IX

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Una noche antes de que Jimin y Namjoon lleguen, Seokjin se encontraba sentado en el mueble del apartamento que estaba alquilando Taehyung.

Se había quedado a dormir aquí los últimos dos días, pero sabía que era hora de ir donde Jack y esperar allá a que llegue de viaje.

Sentía nervios. Sí, pero había algo más. Algo que aún no podía descifrar del todo, pero que pesaba en su pecho con cada mención de la tan esperada boda.

El sonido de las olas del mar a los lejos lo mantenían de alguna forma melancólico, pensaba en sus padres y en casi todos sus amigos que no pudieron venir por trabajo, estudios o simplemente por tener algo más importante que hacer que viajar a otro continente para verlo casarse.

Quería abrazar a su madre, quería que la madre de Taehyung a quien consideraba como suya también, estuviera presente. Escuchar algún consejo de su padre, sonreír con un regaño de parte de Jungkook.

Extrañaba a todos, tenía suerte de que su mejor amigo había pedido vacaciones adelantadas para venir con él por qué no podría hacer todo esto solo.

Se sentía tan solo últimamente...

Las llaves de la puerta hicieron clic y dos segundos después, el rostro de Taehyung se asomaba con una gran sonrisa y dos bolsas grandes en cada mano.

El castaño se levantó rápidamente para ayudarlo con las compras y no esperó mucho para llamarle la atención.

-¿Por qué no esperaste a que despierte para ir juntos?

Taehyung negó sonriendo mientras sacaba algunos sixpack de cervezas, snacks salados y varios paquetes de gomitas dulces y ácidas - Te veías demasiado cansado luego de nuestro paseo en la mañana, necesitabas esa siesta, Jinnie.

Seokjin ya estaba abriendo un paquete de gomitas sabor a limón y fresa cuando Taehyung continuó - Mañana vienen Jimin y Joonie, así que tenía que rellenar la refri con alcohol.

Seokjin quiso hacer un comentario por ello, pero prefirió guardarselo.

Taehyung no había querido tomar con él desde lo que pasó en el club de Seúl, probablemente tenía miedo de volver a cometer un error y poner incómodo al castaño, pero el segundo ya había olvidado y superado todo eso.

Habían decidido que fue simplemente un momento de borrachera y no se repetiría.

Pero, Seokjin aún quería tomar con su mejor amigo, necesitaba una última noche de descontrol antes de convertirse en un hombre casado. Y aún así, Taehyung no hacía planes para tomar con él.

-¿Y por qué ese puchero ahora? - Seokjin sintió un par de dedos de su amigo presionando sus labios, logrando que sus orejas se pongan rojas y haciendo que una gran sonrisa se dibuje en su cara - ¿Qué tienes, Jinnie?

-Es sólo que... Quisiera que no me excluyas...

Los ojos de Taehyung se agrandaron de forma graciosa y luego frunció las cejas - Nunca te he excluido de nada en mi vida Kim Seokjin ¿De qué estás hablando?

Seokjin se sentía un poco infantil de decirlo en voz alta, pero con Taehyung nunca habían logrado ocultarse nada, ambos llevaban sus emociones en sus mangas y conocían perfectamente al otro como para darse cuenta incluso si no decían nada.

-Quiero tomar contigo. - Tae lo miró sorprendido - Sé que te sientes incómodo luego de lo que pasó en Seúl pero está olvidado ¿Si? Extraño a mi mejor amigo ebrio hablándome estupideces y corriendo desnudo por la playa, necesitamos este último momento antes de...

A veces ni siquiera podía decirlo en voz alta. Se sentía de alguna manera como si casarse fuera a cambiar todo entre todos, entre ellos. No sabría cuando vería a su mejor amigo de nuevo, cuántos años pasarían o si luego todo volvería a ser igual.

My Home - Jintae/TaejinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora