Pays de Manzana.

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Narra T/N 

La presa no nos ha dejado en paz ni a Ben ni a mi, además de que a Evie y Mal las han empezado a molestar igual. Evie más que nada por la fama que está agarrando al hacer moda, por lo que no es tan malo, pero a Mal la molestan por ser la hija de Maléfica y muy buena amiga conmigo y con Ben, cosa que a ella si le molesta.

Estábamos en mi cuarto Evie, Mal y yo, Evie estaba haciendo diseños de vestidos, Mal estaba leyendo hechizos y yo simplemente estaba escuchando los audiolibros y anotando recetas para cocinar.

La televisión estaba encendida, en realidad no le estábamos prestando atención hasta que una reportera comenzó a hablar y mencionar el nombre de Ben, entonces las tres volteamos al televisor con curiosidad.

"Estas son imágenes de la más reciente cita de nuestro Rey Benjamín Beast y su novia T/N White, donde se les ve disfrutando de un delicioso picnic en el lago encantando."

Al escuchar eso me puse de pie y me acerqué más a la televisión, me sentía muy molesta por que al parecer habían estado espiando en nuestra cita sin saberlo.

-Pero -dije confundida y molesta mientras escuchaba las noticias-

-Aw pero se ven tan lindos juntos -dijo Evie mientras veía la televisión-

-Si ambos están bastante bien -comentó Mal viendo la tele igualmente-

-Si nos vemos lindos juntos... -murmuré para mi- Pero de todas formas es molesto que interrumpan nuestras citas -dije igual algo agobiada por eso- aunque no lo note de inmediato

-Hey tranquila, todos sabemos que serás la perfecta princesa,no tienes que preocuparte por estas cosas, lo peor que harías sería rechazar algo sin sonreír

-Vamos Mal, deja jugar -dije algo avergonzada pero un poco más aliviada-

El ser una princesa a la cual literalmente le exigen perfeccionar todo lo que hace no era lo más complicado, era difícil si, pero mi mamá me crió como una princesa, así que podía arreglármelas bien, lo que me incomodaba y costaba más era saber que todos en Auradon sabían lo que hacía, como hacía y como me veía mientras lo hacía, eso si era muy incómodo.

Las clases estaban acabando por el día de hoy, Ben y yo estábamos charlando en el patio de la escuela ya que teníamos tiempo libre y si decidíamos tener una cita quizás  se nos acabaría el tiempo juntos.

La estábamos pasando muy lindo, como las clases habían terminado había mucha menos gente caminando, la mayoría prefería quedarse en sus dormitorios, comer en la cafetería o en todo caso salir de la escuela, así que estaba bastante vacío.

-Uhh Ben -comenté luego de leer un texto que mi mamá me había mandando-

-¿Si? -preguntó Ben mientras me veía-

-Llegaron paquetes a mí casa ¿Puedes acompañarme a ver qué son? -le pregunté, ya que si él me iba a dejar podíamos pasar un poquito más de tiempo juntos-

-Claro, por qué no -respondió con una sonrisa-

Él llamó a una limusina y juntos fuimos hasta mi casa, donde mamá se encontraba.

-De nuevo gracias Ben -agradecí mientras salía de la limusina, notando como Ben me seguía- no es necesario que te quedes -expliqué, ya que si estaba ocupado no quería retrasarlo-

-Ahora tengo tiempo libre así que puedo quedarme si quieres -dijo dulcemente mientras tomaba mi mano-

Ambos entramos a casa luego de golpear la puerta, y unos segundos después mamá estaba frente a nosotros.

-Hola mamá -la saludé con una sonrisa-

-Corazón hola -dijo abrazándome como si no me hubiera visto en años- hola Ben

-Hola señora Nieves -dijo Ben con una sonrisa también a mi mamá-

La mayoría de personas cercanas a nosotros se refería a mi mamá como "Nieves" siendo como un apodo a la vez que se parecía a su apellido de soltera.

-Los paquetes están en la mesa, no los abrimos pero parecen delicados así que tengan cuidado -comentó mamá apuntando al comedor de la casa-

Mamá se fue hacia su estudio y junto a Ben fuimos al comedor, para ver una pila de cajas y cestas muy bonitas en la mesa.

Comenzamos a abrir todos los "obsequios" para descubrir de inmediato que eran enviados de los habitantes para mi, era raro pero sentía que era algo lindo.

Cuando terminamos de desenvolver todos obsequios notamos como 9/10 eran pays de manzana, todos caseros y hermosos.

-Por el amor de -murmuré al ver la pila de pays en mi mesa-

-Son demasiados -murmuró Ben con la misma sorpresa que yo-

-Ben, no puedo comerlos -comencé diciendo nerviosa- es muy lindo y todo pero no tengo ni idea quién los envió, y sé que tú crees que todas las personas en Auradon son honestas y no pueden hacer ningún mal pero conociendo la historia de mamá no me quiero arriesgar a comer algo de desconocidos, en especial si ese algo trae manzanas -hablé rápidamente por los nervios, aun así Ben pareció entenderme a la perfección-

-Hey, descuida, te entiendo -dijo Ben sobando mis brazos para así calmarme- además son muchos pays, por más que los comiéramos la mayoría se echaría a perder 

Antes de seguir hablando, la puerta se abrió, ya que mamá estaba entrando al comedor curiosa de los paquetes.

-¿Y qué eran los pa-? -interrumpió su pregunta al momento de ver la pila de pays sobre la mesa, cambiando su expresión a una más seria- Olvidenlo -dijo seriamente para salir del comedor- buena suerte 

-Wow, se ve que realmente no tiene ganas de lidiar con esto -dijo Ben ligeramente sorprendido por la reacción de mi mamá-

-¿Quién puede culparla? -admití aun viendo la puerta por donde salió-

-Buen punto

Al no saber que hacer con tantos pays, lo único que se me ocurrió es que podría llamar a Mal y que me ayudara un poco para asegurarme que eran seguros para comer, y quizás compartirles un poco.

Luego de llamarlos a los cuatro y asegurarme que vendrían, Ben y yo comenzamos a organizar un poco el comedor, llevé los demás obsequios a mi cuarto y Ben guardó un par de pays en el refrigerador.

Mal, Jay, Carlos y Evie llegaron, y cuando los guié al comedor, la primera en hablar fue Mal.

-¿Qué sucede? -preguntó, pero se interrumpió a si misma al ver la mesa del comedor- Wow esos son muchos pays

-Estoy al tanto -dije con una sonrisa nerviosa-

-¿Son tuyos? -preguntó Evie algo confundida mientras se acercaba a la mesa-

-Técnicamente, pero no podemos hacer nada con ellos así que -dije, siendo interrumpida por Carlos-

-Nos llamaron a nosotros para comerlos ¿Verdad? -preguntó, pero antes de que pudiera responder, Jay habló-

-Por mi bien, gracias chicos -dijo Jay sentándose en la mesa, siendo detenido por Ben- ¡Hey!

-En realidad era para que Mal -Ben dijo apuntando a los pays, dándole entender a Mal nuestra idea-

-Ni lo menciones -dijo Mal ligeramente orgullosa para levantar su libro, el cual llevaba a todos lados últimamente- no sospecho ni me quejo pero evitar envenenamientos quiero -dijo para así hechizar los pays-



Aceptada [Descendientes Ben y Tu]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora