"Estate quieto" se queja por décima vez al notar como Taehyung no deja de removerse y eso no le deja trabajar su magia como debería. "No te aviso más, a la siguiente te pongo un hechizo para inmovilizarte."
El pelirrojo cierra los ojos con fuerza por el dolor de su hombro. Por más que intenta estarse quieto es difícil cuando lo que Hoseok está haciendo le provoca tanto dolor.
Debería estar acostumbrado porque es algo que lleva haciendo desde hace siete años, pero el dolor es tan real que incluso a veces le quita el aliento, por lo que tiene que estar tumbado en cada sesión que tienen.
Gracias al cielo no dura más de quince minutos y puede cubrirse con su camisa de nuevo, tapando así aquello que evita mirar siempre por los malos recuerdos que le trae. "Gracias, Hobie" su voz sale rasposa, sintiéndose débil y se apoya en la mano del brujo para levantarse.
"¿Te acompaño a por algo de comer?" la preocupación en su mirada le provoca una pequeña sonrisa triste.
"Estoy bien, no te preocupes" una vez sus pies tocan el suelo y no se siente mareado, da un par de pasos por sí mismo. "Iré a ver a Yoongi, tú prepárate para la fiesta."
No muy convencido asiente y se despiden en el pasillo, donde en cuanto la puerta se cierra se tiene que sujetar de la pared porque siente que sus piernas cederán en cualquier segundo. Suspira pesadamente y se fuerza para llegar hacia donde el mayor se encuentra, pues es el único que puede ayudarle en ese momento.
Siguiendo sus instintos lo encuentra finalmente, mas no solo y eso le echa para atrás al no querer ser visto de esa manera. Sin embargo sabe que es demasiado tarde para esconderse cuando la mirada de Jimin le atrapa y por como sus ojos se agrandan sabe que se ve como la mierda.
"¡Oh, Tae! ¿Estás bien?" le escucha preguntar, provocando así que los otros cuatro vampiros se giren para verle.
Yoongi se acerca rápidamente a él, tomándolo por la cintura y sentándolo en el sofá de la sala. Mira a su alrededor y con seriedad echa a todo el mundo de ahí. "Fuera todos, id a descansad a otro lado" ordena.
Nadie pregunta y hacen lo que les dice, todos menos ciertos vampiros de ojos azules, que miran la escena sin saber lo que deben hacer. "¿Nos vamos también?" pregunta Namjoon.
Taehyung sujeta la muñeca de Yoongi para mantenerlo cerca. "No hace falta" responde con dificultad. "Solo necesito su sangre y por eso les echó, pero vosotros podéis quedaros" explica.
"¿Seguro? Eso es algo íntimo" insiste Jimin esta vez.
"Si Taehyung está bien con que os quedéis entonces yo también" se encoge de hombros y acerca su muñeca a los labios del menor. "Bebe antes de que te desmayes" le alienta.
El pelirrojo no puede evitar mirar a Jungkook antes de hacerlo y nota su rostro diferente, como si tampoco estuviera en su mejor estado físico. Mentalmente se asegura de preguntarle luego y desviando la mirada comienza a beber de Yoongi.
Ser el vampiro que le convirtió le hace ser la mejor opción de sangre de la que puede alimentarse en situaciones extremas de debilidad como esta. La conexión de ambos también les ayuda con solo estar cerca el uno del otro y aunque nada de eso es romántico, saben que conlleva la misma intensidad que al estar enamorados.
Todavía recuerda la vez en la que tuvo que explicarle a Seojoon el tipo de conexión que tiene con Yoongi y tuvo que ponerlo al mismo nivel que cuando los licántropos crean un lazo con sus parejas. Prácticamente es igual. Pueden sentir al otro cuando están cerca, sentir sus emociones e incluso si se practica, pueden comunicarse mentalmente. Así como alimentarse del otro para recuperar fuerzas en situaciones extremas.
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Sorry ღ kookv
FanfictionTaehyung era humano y aun así aceptó a Jungkook, un vampiro, como si fuera uno más. Sin embargo el destino es cruel y les separó en cuanto Taehyung fue asesinado cruelmente por su pueblo tras enterarse de que supo de la existencia de vampiros y nunc...