Un Sueño Interminable

Buenos días

(Sakuta se despierta bastante agitado)

Sakuta: - ¿Qué es esto?

(Sakuta se quita una especie de casco que tenía en su cabeza)

Sakuta: -Supongo que todas estas máquinas, y cables hicieron que todos se conectaran conmigo.

(Había varias máquinas vacías, con nombres de las personas que entraron)

Sakuta: -Esta era la maquina donde estaba Sai, esta donde estaba el Doc... Mai, Héctor.

(Sakuta corre hacia la máquina de Mai)

Sakuta: -Mai ¿Estas bien? Esta toda llena de sangre. Al igual que yo.

(Sakuta saca a Mai de la máquina, y empieza buscar al Doc)

Voz de computadora: -Felicidades, has ganado la apuesta. En unos segundos vendrán doctores a revisarlos.

(Se abre una puerta de metal y entran varias personas con uniformes de medico)

Sakuta: -Yo te conozco. Eres la que una vez fue a ver cuándo atropellaron a Mai.

Enfermera: -Lo lamento, yo no lo conozco. Pero me alegra saber que está bien.

Supongo que los doctores también eran NPC.

Sakuta: -Por casualidad ¿sabe cuánto tiempo llevamos hay?

Enfermera: -Creo que dos días.

Sakuta: - ¡¿Dos días?! Eso quiere decir que esos cinco años que sufrí como si fuera un verdadero infierno, se resumen a dos días.

Enfermera: -Supongo que sí.

Mai: -Sakuta ¿estás bien?

Doctor: -Señorita no hable.

Sakuta: -Si estoy bien.

Voces distorsionadas: -Despierta, no me mates, jajaja, para ya, (Llantos de personas) Llego the killer bunny -esas palabras se repitieron infinidades de veces en la cabeza de Sakuta

(Sakuta se desmaya)

Mai: - ¿Sakuta?

Durante tantos años eh matado a tantas personas... ¿Por qué yo debería seguir vivo? Desde que mataron a Alicia no había sentido nada hasta que mate alguien, pero el día en el que me aburrí de matar, busque refugio en Mai y Sai, pero no sentía nada. Cuando Mai me propuso ser su novio, tampoco sentí nada, pensé que si aceptaba podría volver a ser normal, pero no paso nada. En el único momento que sentía diversas emociones, es cuando iba a ver a Ricardo, sentía una euforia y adrenalina recorriendo mi cuerpo. Pero por alguna razón cuando me iba... me ponía triste, empecé a depender de su existencia, para yo poder seguir vivo. Pero ahora que no está... ¿Qué será de mí?

(Se escucharía una voz de mujer, al borde de las lagrima)

¿?: -Sakuta, Sakuta, despierta por favor.

Es cierto, tengo una promesa que cumplir.

Sakuta: - ¿Para cuándo es la boda?

Mai: -Sakuta.

(Mai explotarían en lágrimas, y con una sonrisa en su cara le respondería)

Mai: -En tres meses.

Y en tres meses me case con Mai.

Papa: -Y usted señora Mai ¿Acepta a Sakuta como su esposo?

Mai: -Acepto.

Papa: - Y usted señor Sakuta ¿Acepta a Mai como su esposa?

Sakuta: -Acepto.

Papa: -Ya puede... bueno, ya sabe lo que viene.

Luego de aquel maravilloso día, empecé a ir a terapia, para dejar de escuchar las voces. Una vez que deje de escuchar las, voces. Empezaron a controlar mi instinto asesino, con drogas, y una vez controlado eso, tuve que estar en reposo durante un año. Año que no duraría completo.

Mai: -Ya me voy.

Sakuta: -Que te vaya bien.

(Mai cierra la de un portazo)

Sakuta: -Veamos... ¿qué puedo cocinar hoy?

Voz distorsionada: -Despierta.

(De repente se escucha el sonido del metal chocando contra el piso)

Mai: -Ya llegué. ¿Sakuta? Sakuta, ya llegué.

Nota: -Léeme.

Mai: -Y esta rosa... digo nota. Tengo que dejar de ver ese programa.

Nota: - "Mai, no te preocupes, no estoy muerto. Te deje esta nota, para que sepas que no me vas ver por una temporada. No sé cuándo voy a volver, así que si quieres me esperas, si no, no. De cualquier forma, cuídate, te quiero mucho"

(A Mai le saldrían lágrimas de los ojos y con una voz quebrada diría)

Mía: -Sakuta... vuelve pronto.

(Cuatros años después)

(Mai: Ya han pasado cuatro años desde que Sakuta se fue. Aunque no supiera si estaba vivo o muerto. Mantenía el aniño de casada en mi mano. Todavía recuerdo ese día. Estábamos preocupados por cualquier cosa. Bueno teníamos veinticinco... no se podía esperar mucho de dos chicos a punto de casarse. Espero que Sakuta esté bien)

(Abren la puerta)

Sakuta: -Ya llegué.

(Mai bajaría corriendo las escleras, para saltar hacia los brazos de Sakuta)

Mai: -Bienvenido.

Sakuta: -Ya llegué.

Mai: -Bienvenido.

Y luego de cuatro años de desaparecido. Volví a mi casa. Obviamente Mai me castigo, con la ley del hielo durante una semana. Pero aun así estaba feliz de verla. Era la primera vez después de tanto tiempo. Me gustaría decir "y vivieron felices para siempre" pero lastimosamente en la vida real no existe tal cosa como "La verdadera felicidad" y mucho menos dura para siempre.

¿?: -Abuelo ¿Enserio crees que te voy a creer?

Sakuta: -Juan, vamos a hacer una apuesta...

(Juan: Me estaba despertando de un profundo sueño cuando de repente vi a dos chicas. Una me estaba hablando y la otra estaba llorando, a una la reconocí, Pero a la que me estaba hablando no, y decidí preguntar)

- ¿Quien eres?

(La cara de la chica se lleno de una expresión de tristeza y en sus ojos se empezaron a formar lagrimas que pronto mojaron la cama a ser la manera en la que estaba llorando)

                                                                         La presentación...

Nota: Va a ver una final alternativo.