⁴𝗦𝗜𝗗𝗘𝗟𝗜𝗡𝗘 ─ 𝗵.𝗿𝗲𝗻𝗷𝘂𝗻 ✔

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Algo lo empujaba hacia este lugar mientras Renjun estacionaba su motocicleta y se quitaba el casco. Observó desde fuera, mirando a la chica que ayudaba a los clientes dentro del restaurante.

Su mente le decía que debería concentrarse en su trabajo, ir a casa o dirigirse al estudio de arte para comenzar con esa estúpida tarea que le dieron ese día. Sin embargo, su corazón le decía todo lo contrario, y Renjun decidió seguirlo mientras se bajaba de la motocicleta y entraba.

Renjun le dio a Doyoung un pequeño saludo antes de tomar su asiento habitual. El restaurante estaba bastante lleno, pero sabía que debido a la presencia de Renjun, pronto estaría vacío.

Se instaló en silencio mientras Jieun y Doyoung se apresuraban a cuidar de los clientes que estaban ansiosos por irse, sintiéndose un poco culpable. Por otro lado, no había ningún otro lugar donde quisiera estar, así que lo dejó pasar, sacando su lápiz mientras miraba la página en blanco frente a él.

"¿Quieres algo?"

Renjun miró hacia arriba, sorprendido de haber escuchado la voz de Jieun. Sacudió la cabeza. "No, estoy bien, simplemente relajándome. No tienes que preocuparte por mí, puedes atender a todos los demás primero".

Jieun asintió con la cabeza y los ojos de Renjun siguieron a la chica mientras iba a ayudar a su primo, admirando sus movimientos. Renjun descubrió que incluso la forma en que caminaba lo cautivó, su cabello se balanceaba en el aire y daba un ligero rebote en su paso.

No puedes.

Renjun se mordió el labio, sabiendo que lo que estaba sintiendo era un pecado para su tipo de gente, pero no pudo evitarlo. No podía cambiar la forma en que se sentía.

De todos modos, es una regla pequeña e inofensiva. Renjun se dijo a sí mismo, pero sabía que estaba lejos de ser cierto. No podía ser estúpido, estaba ahí por una razón.

¿Jieun querría ser un Fénix? Renjun pensó mientras cuidadosamente comenzaba a dibujar la imagen que tenía en mente. Esa es la única salida, ¿no?

Pero, de nuevo, Renjun ni siquiera estaba seguro de si la chica sentía lo mismo. ¿Cómo podía pedirle a alguien que renunciara a su vida y se uniera a una pandilla? Era una idea ridícula, algo que Renjun ni siquiera haría si tuviera la opción.

Sin embargo, Renjun no tuvo elección, su hermana mayor lo arrastró con ella cuando se enamoró. Al principio, Renjun no podía creer que Jiayi iba a arruinar sus vidas con este negocio de pandillas, pero a medida que aprendió más sobre los Fénix y el vínculo familiar que tenían, aprendió a aceptarlo.

Renjun tampoco podía estar realmente enojado. Los Fénix habían traído grandes amigos que se preocupaban por él de una manera que no se podía encontrar en ningún otro lugar. También ayudaron a Renjun cuando se trataba de protección, muchos se burlaban de su pequeño tamaño mientras iba creciendo.

Mientras Renjun miraba a la chica por el rabillo del ojo, sus pensamientos comenzaron a consumirlo y no podía sacarse la idea de la cabeza.

Si ella sintiera lo mismo, ¿estaría dispuesta a arriesgarlo todo por mí?

...

"Pienso que le gustas." Doyoung dijo mientras los dos primos limpiaban los platos sucios.

"Creo que estás asumiendo cosas". Respondió Jieun, secando el plato antes de guardarlo.

Tan feliz como debería haber estado Jieun, no quería escuchar eso. Solo va a hacer mi vida más difícil.