Capitulo 3.

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La mañana siguiente había optado por un vestido blanco corto a juego con unas botas negras. Llevaba el pelo recogido con algunos flecos sueltos. Mis padres se encontraban desayunando en la mesa familiar. Asi que me acerque y deposite en beso en la mejilla de cada uno.

- Buenos días princesa, que tal amaneciste hoy?

- Estoy mucho mejor mama, ya te dije, solo es esto de cumplir años. Siempre me pone algo triste. - le regale una sonrisa que ella me devolvió.

- Y bueno, a donde vas tan guapa? Has quedado con Seung? - Pregunto esta vez mi padre.

- No, la verdad es que voy a casa de Jennie. Tenemos planes de chicas.

- Vale hija, pero luego llama a tu novio. Anoche estaba muy preocupado y nos dijo que no había tenido la oportunidad de pasar mucho tiempo contigo. Quería sacarte a pasear hoy.

- Esta bien papá yo le llamo luego. Necesito a Nacho.

- El chofer siempre esta disponible para ti cariño.

- Vale, lo habéis visto?

- Debe estar en su puesto de trabajo como siempre. - dijo mi padre con esta forma educada tan característica que tiene al hablar. - Pero ya te vas? no has probado el desayuno.

- Es que tengo algo de prisa. Me comprare un café por el camino. Los quiero.

Me despedí de mis padres y me diriji a la cocina donde siempre encontraba a Nacho ya que su esposa era Cande, la cocinera. Nada mas entrar a la cocina ambos me regalaron una sonrisa amplia.

- Buenos días mi niña. Que tal amaneciste hoy? Tomaste el tesito que te deje al lado de la mesita de noche?

- Claro que si Cande, muy rico como siempre. Eres la mejor. - dije depositando un beso en su mejilla. - Nacho, esta ocupado? Necesito que me haga el favor de llevarme al centro.

- Claro mi niña, siempre disponible para usted. - dijo seguido de una sonrisa.

Nos dirigimos al coche familiar que mi padre había puesto en especial para mi. Después de lo ocurrido Nacho es el que se encarga de llevarme a los lugares. Era un señor de unos 62 años el cual ha trabajado siempre para la familia al igual que su esposa. O eso me han comentado. La verdad es que fueron de los pocos que se ganaron mi cariño y confianza en tan poco tiempo.

- A casa de Jennie por favor.

- Claro mi niña. Quiere hacer alguna parada antes?

- Si porfa, podemos pasar por mi cafetería favorita? la verdad es que no he probado bocado y algo de hambre tengo.

- Por supuesto!

Nacho puso el coche en marcha. Despues de unos minutos llegamos a la cafetería y ordene lo mismo de siempre. Ya era conocida aqui puesto que siempre voy a los mismos sitios. Me gusta frecuentar lugares en los cuales dan un servicio agradable. Por eso siempre frecuento los mismos sitios en la ciudad. Unos minutos mas tarde llegamos al lujoso edificio donde vive mi amiga.

- Te espero aqui mi niña.

- Gracias Nacho, tratare de ser breve.

Después de decir esto dirigí mis pasos al piso de mi amiga. Este era el ático del edificio por lo cual tenia que tomar el elevador. No era una de mis actividades favoritas pero no iba a subir 25 pisos por las escaleras. Las puertas del elevador se abrieron dejando ver que había llegado a portal de mi amiga. Su apartamento era el unico en la planta. Fui directo a la puerta y toque el timbre en su espera, pero no fue mi amiga la que me abrió la puerta.

Delante de mí se encontraba una chica de cabello negro y flequillo. Estaba arreglada, por lo que deduje que iba de salida. Vestía una camisa con unos pantalones negros y chaqueta de vestir a juego. Unas gafas de sol adornaban su rostro. Tenia una figura intimídante y potente. No pude descifrar de quién se trataba, juraba que nunca había visto a esta chica en mi vida. Por lo que comencé a alarme, tal vez me había bajado en la planta equivocada. Me asesore de que era el apartamento de mi amiga mirando el numero de apartamento. Efectivamente era este...pero esta chica quién es? Ella alzo su ceja en forma de interrogatorio ya que yo no producía ni una palabra.

Ventanas. ChaelisaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora