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El cerebro de Zhilan podría no haber estado cansado, pero su cuerpo seguro que sí, probablemente por su lesión. Terminó durmiendo la mayor parte del día, el cielo ya estaba oscuro cuando se despertó.

No moverse no era un gran problema. Sin embargo, su adicción al tabaco sí. La necesidad de un cigarrillo la estaba volviendo loca y no podía aguantar más.

Zhilan abrió el cajón y sacó un paquete de cigarrillos. Se sentó, ajustando la cortina antes de abrir la ventana. Colocó el cigarrillo entre sus labios antes de encenderlo.

Zhilan sintió que su cuerpo se calmaba mientras tomaba largas caladas, con cuidado de exhalar por la ventana. Lo último que quería era que sonara la alarma de incendios de su habitación, sabiendo que Renjun podría asesinarla si eso sucedía.

Justo cuando el cigarrillo estaba casi acabado, la puerta se abrió de golpe, haciendo que su cabeza girara.

Mierda.

Era Jaemin y no se veía feliz, ni un poco. Zhilan se quitó el cigarrillo de los labios, a punto de inventar una excusa cuando Jaemin se acercó a ella, pero para su sorpresa, colocó el cenicero de la sala de estar en su mesita de noche.

"Trata de no incendiar este lugar, por favor." Jaemin dijo suavemente antes de alejarse. Zhilan parpadeó un par de veces antes de meter la colilla del cigarrillo en la bandeja.

"¡Jaemin!"

Jaemin se detuvo y volvió la cabeza. "¿Sí?"

"Um. Gracias." Zhilan dijo en voz baja, sin saber muy bien por qué lo había llamado en primer lugar.

Jaemin asintió lentamente con la cabeza, ajustándose la chaqueta de cuero antes de continuar fuera de su habitación y cerrar la puerta detrás de él.

...

Cuando Jaemin llegó a su habitación al día siguiente, Zhilan notó que había mucha más cosas que comida en sus manos.

Su cabello también estaba desordenado, como si acabara de regresar corriendo de algún lugar. "¿Saliste esta mañana?"

Jaemin asintió. "He preparado un algo más de comida hoy".

Zhilan miró fijamente el iPad y el paquete de chicle que sostenía en una mano, y un plato con pan en la otra.

"Mientras comes esto," Jaemin colocó el plato en sus manos, "te explicaré todo lo demás".

Zhilan asintió con la cabeza, demasiado hambrienta para rechazarlo.

"Bien, te desbloquee esto, que fue lo que tenía que recoger temprano esta mañana". Dijo Jaemin, levantando el cenicero y colocando el iPad en su lugar. Zhilan inmediatamente se tragó el pan.

"Espera, ¿qué estás haciendo?" Zhilan exclamó mientras Jaemin también sacaba los cigarrillos y el encendedor de su cajón.

"Escucha." Instruyó Jaemin, deslizando los nuevos artículos en su bolsillo. "O te voy a quitar el iPad".

Zhilan no estaba muy feliz, pero dejó que el chico continuara mientras levantaba el paquete de chicle.

"Cuando tengas el antojo de fumar, mastica esto en su lugar". Dijo Jaemin, agitándolo antes de colocarlo encima del iPad. Sin embargo, Zhilan no estaba muy emocionada.

"Sabes que dejar de fumar no es tan fácil, ¿verdad?" Dijo Zhilan, empujando agresivamente un trozo de pan en su boca. "Si lo fuera, lo habría dejado hace mucho tiempo".

³𝗧𝗛𝗘 𝗥𝗨𝗟𝗘𝗦 ─  𝗻.𝗷𝗺Donde viven las historias. Descúbrelo ahora