Capitulo 4

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-¡Buck, ya regresé!- gritó Steve al entrar a la casa que compartía con su mejor amigo, al no oír respuesta se preocupó un poco, ya que eran pasadas las 6 y se suponía que el pelinegro ya habría llegado desde hace tiempo. Dejo sus cosas en la sala y fue a la habitación del mayor, encontrándolo acostado, totalmente tapado y plácidamente dormido.

"Pobre, su trabajo lo dejo exhausto" pensó con culpabilidad el rubio, cerró la puerta cuidadosamente para no despertar al otro y regresó a la sala, a trabajar con lo que le iba a ayudar mañana al pequeño Peter, pero aun con la constante preocupación hacia su amigo presente en su cabeza.

"Espero que no crea que deba hacer esto solo por mis medicinas"

"Podría conseguir otro empleo, el Sr. Stark paga bien por las clases a su hijo, pero si es necesario podría buscar otro"

"Si tan solo no fuera tan enfermizo, lo podría ayudar más"

Era un sábado por la mañana, ni Steve ni Bucky tenían trabajo hoy, los dos se encontraban en la cocina desayunando, el rubio estaba debatiéndose si cuestionarle sobre su trabajo, ya que en si no sabía en qué consistía, lo único que el pelinegro le decía sobre este era que se la pasaba enfrente de una computadora y contestando teléfonos. Mientras que el mayor solo esperaba que dieran las 11 para ir corriendo a la lavandería y cubrir lo que había hecho ayer.

-Oye Bucky- dijo el menor llamando la atención del mayor.

-¿Si?-

-¿Cómo te fue ayer en el trabajo? Te vi dormido ayer y no te quise despertar- le quería preguntar mil y una cosas sobre su trabajo, pero no quería incomodar a su casi hermano.

-Bien, solo que- "¿qué le invento? ¿qué le invento?" -me ha dado un poco de insomnio últimamente y por eso estaba tan cansado- el rubio lo miró preocupado.

-¿Las pesadillas regresaron?- el pelinegro se quedó inmóvil un momento, las pesadillas, hace casi 2 años que no tenía ninguna –sé qué hace años que no tienes, pero tal vez el regalo que te mando Becca te desbloqueo algunas memorias- el mayor regresó en sí y volteo a ver al menor frente suyo confundido.

-¿Cuál regalo? Becca no me ha mandado nada- ahora fue el rubio quien miro al pelinegro confundido.

-El regalo que te llegó hace unos días, ya sabes el paquete pequeño- tras la explicación daba por el menor, Bucky abrió los ojos como platos "¡Pendejo!" pensó recordando la mentira que le había dicho a su amigo cuando recibió el paquete de Helmut.

-Ah, ese paquete, si, si, amm, no, digo- tartamudeo el mayor tratando de pensar una mentira creíble -ya me acorde del paquete, se me había olvidado, pero no, no te preocupes, las pesadillas no han regresado- sonrió esperando que eso convenciera a su amigo y dejara de hacer preguntas.

-Ah, okey, bueno siempre y cuando estés bien y el trabajo no te sobre exija está bien- respondió sonriendo el rubio y llevando su plato al fregadero.

"Pendejo, se lo creyó" pensó el pelinegro llevando su plato al fregadero.

"Esta idiota si cree que me creí su mentira" pensó el menor viendo a su amigo con los ojos entrecerrados –yo voy a lavar los trastes Buck, ve a descansar un rato si quieres-

-De hecho, voy a ir a la lavandería, ¿necesitas que te lave algo?-

-No, gracias Buck-

Al cabo de 10 minutos Bucky ya se había ido y Steve estaba terminando de secar los pocos trastes que había sucios. Terminó de limpiar la cocina y se dirigió a su habitación, cerró su perta y agarró la laptop que compartía con su amigo, abrió la página del banco y metió el número de cuenta y la contraseña del mayor, él se la había dicho un día en el que no podía ir al banco y el rubio iba a ir en su lugar, y desde ese día nunca se le olvido, por si ocurría alguna emergencia, bueno, he aquí la emergencia.

Sugar ~ WinterbaronDonde viven las historias. Descúbrelo ahora