Jhon llegó a casa ese día, cansado como siempre -¿Como te fue hoy, cariño?- le preguntó Stephany
-Bien, cielo. Hay mucha producción de semillas, lo cual es bueno-
-¿Hablaste hoy con Frank?-
-No, no nos encontramos hoy. Seguro le llegó trabajo-
-Seguro tuvo que robar o violar a alguien- dijo stephany con un tono muy sarcástico
-No creo- dijo Jhon -a Frank ya no le gusta meterse en esa clase de problemas-
-Deberías llamarlo- insinuó Stephany -Me preocupa-
-¡jajaja! ¡Si, claro. A ti te preocupa Frank, jajajaja!-
-Será un pobre desgraciado, pero tu lo quieres mucho-
-cierto, lo llamaré-
Jhon tomó el teléfono y marcó al móvil de Frank.
-¿Hola?-
-¿Frank? ¿Dónde andas metido?, hoy no te vi en la cafetería-
-¡Ah si! La cafetería. Perdón Jhon, pero habían un par de asuntos que debía arreglar, jaja ¿recuerdas al tipo que le rompí las ventanas?-
-Algo me dice que esos "asuntos" no son autos averiados- insinuó Jhon.
-Oye, Tenía que hacer algo; dejó un papel en la entrada de mi casa, decía que iba tras mi hermana, Giselle-
-Bueno, está bien que defiendas a tu familia... Pero hay algo que debo decirte...-
-Nos vemos en la cafetería mañana- dijo Frank y colgó el móvil.Jhon dió un suspiro -¿le contarás lo de las excepciones?- le preguntó Stephany
-Es lo mejor que puedo hacer- respondió Jhon; Stephany se quedó callada por un rato y finalmente dijo -Descansa, cariño-.A la mañana siguiente estaba Jhon esperando a su amigo en una mesa de la cafetería, pensaba mucho acerca de todo lo que sucedía al momento, cuando finalmente, llegó Frank
-¿Que más, amigo?-
-Frank, debes parar- dijo Jhon, con un tono cortante
-¿Por qué tan serio?-
-...-
-¿Qué sucede, Jhon?-
-Es que no sé, ni por donde empezar-
-Por el principio- dijo Frank con sarcasmo
-Quizá tengas que quedarte aquí, en la tierra-
-¡¿Qué?!-
-Nos informaron de esto en la planta, la nave no logrará soportar los trecientos millones de personas, cerca de cinco o seis millones de personas deberán quedarse en la tierra, morirán aquí, y tu estás haciendo que te incluyan-
-Tienes que estar bromeando- dijo Frank asustado
-No, no bromeo- dijo Jhon muy serio -Tienes que comportarte bien desde ahora si te quieres salvar-
-¡Callate!- dijo Frank enojado -¿Ustedes los científicos se creen que pueden salvarse y dejarnos al resto aquí tirados?-
-Frank, cálmate, por favor-
-¿Cómo quieres que me calme, si me voy a quedar aquí?-
-Aún no es seguro, puedes quedarte si dejas de ser un criminal-
-Esto es estúpido-
-Escucha Frank, tienes que prometerme que guardarás el secreto, nadie más puede saberlo- Frank se quedó callado
-¡Prometelo!- exclamó Jhon
-Lo prometo- dijo Frank entre los dientes, y enojado se fue del lugar.Las pocas personas que se encontraban allí, unas cinco, se quedaron mirando asombradas -¡¿Qué están viendo?! ¡Sigan en lo suyo!- dijo Jhon, y se fue a la planta.
Cuando Jhon llegó a casa diez horas después, después del trabajo, su esposa estaba comportándose de una forma muy extraña; sus pupilas estaban dilatadas, temblaba al caminar, no podía hablar bien.
-¿Estás bien, cariño?- le preguntó jhon muy preocupado
-Si... Si... E-estoy bien, no te... Preocupes- respondió stephany nerviosa
-¡NO! Tu no estás bien, dime ¿qué te sucede?-
Stephany se puso a llorar inmediatamente
-¿Por qué lloras? ¡¿Qué sucedió?!-
-bueno...- Stephany no sabía ni que decir, se ahogaba en su miedo -Hoy estaba que llamaba un hombre, no quería parar de llamar, me dijo que sabe donde vivimos, y que no dejaramos sola a Lilly-.