Capitulo 35

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— Entonces.. ¿En qué estábamos? — Kai se iba a acercar pero mi mano choco con su cara impidiendo aquello.

— Si vuelves si quiera a tocarme, te voy a arrancar las pelotas con mis propias manos — El me miro sorprendido y salí disparada Buscando a Lisa.

Me pase las manos por el cabello desesperada luego de que pasaron veinte minutos y no veía rastro de ella y comenzaba a sentir mi ansiedad haciendo entrada. Era tanta la gente y ahora con esto de Lisa y no poder encontrarla que comenzaba después de tanto tiempo a sentir un ataque de pánico. Salí al patio trasero aunque había mucha gente pero no tantas como dentro de la casa. Comencé a mirar alrededor con mi respiración agitada, sentía que me iba a desmayar en cualquier momento.

— Jennie..— Mire a la dirección que me llamaban y pude diferenciar a Sana — ¡Jennie! — Corrió a mi dirección y puse mis manos en sus hombros respirando agitada — Oh por Dios, estas teniendo un ataque. Respira — Trataba de hacerlo pero solo sentía como el pecho se me encogía más y más.

— Lisa..— Murmure sintiendo mis ojos nublarse por las lagrimas que se estaban acumulando en ellos — Necesito, Lisa — Dije respirando pesado y lo último que escuche fue como Sana gritaba mi nombre antes de que todo se volviera negro.

El sonido de la música retumbando por las paredes me hizo abrir los ojos poco a poco y darme cuenta que aun estaba de noche y estaba en la habitación de Lisa.

— ¿Cómo te sientes? — Voltee mi cara despacio al escuchar la voz ronca de mi novia y encontrarla sentada en una silla al lado de la cama con algo en la mano y mirándome con la cara sin emoción alguna pero el brillo de preocupación en sus ojos me decía lo contrario.

— Lisa — Susurre apoyando las manos en la cama para sentarme en ella y mirar — Necesito explicarte — Ella me interrumpió.

— ¿Cómo te sientes? — Volvió a preguntar.

— Bien — Le respondí — Por favor necesito explicarte — Ella llevo el artefacto a su boca y vi como salió un poco de humo de este y luego una gran nube de humo con olor a cereza y supe que estaba con un cigarrillo eléctrico — ¿Desde cuando tienes eso? — Apunte al cigarrillo.

— Desde siempre — Dijo simple y me senté en borde de la cama.

— Lili, necesito explicarte lo que viste — Ella asintió dandole una nueva calada al cigarrillo eléctrico y el humo olía bastante bien — Kai, no sabia que vendría enserio. Antes de que llegaras estaba tratando de que no me besara por eso nos encontraste en esa posición — Ella no decía nada, solo me miraba — Lisa, el me iba a besar, ¿Crees que podría engañarte?, iba a empujarlo antes de que llegaras — Estaba desesperada, ella no decía nada, tenia miedo de que no me creyese.

— ¿Te iba a besar? — Asentí — ¿No lo invitaste? — Negue. Ella se levanto de la silla y camino a la puerta — Cierra con llave cuando salgas — Y con eso se fue de la habitación y yo me levante rápido cerrando la puerta con llave y saliendo disparada por las escaleras parando de golpe cuando la música y el humo, alcohol y olor a de todo me pego en la cara, agite leve mi cabeza y comencé a mirar por los lados hasta encontrar a Lisa caminando en dirección a Kai.

— Oh por Dios — Camine rápido — Lisa — Agarre su hombro y ella me dio el cigarrillo para que lo agarrase.

— Te quiero fuera — Sus ojos echaban fuego. Literalmente lo estaba matando con la mirada y Kai solo sonrío de forma burlona.

— ¿Desde cuando tu pones las reglas? — Pregunto con la quijada apretada al verme detrás de Lisa agarrada a su cintura.

— Desde que esta es mi fiesta y mi maldita casa. Así que te sugiero que salgas por las buenas porque si haces que te saque yo no te va a gustar — La música a este punto había parado y todo el mundo estaba mirando la escena. Lisa había hablado de una forma que hasta yo temí por Kai pero este solo se paraba firme y dio un paso donde Lisa y esta ni se movió. Sentí personas ponerse detrás de mi y al mirar de reojo vi a los amigos de Lisa.

K.O Jenlisa Donde viven las historias. Descúbrelo ahora