Sugar ~ Winterbaron

Capitulo 6

Al dar las 6:56 A.M. Steve se levantó para ir al baño, cuando salió fue al cuarto de Bucky, solo para molestarlo un poco dado que suponía que había llegado muy tarde, pero al entrar al cuarto de este no había nadie, estaba completamente vacío, trato de no alterarse, a lo mejor se había quedado dormido en la sala, no sería la primera vez que llega tan cansado que se sienta un segundo en el sofá y se queda dormido, camino tranquilo hasta la sala, ahora si alterándose un poco al ver que esta estaba vacía, no había rastro del pelinegro, el rubio volteo a ver a la puerta, viendo un espacio vacío en los ganchos de las llaves, el espacio donde iban las llaves de Bucky

-Celular- murmuró antes de ir corriendo a su habitación por su celular, desbloqueo rápidamente este y marcó el número del mayor, buzón de voz, marco varias veces más, pero todo era lo mismo, lo mandaba al buzón de voz.

A este punto el rubio estaba llorando y a nada de un ataque de pánico, quedándose sin opciones llamo a su amiga Natasha.

-¿Qué carajos quieres tan temprano?- contestó de mala gana la pelirroja, pero su humor cambio al oír los llantos del chico, preocupándose al instante –Steve, tranquilo, respira y dime ¿qué paso?- dijo más amable la chica parándose de su cama y alistándose para ir a casa de su amigo.

-Es Bucky.... el no... y es tarde... y no sé...- trató de decir entre jadeos y llanto el rubio, la rusa no pudo entender casi nada de lo dicho por el chico.

-Steve, tranquilo, voy para allá, llegó a lo mucho en 10 minutos, respira, tranquilo, no tardo- dicho eso colgó y se apresuró a casa del rubio, agarró las llaves del carro de su madre –se va a enojar cuando se dé cuenta-

Mientras llegaba la pelirroja, Steve se encontraba hecho un manojo de nervios, el llanto ya se había controlado, pero su respiración seguía agitaba, tenía su inhalador a la mano para cuando inevitablemente le diera un ataque de asma, escuchó sonar su celular y fue por el rápidamente, sin mirar el nombre que aparece en el teléfono antes.

-¿¡Bucky?!- dijo algo esperanzado el rubio, rezando porque sea Bucky.

-No, soy el Sr. Stark, ¿qué pasa Steve? ¿estas llorando?- el menor al oírlo se lanzó a llorar otra vez, "¿dónde estás Bucky?" -Steve tranquilo, respira conmigo- Tony intentó calmar al rubio, él ya había lidiado con muchos ataques de pánico como para tratar de ayudar a que el otro se tranquilice, aunque sea un poco –Inhala, exhala, inhala, exhala, así, ¿ya estas algo mejor?- la voz del mayor era calmada y suave, aunque sin duda se notaba la preocupación en ella.

-Si, gracias Sr. Stark, perdón por eso-

-No te disculpes por eso, no es nada, pero dime, ¿qué paso? ¿Por qué estabas llorando?- Steve se debatió sin decirle o no al mayor lo que pasaba con Bucky, por un lado, no quería entrometer al sr. Stark en sus problemas personales dado que la única relación entre ellos es de empleador y empleado, pero por el otro enserio quería sacar lo que sentía del pecho y contárselo a alguien, y dado que la pelirroja no llegaba, le empezó a explicar lo que pasaba.

-Es que mi amigo Bucky se fue ayer en la noche a una cita, y... y yo le dije "bien, diviértete" él me dijo que iba a llegar tarde, pero ya es de mañana y aún no llega y no contesta su celular y... y, tengo miedo, no lo quiero perder a él también- la voz se le fue quebrando conforme hablaba, rompiendo algo adentro del castaño, nunca había oído al menor tan mal, normalmente siempre estaba feliz y alegre y si así se oía, el solo imaginarse como estaba se le rompía aún más su interior.

-Steve, lamento mucho oir eso, ¿hay algo en lo que pueda ayudar?- el no poder hacer nada para tratar de calmar al otro lo hacía sentir muy impotente, el rubio negó con la cabeza un poco antes de contestarle.