Piropos Haikyuu~

¡Grandes Amigos!

—Creo que la cagaste.. —dijo un Matsukawa en shock.

—¡¿Y yo como carajos iba a saber que estaban saliendo?!. —Hanamaki nervioso, empezó a caminar de un lado para el otro.

—¿Oigan que hacen?. —Iwazumi se paró detrás de ellos y los veía con su expresión de siempre. Los otros dos chicos se quedaron quietos. Se giraron, lentamente, Hanamaki rápidamente escondió el celular detrás de su espalda y los dos le sonrieron nerviosos. -¿Ese es mi celular?. -Se acercó a él pelirosa y trato de mirar si lo que escondía era su celular.

—N-no, no lo es. —Trato de esquivarlo una y otra vez. Okey Haijime se estaba enojando.

—Si, si lo es. —Trato de agarrarlo pero el otro no le dejaba. Empezaron a correr, esquivar, y lanzar el pobre celular.
—¡¿Oigan pero que hacen?! ¡Devuelvanme el celular!.

—¡Si lo hacemos nos vas matar! ¡Y no quiero morir virgen!. -Grito Takejiro lanzandole el celular a Issei. El morocho lo tacleo haciendo que tirará el celular a cualquier lado.

—Pero-.

—¿Enserio?. —Matsukawa los miro con una ceja levantada y se acercó, extendiendoles la mano para ayudarlos.

El celular de Iwazumi sonó, haciendo que los tres lo miraran, luego se miraron entre sí y echaron a correr a todo lo que da. Hanamaki agarro las piernas del morocho haciendo que callera.

—¡¿Pero que te pasa?!. —se levantó y empezó a correr de nuevo.

—¡Mattsu no dejes que lo agarre!. —pero Iwazumi fue más rápido que el pelinegro y lo alcanzó primero. —¡Mattsu!.

—¡El fue más rápido! ¡¿Que quieres que haga?!.

Haijime miro su celular, se sorprendió un poco al ver el mensaje que le había llegado de Oikawa, así que lo abrió. Frunció el ceño y empezó a sonreír. Mattsu se empezó a alejar despacio de el, Hanamaki hizo lo mismo.

—Hanamaki, Matsukawa ¿Que significa esto?. —Al escuchar eso sintieron un escalofrío en la espalda, tragaron en seco al ver la sonrisa del morocho. —¿Y?.

—P-podemos explicarlo Iwazumi.

—¿A, si?. —se empezó a acercar a ellos haciendo que los chicos retrocedan. Camino más rápido, y más, hasta que empezó a correrlos. —¡¿Que mierda hicieron?!.

—¡No fue nuestra intención!. —grito el pelirosa agitado por la corrida y asustado, MUY asustado. Nunca antes habían visto a Haijime así, ni cuando Oikawa hacia algo sumamente estúpido y molesto, esta es la primera vez que el se enojaba de esa forma, y, por suerte de nadie, no fue con Oikawa, esto no era nada con lo que le hacía al castaño, nada.

—¡¡Juro que voy a matarlos!!, ¡¿Por qué mierda hicieron eso?!, ¡Saben lo sensible que es Oikawa con esos temas!, ¡Muy sensible!... El e-es sensible con eso. —los dos chicos se detuvieron al escuchar sollozos, se giraron y quedaron en shock, otra vez, al ver al ojiverde parado a unos metros de ellos tratando de secarse los ojos con sus ante brazos desesperadamente. El par se acercó a él.

—Iwazumi...

—Enserio lo sentimos Iwazumi. —dijo Hanamaki sobandole la espalda. —Enserio que no lo sabíamos, no deberíamos a verlo echo, ¡Aceptaremos cualquier castigo!, No escapáremos más.

—¿Aceptaremos? Disculpa pero fue tu idea, tu lo pusiste en marcha, yo te dije que era mala idea.

—¡¿Ah?! ¡Tú estuviste de acuerdo!. —se empezaron a gritar entre sí, olvidándose totalmente de Haijime.

—Chicos. —les susurro. Nada, gritos y más gritos de quién tuvo la idea de esa mierda.  —Chicos. —Iwazumi les pego a los dos en la cabeza haciendo que se callaran. —¡¿Acaso importa quién tuvo la maravillosa idea de esa estupidez?! La cosa ya está echa carajo. —suspiro y empezó a alejarse de ellos.