Pensamientos nocturnos

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¿Puedes recordar un sueño?

¿Exactamente cómo era?

Tal vez alguna mezcla loca de los hechos mas recientes, o pensamientos y deseos reprimidos, pero todos tienen algo en común, al despertar no recuerdas exactamente como eran como si fueran destellos fugaces que lentamente se borran de tu mente, ciertos detalles y hechos que olvidamos al despertar ,pero la idea está ahí, aun recuerdas el monstruo que te hizo saltar de la cama, recuerdas aquel hecho vergonzoso que temes decir, ese susto que te hizo mojar las sábanas, eso es lo especial de los sueños, o bueno, más bien de las pesadillas.

Nuestro inconsciente nos habla sin decir nada, habla de nuestras culpas arrepentimientos y temores, están expresados así, incluso un sentimiento tan bello como el amor es superado en masas por el odio y eso mi estimado lector, es el combustible de las pesadillas.

Mis pesadillas no son las más <<creativas>> que digamos, pero son fieles representaciones de mis temores, decepciones, engaños y por supuesto odio.

Aún recuerdo la primera, era sobre estar solo en medio de la oscuridad, voces y murmullos se escuchaban pero yo estaba solo, fue mi reciente trauma al abandono.

Suena simple lo sé pero yo apenas era un niño, alguien que aún creía que todos eran amigos, poder convertirse en superhéroe y vencer a todos los males del mundo

¡Qué inocente!, ¿no?

En aquella vieja casa en el campo que había pertenecido a mi familia hace mucho tiempo tenía la dicha de tener una ventana con una bella vista al jardín, ah, las flores y demás plantas que deleitaban mis pequeños y maravillados ojos, mi pequeña mascota había muerto hace un tiempo ya, en aquel bello jardín lo enterramos, lo que más me dolía era el ya no tener un compañero para poder afrontar la noche.

Mi única compañía terminó siendo un viejo televisor cuadrado, con el que veía caricaturas, y justamente el único programa que sintonizaba a la perfección.....  Looney Toons.

Bugs Bunny el pato Lucas Silvester, Piolín, entre otros personajes, fueron mis amigos por mucho tiempo, no conocía a nadie así que esto era lo más cercano que tenía a un <<amigo>> real, al menos desde que mi pequeño compañero de 4 patas murió.

Y yo estaba solo

No tenía a nadie con quien combatir aquellas sombras deformes, ¿acaso me llevarían?, ¿me devorarán?, esas eran mis preguntas constantes, pero me mantuve firme, me armé con una linterna y encaré a esas sombras, y eran lo que eran.... <<sombras>> simplemente desaparecieron con el toque de la luz.

En la escuela me fue bastante bien, era un niño alegre y normal, según decían yo era muy listo para mi edad, aunque también muy inocente.

Las pesadillas que siguieron no fue a causa del acoso de algunos de mis compañeros, o las burlas que recibí, pero eran lo suficientemente horribles como para ser causa de algo peor.

Ahora mis pensamientos se habían materializado, manchas de odio y miedo los formaron.

El primero apareció de una manera bastante peculiar.

Era más de media noche, estaba viendo otra vez a los Looney Toons, era un capítulo sobre Bugs Bunny tocando el piano, pero otra vez me invadió ese sentimiento, me estaban observando, miré hacia la ventana, era como si alguien me esperara, como si, quisiera que yo fuera allí, así que lentamente me levanté de la cama, agarré la enorme linterna y corrí lentamente la cortina.....

La encendí, ese hermoso valle lleno de hojas y flores de colores, tenía un tono sombrío bajo el manto oscuro de la noche, pero entre tanta penumbra y espesura pude verlo.

Tenía esa misma mirada que recibí aquel día en que regresé asustado a casa, esperando a que mi madre no notara mis lágrimas.

Esa mirada llena de burla y picardía, como si yo fuera su juguete, algo con lo que satisfacer sus mas crueles pensamientos, ese sujeto...., no, esa <<cosa>>, era demasiado alta, vestía un desgastado traje marrón, con un moño del mismo color, una flor marchita en su bolsillo y un sombrero de copa, pude ver una retorcida sonrisa con dientes pequeños y amarillentos, ya la había visto antes y nunca más quería volver a hacerlo.

No pude reaccionar, me paralicé del miedo, el hombre del sombrero empezó a caminar hacia mi ventana, sus extremidades crujían con cada movimiento, daba pasos torpes y exagerados como si fuera una caricatura, cuando estuvo lo suficientemente cerca, cerré las cortinas y corrí hacia la cama, la tenue luz de luna me permitió ver su silueta, escuché otra vez esa respiración agitada.

-No....-No otra vez- Pensé, justo cuando volví a prestar atención a la televisión pude notar algo, el capítulo había terminado, pero apareció una serie que jamás había visto, <<El hombre Feliz en el Jardín de flores>>, sólo era un dibujo muy parecido al del <<coyote y el correcaminos >>, pero con un hombre vestido elegantemente bailado y haciendo bobadas, hasta que mira fijamente a la pantalla y sonríe, después se escucha entre estática  una frase:<<Oye amigo ven, te mostraré algo que te gustará>>. Cerré los ojos del miedo, pero aún así pude oír la estática cada vez mas fuerte, sus palabras sonaron más fuerte en mi cabeza,<<Esto es un secreto, no puedes decirle a nadie>>,<<¿Quién le creerá a un rarito?>>, empecé a llorar y decir-Soy fuerte, soy fuerte, no soy cobarde, soy fuerte.<<Si le dices a alguien, me aseguraré que todos sepan lo marica que eres>>.<<Incluso tu madre te abandonará por lo débil y estúpido que eres>>. Empecé a dar vueltas-¡Ya déjame!, ¡Suéltame por favor!,¡Me lastimas!. El hombre feliz se acerca a mi sábana, siento sus manos delgadas sobre mí,<<Sé que te gustará>>

Despierto, mi madre me llama para desayunar, mis sábanas están mojadas y yo en el suelo.

<<Sólo fue una pesadilla>>

Diario #23Donde viven las historias. Descúbrelo ahora