Arianna Weasley es reconocida por ser una buena jugadora de Quidditch en los búlgaros. Ella llega a Hogwarts por el torneo de los tres magos, topandosé con su para nada deseada familia.
Arianna era muy diferente a su familia, ya que ella nació siend...
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Cap. I: Mundiales de Quidditch.
Ahí estaba ella, Arianna Nieve Weasley preparándose para salir a jugar Quidditch junto a su amigo y colega Víctor Krum, lista con su uniforme puesto, salió con Víctor a caminar antes de jugar. La joven cazadora de Quaffles caminaba mientras saludaba algunos fans con su mano. Siempre le preguntaban si era una Weasley, por su cabello rubio blanco como la nieve y por ser tan pálida. Ella solo les decía; "Nací siendo albina, por eso soy así" respondía con su dulce voz. Vio una cabellera pelirroja caminar hacia ella, sin poder dar vuelta atrás, suspiró y enfrentó a su hermano mayor Charles Weasley.
—Arianna. —hablo frente a ella el dragonolojistá— Eres una jugadora de Quidditch. —dijo.
—Sí, aprendí del mejor. —respondió con media sonrisa. Su hermano abrió sus brazos y la envolvió.
—Te extrañe mucho Nieves. —murmuró.
—Yo también Charlie. —dijo del mismo modo.
—Tantos años sin verte, desde que me fui. —dijo.
—Estoy muy feliz de que cuides los dragones Charlie. —dijo ella. Ambos desde niños eran amantes de esas grandes bestias salvajes y hermosa. Charlie era "Dragón" y Arianna "Nieves".
—Y yo de que seas una jugadora de Quidditch Ari. —dijo el.
—Ya me tengo que ir Dragón. —dijo ella.
La abrazó por última vez y se fue. Charlie miró a su hermanita menor caminar entre todo ese gentío. Suspiró aliviado que su hermanita menor fuera triunfante y totalmente liberal lejos de su familia y sus ideales raros, sí, él era de núcleo oscuro como Arianna. Dio media vuelta para volver hacia su familia guardando aquel secreto que lleva con orgullo. Arianna regreso junto a Víctor y el resto del equipo. Se colocó lo necesario y sus guantes para no resbalarse de su amada escoba.
—¿Lista Arianna? —pregunto el entrenador a la única mujer ahí. Ella asintió decidida y salió a la cancha como un rayo.
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