Te Encontré | Parte 2

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La vida más allá del orfanato, no es para nada como pensó que sería. Y eso que no era nada bueno y fácil realmente.

Al ingresar de por sí a la vida en una ciudad, donde para que lo tengas todo y puedas vivir bien, era únicamente trabajando, al principio, no fue tan fácil. Al no tener nadie más que a sí mismo, los gastos sólo corrían a su cuenta y por su cuenta. No era mucho lo que debía gastar, pero vivir gran parte de su vida donde no tenía que preocuparse de la comida o de una cama donde dormir, hizo que se frustrara muchas veces.

Al llegar, junto a Fred y Jason, a la próxima ciudad después de tomar un tren, buscaron un cuarto de alquiler. El señor, desconfiado al no verlos nunca por ahí, como conocía a casi todo mundo, les cedió la habitación, pero no desaprovechó en elevar el precio del alquiler. Los tres chicos no tuvieron más opción que aceptar y equiparse como puedan en una sola habitación. No era muy pequeña, pero tampoco era suficiente para tres chicos con sus cosas. Había sólo dos camas, así que uno tuvo que dormir en el suelo. Dylan, nunca se quejó de la comodidad del suelo.

Al siguiente día, los tres tuvieron que buscar algún trabajo. Fred lo consiguió en un restaurante, donde sólo debía lavar los trastes y cargar las cajas con nuevos suministros para la cocina. Jason, encontró trabajo en un bar nocturno, donde sólo debía atender a las personas, aprendió a preparar cocteles y algunas veces, para dinero extra, limpiaba los baños.

Y Dylan, bueno, Dylan pasó gran parte del día buscando por la ciudad alguna pista o señal de que Thomas estuvo por ahí alguna vez. Preguntó a algunas personas, pero estas lo miraron como si estuviera loco. Resignado, volvió a aquella casa e hizo lo mismo por los siguientes días.

Fred y Jason, realmente preocupados por Dylan que no podía conseguir un trabajo, buscaron por su cuenta. Lograron conseguirlo un par, pero Dylan amablemente los rechazó, ya que, según él, había conseguido uno aquella tarde. Sus compañeros realmente felices palmearon su espalda y salieron rumbo a sus trabajos; despreocupados en no tener problemas para los gastos semanales y mensuales.

Dylan salió a la calle aquella noche en busca realmente de una labor, pues su dinero comenzaba a escasear y no quería que al final del mes, sus amigos lo botaran a la calle. Sabía que ellos no serían tan crueles, pero tampoco podía ser un mantenido. Ya lo fue durante dieciocho años, ya era momento de conseguir sus cosas con el sudor de su frente como Dios manda.

Las noches en la ciudad, no tienen una buena imagen. Dylan lo sabe, por lo que recurre las calles donde hay más personas y suficiente claridad. El viento es frío, pero fresco, a comparación de las mañanas y tardes, que el calor es sofocante. Sin saber a dónde ir realmente, camina hacia la nada, perdido en sus pensamientos.

Se pregunta entonces cómo estaría Thomas. Si tiene una buena vida, o también está andando por una calle como él. Si sus padres lo trataron bien en todos estos años. O si, aún lo recuerda, lo piensa, como él lo hace. Todos los días y noches.

Se detiene al escuchar varios gritos divertidos y al ver, varios grupos de chicos salen de lo que parece ser una discoteca. Observa cuan felices son en esos momentos, junto a alguien a su lado. Tener una familia, era una de las ventajas de casi no preocuparse.

Se pregunta entonces, después de años de no hacerlo, qué fue de su madre. Por qué lo abandonó a su suerte cerca de los botes de basura del orfanato en una noche de lluvia. Pensar en cómo fue dejado, fortalece a su creencia de que era mejor así. No necesitaba de una mujer que lo abandone sin pensarlo, y no necesitaba una madre adoptiva que haga lo mismo. Encontró entonces el por qué de su negación para ser adoptado. Pero ahora, ver a esos chicos tener una vida, le hizo dudar por unos cortos segundos.

Cansado, sacude su cabeza y sigue caminando.

Los coches dejan de concurrir con cada minuto que pasa al igual que las personas. Dylan aún no encontró algo. Revisa su vieja billetera, y sólo hay unos cuantos billetes. El dinero que le dieron las Hermanas, dejaba de existir en su poder. Y no hizo nada productivo con ellos. Sólo anduvo buscando un fantasma. Uno que quizá, no quería ser encontrado.

❝𝙏𝙝𝙧𝙚𝙚 𝙎𝙝𝙤𝙩 ♔𝑫𝒚𝒍𝒎𝒂𝒔♔ ❞Donde viven las historias. Descúbrelo ahora