ＭＡＲＣＡＤＯ ＰＯＲ ＬＡ ＣＲＵＥＬＤＡＤ - [ NAMJIN ]

🥀 ¿Una vida o el infierno? 🥀

Era un chico listo, conocía de la vida gracias a Kang. Sabia el significado completo de lo que era ser omega de un alfa y también sabía que él no debía ser omega de un hombre que le doblaba la edad, era ilegal pero el alfa era rico, no importaba si era legal o no. El nombre del alfa era... era... en realidad no quería recordarlo. Era un hombre que dirigía una mediana empresa, no era tan rico más si lo suficiente para una casa decente, un carro de lujo y comprar un omega joven y lindo. Jin era delgado de facciones bonitas y suaves como las de un omega promedio.

—Estas demasiado flaco, no hay de donde agarrar, come más —dijo el hombre tras haber terminado de usar el cuerpo del omega.

Jin se hizo bolita en la cama, apenas tenía una semana como para recuperar el peso que nunca tuvo en años. ¿Llorar? claro que estaba llorando, lo hacía hasta quedarse dormido, al hombre no parecía molestarle ya que no le pedida que se callara por lo que lloraba a todo pulmón. El alfa abusaba de el cada día, el primer día no fue brusco ya que Jin no se resistió y claro cómo se resistiría luego de tremenda paliza que le dio tras darle una patada en la ingle y huir despavorido al segundo piso. No quería morir a golpes, le dejo usarlo.

La estancia en corea del sur duro tres días más, después viajaron a Canadá. Llegar a un país desconocido con costumbres desconocidas e idioma desconocido fue difícil, saber que estaba aún más lejos de sus hermanos fue lo peor, creía nunca los vería, aunque no debería tener esas esperanzas ni estando en el mismo país.

Los siguientes dos años pasaron en un doloroso infierno. Violación tras violación, golpe tras golpe si se resistía, desgarramientos internos por ser según su alfa "un frágil e inútil omega", no salía de casa simplemente se le cambiaba constantemente a jaulas más grandes, por lo que se veía y el alfa decía, cada vez le iba mejor en el trabajo. Cuando el hombre estaba de buenas trataba a Jin como un rey, le daba lujos e incluso lo llevaba a conocer distintos lugares siempre y cuando se comportara como lo que ahora era "Un omega respetable de alta sociedad", aprendió a golpes que cuchara debía usar, que palabras debía conocer, quizás y eso era lo único bueno que tenía, se le dio educación para que en un futuro lo pudiera presentar a sus amigos.

—¡MALDITA SEA! —el alfa le propino tremendo golpe que sintió la mandíbula se le rompería —NO PUEDES PROCREAR UN MALDITO HIJO.

"ESPERO NO HACERLO SI SERA UN MALDITO HIJO PARA TI" los pensamientos solo se quedaron en su mente.

No iba a ser presentado a los amigos del hombre hasta no darle un hijo ¿Por qué? Jin lo sabía, si no le daba un hijo se desharía de él y traería a otro para que ocupara su lugar. Todas las noches se preguntaba si suplicarle al cielo hacerlo infértil era efectivo, lo hacía porque no quería que su hijo se enfrentara al mismo hombre que él, en ese caso prefería morir, por primera vez prefirió la muerte antes que la vida.

Dos meses después fue llevado al hospital para hacerle análisis, dos años era tiempo suficiente para dejarlo embarazado, el alfa pensaba que era un omega inservible. No negaría que ese día luego de recibir los resultados tuvo miedo, miedo de que resultara infértil, miedo de lo que le pasaría. Encerrado en la habitación escuchó el alboroto en la planta baja, escucho cosas romperse, gritos del alfa exigiendo que se largaran de la casa a los que intentaban pararlo, fue una pesadilla. Jin se refugiaba bajo las sábanas esperando el momento en que la puerta se abriría y lo recibiría la muerte.

Para fortuna o no fortuna eso no paso. El alfa desapareció por varios días y cuando regreso, pasaron cosas aún más inimaginables. Esa noche fue la primera en que no fue tocado.

Al día siguiente en el desayuno volvio a pasar otro suceso asombroso.

—Ten —el alfa le extendió una carpeta —son tus papeles y un boleto de avión a corea. Vete.

El hombre tenía un semblante frio y triste, Jin se preguntó si ese hombre tenía sentimientos después de todo. A pesar de la oferta no se fue, no olvidaba que era un omega marcado, si se alejaba del alfa y el lazo se rompía, moriría. Así que no se fue, se quedó.

Otro día después el alfa se sorprendió de verlo aun en la casa.

—Te dije que te fueras.

—Me marcaste —recordo, se pasó los dedos por la marca.

—Soy infértil, no me sirves, nadie me servirá —confeso en tono neutro.

La vida le seguía trayendo sorpresas. Su rostro de sorpresa irrito al hombre, el alfa volteo a otro lado.

—Sigo siento tu omega —murmuro.

—Lo que acabo de descubrir me hizo darme cuenta de lo maldito que fui contigo, no pediré que me perdones porque sé que es imposible a cambio te doy algo más —Jin lo miro sin comprender —te doy una opción Jin.

—¿Cuál? —pregunto dudoso, no confiaba en el hombre.

—Una cicatriz. Romperé el lazo y podras irte.

No le creía, no podía confiar en el hombre que le destrozo por los últimos dos años. Se quedo en la casa simplemente por supervivencia. Un lazo no se podía romper, no moriría de esa forma, no a sus dieciocho años.

Hola guys

Aquí el segundo capítulo, me ayudarían mucho votando y comentando, esperó les este gustando la historia 🍂🤎