my life - eraserdust

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Yo no podía saber que pasaba más allá de ese sótano gris, sucio y húmedo. Seguía sin sentir mis manos pero, no sentía la razón para escapar ahora, ese sótano se veía mucho mejor de lo que era mi casa en si.
A veces venia Eraser y me daba comida en exceso, no debió haber notado que estoy muy gordo. Así que con algo de asco solo comía lo que me parecía bien para no comer más mierda de la que debería. Puesto a que no tiraría todos mis días de esfuerzo máximo a la miseria por ese cabrón. También no le hablaba, estaba algo enojado internamente con él, pero también confuso por sus acciones.
Ningún héroe bien de la cabeza se pone a cargo de un villano de lo más peligroso, menos lo encierra en su sótano en su casa para hacer una especie de "negocio". Él estaba loco. Pero no me importaba demasiado, la primera vez que le dije algo luego de mucho tiempo, me dejó una mano libre. Parecía que el sabía que lo estaba procesando nuestra "relación" entre enemigos o no sé, ni siquiera se que somos, supongo que secuestrador y víctima. Da igual, seamos lo que seamos lo odio, pero a la vez no.
Cuando empecé a decir al menos tres palabras a la semana, me dejó acariciar a Lumi por unos largos pero cortos minutos, era como una especie de premio por mi colaboración.
No sé como pasó de la noche a la mañana, pero en el inicio de mi palma derecha, apareció un pequeño lunar, me daba náuseas y mareos verlo, y ni siquiera sabía porqué o a qué venía eso.
Por alguna razón, Eraser se centró mucho en ese lunar, y aunque le preguntaba que quería nunca me respondía.

Era raro, un total rarito, me incomodaba lo suficiente como para querer darle un puñetazo en la nariz, me provocaba picor.
Un día después de mi cena, estuve en total silencio. Ya venía siendo hora de que Eraser me cambiara la vía urinaria que me había puesto vergonzosamente. Pero en vez de hacer eso, antes, me miró y luego tomó mi mano, se fijó en mi palma y besó aquél lunar pequeño que estaba en ella. Podía sentir sus labios carnosos y húmedos posarse allí, en un suave beso junto a una mirada tranquila pero profunda. Un inevitable color rojo y un ardor pude sentir que se posaron en mis pómulos, lo único que deseaba en ese momento era dormir y olvidar que todo eso había pasado.
Bastó más que una semana o dos para entender lo que pasaba entre nosotros dos. Perdí rápidamente la noción del tiempo hasta que Eraser me dijo que ya era otoño, mantuve poco contacto visual con el desde entonces y solo reaccionaba con quejidos y gemidos de dolor y pena.
Ah, extrañaba la luz del sol, pero perdí tanto la fe que pensé que definitivamente nunca más la iba llegar a ver.

Han pasado meses desde que desperté en este sótano, incluso ya es verano.
Eraser hacía fiestas, o más bien su idiota amigo Present Mic por lo que me contó. Hasta ahora, tenía las manos y espalda completamente libres, pero de la cintura hacia abajo aún seguía sin movilidad. Al menos él había instalado un pequeño ventanal por donde la luz del sol a veces llegaba vagamente a mi cara.
Escuchaba risas de chicas que a veces se acercaban hacia la "puerta misteriosa", siempre me preguntaba que harían si alguna abriera la puerta y me viera sentado o acostado en la cama. Me gusta imaginarlo y reír con sus caras de espanto imaginarias.
"ERASERHEAD: El secuestrador de villanos, ¡el testimonio de dos jóvenes y más!", que gracioso sería.  

Un día de mucho calor, Eraser debía ayudarme a ponerme ropa limpia. Estaba harto de estar siempre en ese lugar, por lo que cuando termino de ponerme una remera suelta, fruncí el ceño y le pregunté.
── ¿Cuándo mierda podré salir afuera? ──
── Saldrás el día que yo decida que estés listo para salir, ¿entendido? ── me miró con el ceño también fruncido
Bien, eso era mucho tiempo, y estaba empezando a creer que escapar seria la mejor opción, hasta que sentí una mano revolver mi cabello levemente.
Lo mire confundido, y cuando él iba a sacar su mano, instantáneamente mi cuerpo reaccionó, y agarré su mano con la mía, haciendo que vuelva a poner donde estaba
── Haz eso un poco más, hace mucho tiempo no recibo afecto de nadie ── a pesar de mi extraña petición, el lo hizo sin problemas.

Yo quería volver a mi casa, pero, ¿Qué era realmente mi casa? solo era una propiedad robada y maltratada de parte mía. Pero si quería escapar, ¿a donde iría? Estaba mejor cuidado en ese sótano que en ningún otra parte, eso debía reconocerlo, pero de verdad quería salir. Desde el ventanal solo entraba luz, no podía ver afuera ni viceversa, a veces me ponía a mirar el cielo y extrañaba ver las estrellas, tener esa sensación de poder alcanzarlas y disfrutar del canto de los grillos por la madrugada.

Un día por la noche me senté en mi cama, durante semanas, él me dejó dormir con Lumi 2 veces a la semana y este era uno de esos días. Otra vez escuché voces que no provenían solo de Eraser, venía de otro hombre más. No se de que estaban hablando porque me importó lo más mínimo, pero, escuché besos, ruidos incomodos y una cama que no paraba de rechinar
Esa noche no pude dormir bien, no quería ni pensar en las cosas homosexuales que habían hecho ese hombre y Eraserhead
Aunque me esperaba que fuera hetero.

── Oye, si vas a hacer cosas desagradables, al menos asegurate de que yo esté dormido ── dije algo enojado, era de día, tenía calor y me estaba dando un plato de ramen para almorzar
── ¿De que hablas? ── dijo con la mejor cara del mundo. Él no sabía mentir, si lo hacía, se le notaba, y eso me fue bastante extraño
── Olvídalo... ── rodé los ojos y comí mi almuerzo, el también comía a mi lado en una silla de madera.
── Dime, ¿Qué pensaste que hice anoche? ── insistió
── ¡Nada, maldita sea! no seas una roca canadiense, come tu estúpida comida ── con mal humor, largue mi mirada de pocos amigos y el se mantuvo igual, sin ningún cambio notable
Pero de pronto comenzó a reírse al encontrar una respuesta a la duda que me había cuestionado
── No me digas, ¿pensaste que estaba teniendo sexo con alguien?
── No... ── disimule tomando el jugo que quedaba mientras mi cara ardía por dos cosas, la comida caliente y lo que había dicho
── No pensé que estarías celoso de eso, atrevido ── tomó su barbilla con una mano y dejó el plato con su comida terminada en una mesa que estaba allí.
── ¡No lo estaba! Es asqueroso, además, cualquiera que escuchara semejante ruido y estuviera encerrado en un sótano pensaría lo mismo ──
── ¿Osea que si pensaste que tuve sexo con alguien? ──
── ¡¡NO!! ¡¿Podrías irte de una maldita vez?! ──
── No olvides que estás encerrado, en mi sótano, de mi casa, comiendo mi comida y con mi ropa ── se levantó y luego se sentó en la cama, para mirarme

Se parecía a como mi madre me miraba cuando era joven
Me causa picor. No quería mirarlo asi que simplemente me puse en posición de dormir y cerré los ojos
── Fuera... ──

── ¿Qué tal si dormimos juntos, hmm? ── Abrí los ojos como platos y me mantuve quieto, más quieto que nunca antes en mi vida
── Tu decisión, es tu casa, tu sótano, ¿no? ──
── Bueno entonces, si no te va a molestar y la decisión es mía... ── comenzó a quitarse las botas y se puso a mi lado, la cama era suficientemente grande para ambos, así que el espacio sobraba más que nada.
── Imbécil... ── fruncí el ceño y lo miré, hasta que mi corazón se paró por un momento.
Sentí mis labios secos, ahora húmedos y una mano pasó por mi cadera.

Era él, haciendo esos movimientos y centrándose más en el beso que nada, luego de juguetear con mis labios empezó a jugar con mi lengua y la suya, me parecía repugnante pero, mis manos no se movían, quería empujarlo pero a la vez quería que siguiera

Y en ese momento me di cuenta que, en cuatro estaciones me enamoré de Aizawa Shota