Nos ubicamos en un hospital de Japón
En este estaba Sir Nighteye pasando sus últimos momentos, dentro de la habitación lo estaban acompañando sus seres mas allegados. Entre estos estaban All Might, Nezu, Izumi, y su discípulo, Mirio; Todos y cada uno veían como Sir miraba a la ventana, hacia el cielo...
Nadie quería decir una sola palabra
—Nunca me había sentido así —Sir rompió el silencio, con voz calmada y ojos relajados, con las características facciones de su rostro, todos le prestaban atención —Fue una mezcla de terror y tristeza, de verdad fue muy aterrador —
Sir volteo a ver a Izumi
—Tu hermano... le sacaría todo el potencial y provecho a ese poder, en comparación a ti... —Esas palabras hicieron decaer a la joven de cabellos verdes, pero era algo cierto, Izuku, en términos de potencial, hubiera tenido un progreso abismal con el One For All...
Sin embargo Sir agregó
—Pero tu eres ideal para ser la portadora... ese poder esta hecho para que un héroe lo porte, alguien con un gran corazón, que traiga esperanza a las personas donde quiera que este, eso es algo en lo que le ganas a tu hermano... pero el... en lo que se va a convertir... el nunca podrá ser un héroe ni algo parecido, ni siquiera se como calificarlo... todo lo que hizo y hará... y como terminará... Solo les puedo decir que no intenten detenerlo, no es algo en lo que los humanos debamos intervenir... después de todo el futuro que vi es cruel para Izuku, pero es lo mejor para todo el mundo... tan solo observen el desenlace de su vida —
Sir empezó a cerrar los ojos lentamente, ya se le había acabado el tiempo
Era hora de expandir los horizontes
Eso era algo que Izuku sabia, no podía quedarse para siempre en Japón, tenia que ir a otros países
Y así lo hizo
Inicio con los países vecinos de Japón, a paso lento, ya que solo contaba con sus piernas como método de transporte, pero sin detenerse por nada del mundo
