Y de pronto, cuando creo estar tranquila, llega eso.
Aquella oscuridad que me invade tanto, que oscurece mis momentos de luz, que opaca el poco brillo restante en mi corazón.
Nunca es suficiente, no importa cuánto haga, cuánto lo esquive, nada tiene importancia. A pesar de que intente rescatar un poco de paz, de un momento a otro se esfuma como si se tratase de una estrella fugaz.
Mi sol se apaga lentamente, imposible de generar más combustible. La sombra se acerca cada vez más y cuando parece irse, siempre vuelve a atacar.
Me atrapa, no me puedo escapar, no puedo liberarme, ¿hasta cuándo será?
Sólo quisiera irme, correr, sin ver atrás, sin ver nada más, sólo escapar sin rumbo. No importa si me pierdo, quizá así esa sombra no me vuelva a encontrar más y pueda estar a salvo.
Quienes me extrañen, me podrán buscar. A los que más quise, siempre los voy a necesitar. Nada me haría mejor que me acompañen, pero por favor, no arrastren con esa oscuridad, no la traigan de vuelta, que por ella huí.
Desde que me ví rodeada de esa extraña sombra invencible, entendí que lo único que necesitamos en la vida, es paz y libertad, justo es lo que me roba esa oscuridad, maldita oscuridad.
ESTÁS LEYENDO
Escritos 🖤
PuisiA veces me siento inspirada, en mis momentos más emocionales de mi vida cotidiana, así que me pongo a escribir. 💌