.
-No te puedes morir- puse su cabeza en mis rodillas- ahora no, no me dejes sola, por favor.
Legolas dejó de respirar y yo me puse a llorar como una loca.

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