Mío ↷ kookmin

Capítulo 6

Seulgi miró por enésima vez a aquél chico de cabello negro y liso que conocía como Jungkook —el novio de su mejor amigo—, el cual estaba hablando animadamente con un chico alto, apuesto y evidentemente de clase.

—Entonces —la castaña miró a su mejor amigo, el cual era sostenido por Hoseok—. ¿Cuál es el plan?

—Primero necesito que Hoseok me suelte.

—Si te suelto tú irás corriendo a ladrarle a ese pobre chico en la cara que Jeon Jungkook es tuyo.

—¿Y eso por qué es malo?

Hoseok bufó.

—Minnie, no puedes ir por la vida gruñéndole a todos aquellos que se acerquen a tu novio como si fueras un perro rabioso y receloso.

Jimin abrió su boquita indignado.

—¿Me acabas de llamar perro rabioso?

—Genial. ¿Por qué esa es la única parte que escuchaste?

Seulgi sonrió al ver la pequeña discusión que ambos hombres habían comenzado, se quedó observándolos un rato hasta que decidió volver a mirar a Jimin. Sus ojitos se abrieron al ver aquella escena.

—¡Se están abrazando!

Entonces Jimin empujó a Hoseok haciéndolo caer al suelo, girando rápidamente su cuello, mirando fijo como los fuertes brazos de su chico rodeaban la cintura del hombre.

Molesto, se puso de pie y caminó hacia Jungkook, ignorando los gritos de sus amigos.

Cuando logró llegar hasta el pelinegro, carraspeó con molestia y miró con gracia la carita de sorpresa de su pareja.

—Así te quería agarrar —Jimin dijo, mirando con indignación exagerada al pelinegro—. Estoy acostumbrado a que ridículos como él —señaló hacia el castaño sin pena—, vengan a rogarte un poco de atención, pero nunca pensé que tú serías capaz de complacerlos de esa manera tan indignante, ¡esto se considera engaño, Jeon Jungkook!

Jungkook párpado confundido ante las palabras de su hyung, intentando torpemente de responderle ante aquella tonta acusación sin sentido.

—¿Acabas de llamarme ridículo? —el castaño preguntó, siendo totalmente ignorado por el pálido—. ¡Te estoy hablando piel de harina!

Jimin entonces miró entre sorprendido e indignado a su nuevo archienemigo.

—Por Dios, chico, hay mejores insultos que esos.

El más alto escaneó de pies a cabeza al rubio, riendo sin gracia luego.

—¿Y se supone que tú eres el novio de Jungkookie?

—Sí, y no lo llames con apodos bonitos, yo sólo tengo ese derecho, claro, su mamá también.

El castaño entonces miró al pelinegro, el cual miraba confundido la pelea que anteriormente estaban teniendo.

—Jungkookie —Jimin gruñó—. ¿Cómo puede gustarte alguien como él? ¿Qué puede darte alguien de tan bajos recursos?

—Puedo darle la mejor mamada de su vida.

Jungkook entonces se sonrojó y el de cabellera morena volvió su mirada al rubio.

—Lo que acabas de decir es muy vulgar, a mi tía no le gustan las personas vulgares —una sonrisa apareció en su labios cuando Jimin frunció el ceño.

—¿Y quién es tu tía? No me interesa conocerla.

—Amor-

—Mi tía —interrumpió a Jungkook—. Es la madre de tu novio.

Jimin parpadeó repetidas veces.

—¿La señora Jeon?

El más alto asintió.

Oh, al parecer había metido la pata.