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Pov.Narador/ra

«•••»

El piso se encontraba manchado con aquel líquido carmesí que no dejaba de bajar de su rostro.

Gritos de dolor escapaban de su garganta, no podía contenerlos, no después de sentir como aquel frío metal se incrustaba en su rostro.

Las lágrimas bajaban de su mejilla combinandose con su sangre.

Un horrible dolor invadió su cuerpo, lamentablemente no era por su herida sino por otra cosa.

–USA... C-cuidalo por mi–

«•••»

El americano despertó de aquella pesadilla, su corazón latía a mil por hora mientras varias lágrimas bajaban de su rostro, aquello había sido tan real.

–USA, ¿estas bién?–

Miro a su lado encontrándose con un adormilado ruso el cual le veía con preocupación.

–y-yo... – respiro un poco para intentar calmarse –lo siento ¿t-te desperté?– pregunto mientras que se limpiaba las lágrimas que aún bajaban de sus ojos.

–no, estoy despierto desde hace un rato, no puedo dormir bien sin mi peluche– comento con algo de vergüenza –pero no me cambies el tema, ¿que tienes?–

–solo tuve una pesadilla, no es nada–

–USA –

–es encerio, no pasa nada– formó una pequeña sonrisa –mejor intentemos dormir un poco más, aún es demasiado temprano–

–bien, pero en la mañana me dirás lo que tenías ¿ok?–

–si, claro–

Y así ambos volvieron a acomodarse entre los sacos de dormir, USA había logrado conciliar el sueño mientras que Russia se mantuvo despierto mirando al estadounidense, quería acercarse y abrazarlo como lo hacía con su oso de peluche pero no se atrevía a hacerlo.

✨✨✨

Ya era de mañana y los norteamericanos menores se encontraban en la cocina preparando el desayuno el cual consistía en unos panqueques con miel y frutillas.

Al terminar de preparar el desayuno USA le sirvió a Canadá y a Russia los cuales habían quedado maravillados con la comida.

–yo los hubiera hecho mejor– bromeó el canadiense mientras llevaba un trozo de comida a su boca.

–si aja– soltó el mexicano entre risas –pues a la próxima los haces tu por que yo no te voy a volver a cocinar–

–Méx era sólo una broma–

USA soltó una risita al ver la cara del canadiense, luego volteó a ver al ruso el cual comía alegremente.

–¿y que te parecen?– pregunto el americano con una sonrisa.

–¡estan deliciosos!– expreso con alegría –no sabía que cocinabas tan rico–

–si, bueno después de vivir solo por varias décadas uno aprende varias cosas– contestó apenado.

–oye Rusky, cocinar no es lo único rico que hace USA si es que me entiendes– comento México mientras que giniaba el ojo.

El pobre estadounidense no pudo evitar sonrojarse por lo dicho, miro molesto al mexicano para luego darle unos golpecitos en el brazo.

–como que no entendí– soltó el ruso confundido.

Los mayores ahí no pudieron evitar soltar unas cuantas carcajadas por lo inocente que podía llegar a ser el de ushanka, USA sólo negó con la cabeza mientras que le pedía al ruso que olvidara lo dicho por el latino lo cual hizo... O al menos lo ignoro.

–bien, creo que ya debemos irnos– informó el de la hoja de Maple (que parece maria juana pero roja alv).

–¿tan pronto?–

–lo siento bro, pero tenemos cosas que hacer, ¿no es verdad takito~?–

–si, lo lamento wey, otro día volvemos y vemos una película... Que no sea de terror–

–ok, ok. Bueno, se me cuidan–

–chau USA–

–bye hermano–

Y así la pareja de norteamericanos se marchó dejando completamente solos a ambas potencias.

–bien... ¿me dirás qué tenías anoche?– pregunto Russia mientras se cruzaba de brazos.

Continuara...

°•''øjøs de cªchørrø'•°Donde viven las historias. Descúbrelo ahora