La leyenda

CAPITULO 5

El finde de semana llegaba a su fin, el domingo por la mañana se sentía la tensión en el aire. Fui directamente al circuito porque quería concentrarme lo mejor posible.
A la hora de subirme al monoplaza ya estaba lista, sabía la meta y como lograrlo, lo único que faltaba era hacerlo.
Para los que quieren saber si lo hice, después de unas largas 2 horas pude pasar a todos mis contrincantes con extraordinarias maniobras que nadie podía creer y al final de todo pude escuchar a mi ingeniero decir: - felicidades Trinidad ganaste la carrera, sos la más joven en ganar una carrera de fórmula 1 todos estamos orgullosos de vos-
Mi emoción se veía cuando baje del auto y salté hacia mi equipo con tanta naturalidad que parecía conocerlos desde años, nadie lo podía creer.
Al final de todo pude demostrar mi talento y dejar a todos boquiabiertos.
Antes de subirme al podio vino Charles corriendo hacia mí con su cara más orgullosa del mundo.
- Muy bien Trini lo lograste - dijo abrazándome por los aires.
- No lo puedo creer Charles enserio - dije y la sonrisa no se borraba ni un poco.
- Yo si, sabía que ibas a ganar estoy muy feliz por vos - termino de decir, me dio un beso en el cachete y se retiró para que yo siga con lo mío.
El subirme al podio fue una experiencia hermosa, no había sentido esto nunca y he ganado casi todas las carreras que corrí.
Me dieron el trofeo y podía ver la felicidad de mi equipo, en ese momento me puse a buscar con la mirada a Charles para mostrarle y encontré algo que me asombró.
Christian Horner el boss de Red Bull en las gradas observando con asombro mi premio.
Eso me sorprendió porque yo sabía que estar en Red Bull podía ser una posibilidad si me la querían permitir y al entender la situación mi esmero sería el triple.