Astrid Rowle hija del mortifago Thorfinn Rowle y prima de la princesa de Slytherin, Pansy Parkinson, no tiene una vida facil, fue criada por su abuela Euphemia Rowle quien la hizo convertirse en una persona solitaria e impusiva. En Hogwarts fue sele...
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Era el inicio del curto curso y Astrid se encontraba en la mesa de Ravenclaw, estaba completamente empapada debido a la lluvia que habia caido sobre ella mientras llegaba al castillo, aun que a ella no le importaba demasiado, todos sus compañeros de casa se quejaban e intentaban secarse como podian, Astrid suspiro, en ese momento, las puertas del gran comedor se abrieron, dando entrada a todos los nuevos alumnos que iban a ser seleccionados ese año con McGonagall a la cabeza.
Al verlos Astrid puso los ojos en blanco y apoyó la mejilla sobre la palma de una de sus manos, la ceremonia de selección le parecia de lo mas aburrida y sinceramente en ese momento le hubiera encantado que su prima Pansy estuviera ahí para tener a alguien con quien hablar, pues en su casa nadie la quería, (la mayoria debido a que en su primer año le hizo perder a Ravenclaw muchos puntos por todas sus peleas) cuando llegaban las horas de las comidas todos se sentaban lejos de ella dejando un gran espacio vacío, que la mayoria de las veces, lo ocupaban su prima y las hermanas Greengrass para hecerle compañia, pero no el primer dia de curso, ese dia tenian que estar cada una en su mesa para dar la bienvenida a los nuevos alumnos, algo que era realmente aburrido para Astrid.
Cuando por fin el sobrero seleccionador acabó de cantar, miro a todos aquellos pequeños niños que se sentaban en el taburete y eran seleccionados para una de las casas. Aplaudia vagamente cuando uno era seleccionado para Ravenclaw, deseando en su interior poder cenar cuanto antes.
Por suerte para Astrid la selección acabó antes de lo que esperaba. Sonrió feliz cuando Dumbledore dijo que podian comer, pues toda la mesa se lleno de comida deliciosa, Astrid no perdió el tiempo y comenzó a sevirse lo que mas le gustaba.
Mientras comia dirijio su vista a la mesa de Slytherin en busca de su prima, pero ella se encontraba distraida en una charla con Daphne Greengrass, suspiro desanimada, pero antes de que sus ojos volvieran a su plato, algo llamó su atención, justo al lado de Daphne, estaba Astoria, que sonreia ampliamente a Astrid mientras la saludaba con la mano, al parecer ella si habia notado la mirada de la Ravenclaw y sin duda estaba encantada de haberse dado cuenta. Astrid le respondió con una sonrisa ladeada un suave gesto con la cabeza para despues, volver su atención en acabar su deliciosa cena.
Con un fuerte trueno (pues seguia la tormenta en el exterior) los platos cambiaron y llegó el postre, Astrid miro la tarta de melaza, su favorita, pero estaba tan llena que solo cogió un pequeño trozo. Cuando todos los alumnos porfin acabaron el postre, Dumbledore se levanto para comenzar a hablar.
-bien, ahora que estamos todos bien comidos, debo una vez mas rogar vuestra atención mientras os comunico algunas noticias- comenzo con una sonrisa
"las mismas tonterías de siempre" pensó Astrid intentando que su mente desconectara de aquella charla.
Dumbledore continuó pero Astrid intentó distraerse contemplando el techo, que, como estaba encantado para ser como el natural, estaba lleno de nubes negras que se enlazaban entre si y de vez en cuando se veia la forma orquillada de los truenos.
