Death Wish ⇝ (GAY +18)

"En el momento equivocado"

— He oído que ha dejado en coma al pobre hombre— sorbe su taza de té

— Ese boxeador está loco— otra voz añade

— ¿Y habéis oído los rugidos que resonaban en su pasillo? Algo debe estar mal con su cabeza

El omega pega todavía más su oreja a la puerta. Sí, otra vez se ha escondido en el cuarto de la limpieza para que sus compañeros de trabajo no lo vean en su hora libre, pero la verdad es que ya se está acostumbrado a esto. En serio. Mientras ellos comen y hablan en la sala de descanso, él sigue su conversación en la oscuridad de su refugio, con la voz de su cabeza.

— No puedo creer que lo tengamos en este hospital— alguien dice

– Qué mala suerte— añade otro

Parece que ya no se habla más que de ese dichoso boxeador. La verdad es que Oliver no puede evitar sentir bastante pena por quien sea que le haya tocado ocuparse del tipo ese que es la comidilla del hospital. Por lo que ha oído, está completamente fuera de sus cabales. Incluso han tenido que ponerle una cantidad de sedantes impensable para lograr que se durmiera. Qué horror. Solo de pensar en los rugidos que se escuchaban a la hora de irse ayer por la noche le entran escalofríos.

También ha oído a escondidas que hay un vídeo suyo circulando por todos lados. Uno en el que se le ve a él agarrando por el cuello a un hombre y haciéndole cosas horribles. El Omega aprieta los ojos y se encoge de hombres. Ni siquiera quiere pensar en ello. Ojalá no tenga que oír de él nunca más.

— ¿Oliver Dragger?

De repente, escucha su nombre ser nombrado en voz alta y el corazón le da un vuelco.

— ¿Oliver Dagger?— inmediatamente se tensa— ¿Habéis visto a Oliver Dagger? El médico jefe quiere verle

— No, no está aquí— responde alguien. El nombrado acerca todavía más su oído a la puerta.

Parece que los demás presentes han negado silenciosamente, porque lo próximo que escucha es la entrada cerrase y la conversación volver a empezar.

Los nervios ya le están jugando una mala pasada de nuevo. Sus manos han empezado a mojarse y el corazón ahora le late más rápido que de costumbre. Normalmente siempre logra pasar desapercibido, hasta el punto en el que casi nadie sabe quién es, por lo tanto ¿cual sería el motivo del señor Charles para querer verle ahora?

Mira a su alrededor. Pensativo. Solo ve oscuridad. ¿Habrá hecho algo malo? ¿Querrán despedirle? ¿Darle alguna mala noticia?

Solo espera que no sea una carta de despido. De ser así, tendría que abandonar el apartamento que está alquilando en menos de un mes. Eso sería muy problemático. Definitivamente inconveniente.

Se pasa la mano por la frente y la siente húmeda. Los nervios siempre le hacen sudar, pero este no es un buen momento para desprender olor, se moriría de vergüenza si sus compañeros de trabajo lo encontraran ahí escondido como una rata enfermiza.

No queda otro remedio que esperar.

♜ ♜ ♜

— La enfermera Amery y tú vais a ser quienes os encarguéis de cuidar al nuevo paciente— pronuncia  lentamente