Luna

Capítulo-II

.¿No les pasa que, cuando planean o fantasean con algo que va a suceder y te emocionas por que llegue ese momento, al final no pasa nada de lo que planeaste o fantaseaste? Éso me paso a mí, pero nunca pensé que mi desilusión terminaría siendo extremadamente perturbadora. Fui estúpida al pensar que por fin sería completamente feliz y que por fin disfrutaría buenos y cálidos momentos junto a mi familia. Se me había olvidado que la soledad y la tragedia me persiguen como si de mi sombra tratara.

        .Allí estaba yo, paralizada, el sudor frío corría por mi frente y mis manos no paraban de temblar. Podía visualizar las únicas escaleras que llevaban a la segunda planta de la casa, encima de estas yacía el cuerpo de alguien tirado encima de estas. Lo que me puso en aquel estado, fue el enorme charco de sangre que caía desde aquel cuerpo en las escaleras hasta debajo de mis grises zapatos de tacón bajo; aquel viscoso líquido ya estaba un poco seco así que mis zapatos se sentían pegajoso al caminar.

        .No deje que el pánico me dominará y como la casa tenía todas las ventanas cerradas tuve que ir hacía el interruptor de la luz para poder ver bien quien era el dueño de aquel ya viscoso líquido. De espaldas a la escaleras y con la mirada fija en el interruptor, inhale y exhale lentamente. Tome un poco de valor de sabrá Dios donde y ne voltee hacía aquella pobre persona.

-No puede ser...- Pronuncié eso al darme cuenta de quién era. Mi padre yacía en las escaleras, acostado boca abajo, manchando de sangre sus ropas con su propia sangre. Fui rápidamente hacía él para cerciorarme de que estuviera bien.

       . Si lo sé, fui muy tonta al pensar que estaba bien. Me agache cuidando de que mi vestido no se manchase con la sangre que estaba bajo la suela de mis zapatos y lo voltee para ver su rostro, me espanté. Estaba lleno de moratones, su boca estaba repleta de sangre, su mandíbula rota y casi colgando en su rostro; uno de sus ojos se salió, pero no lo suficiente como para que este colgando y pude ver con claridad como encima de sus cabeza se podían ver levemente sus sesos.

        .Ahogue un grito de horror tapandome la boca con mis manos. Di una arcada por el inmenso asco que sentí al ver aquella escena. Pero de alguna forma no vomite.

       .A pesar de estar agachado, mis piernas temblaron y caí sentada en el suelo manchando mi blanco vestido de sangre. Al colocar una mano detras de mi para no caer de espaldas al suelo, sentí algo frío y al parecer metálico. Rápidamente voltee a ver que era lo que había tocado. Era un bate de aluminio repleto de sangre.

-"Así que lo mataron a batazos"- Pensé horrorizada, podía imaginarme los gritos de dolor de mi padre al sentir como aquel frío bate golpeaba bruscamente contra si cuerpo provocándole un intenso dolor que de seguro le hacía desear el morir en ese momento. Había muerto con el dolor y el sufrimiento reflejados en su rostro.

        .Torpemente me levanté, a pesar de aún sentir nauseas fui apresuradamente en busca del teléfono de la casa; no tengo mi propio celular ya que todavía no tengo el dinero suficiente como para comprarme uno. Busqué el teléfono en la sala y la cocina pero no lo encontré. Fui hacía la segunda planta y entre en la habitación de mi padre y de Sofía.

        . Me volví a llevar otra no muy agradable sorpresa. Sofía estaba acostada encima de la cama matrimonial, con la garganta abierta y con un enorme charco de sangre que manejaban las sábanas y el suelo debajo de su cuerpo.

        . Con los dedos de mi mano temblando sin cesar, el aire entrando dificultosamente a mis pulmones, el sudor frío corriendo apresurado por mi rostro y mis ojos un poco nublados por las lagrimas que llevo conteniendo desse hace un buen rato. Agarré el teléfono que estaba en la mesita de noche justo en el lado donde se encontraba acostada Sofía, salí de la habitación y marque el número de emergencias con torpeza.

-911 ¿Cuál es su emergencia?- Contesto a mí llamada un señor de voz algo ronca. Yo rápidamente y casi a gritos le respondí a su pregunta.

-¡Mande para acá a la policía! ¡Mi padre y...y mi madrastra fueron asesinados! Por favor, ayúdeme!- Le gritaba al pobre hombre de el otro lado de la línea telefónica, aunque cualquiera lo haría si se encontrara en la misma situación que yo.

-Bien, digame la dirección del lugar donde se ubica y probablemente lleguen en 10 minutos-

-Ha si, vivo en la calle XXX en la casa número XXX-

-Dentro de poco una patrulla llegara a su casa. Por favor, traté de mantener la calma y esperé a que ellos lleguen.- Un suspiro de alivio salió de mi persona al escuchar aquellas palabras.

-Muchas gracias- En serio dije esas palabras de todo corazón.

       . Se colgó la llamada y coloqué el teléfono encina de una mesita que había de adorno en el pasillo. Pero entonces la imagen de Ashley apareció en mi mente como si del flash de una cámara se tratase. Me undi en la preocupación.

       .Corrí desesperada en busca de Ashley, revise debajo de todas las camas y dentro de todos los closet, seguramente se escondió en alguna parte. Pero nada, no la encontré. Busqué en el garaje, pero tampoco se encontraba allí. Registre cada rincón de la casa y no la encontré

-No está. ¡¿Por qué no está aquí?!- Grité llena de desesperación y preocupación.

        .Entonces recordé de qué aun no había revisado el sótano. Corrí a la segunda planta ya que el sótano se situaba encima del segundo piso. Casi caigo por las escaleras al subirlas torpemente. Pero cuando llegue todo estaba oscuro, la ventana estaba sospechosamente tapada con algo que no alcanzaba a ver y había un horrible olor. Pensé que sería alguna rata muerta, hace años que un esterminador de roedores no pasaba por aquí.

-Ugh...que asco- Era extremadamente asqueroso aquel olor y como todavía tenía algo de nauseas me hacía sentir mal.

        . Me dirigí hacía la ventana tocando las paredes ya q no veía muy bien y de seguro me tropezaba con el montón de cosas que habían allí. Cuando por fin alcance la ventana, le quite la negra sábana que la tapaba. Me gire para fijar mi vista en el centro del sótano.

-¿Pero que mier..?- Al principio una rata muerta capto mi atención, ya suponía el que fuese ese el causante de aquel horrible olor. Pero entonces mis palabras fueron cortadas al levantar la mirada de esa rata y fijarme en algo mucho más importante.

        .Ashley estaba sentada en una silla que estaba mirando hacía la ventana. Mis piernas perdieron fuerzas y me desplome de rodillas hacía el suelo. Seguí mirando de abajo hacía arriba a mi hermana. Nuevamente el sudor frío bañaba mi cuerpo. Fue la escena más horrible que había presenciado en mi vida.

        . Ashley, estaba amarrada de manos contra en la silla, no tenía sus ojos y solo se podían ver dos agujeros en su rostro y su sangre simulaban sen las lágrimas que seguramente Ashley no pudo derramar en medio de su sufrimiento. Su boca era abierta forzadamente por unis pequeños ganchos que estaban amarrados en el espaldar de la silla, al ya estar demasiado tiempo así los bordes de su boca estaban desgarrados. Sus dientes y lengua no estaban, eso se veía con claridad. Y algo que hasta para mi fue excesivo, sus intestinos colgaban como bufanda en su cuello. Y me fije que encima de una mesita de café vieja y desgastada que había allí, se podía ver que había algo allí. Pero no quise mirar. Mis ojos ya estaban cansados de ver a la muerte acechando en mi casa. Depronto expulse todo lo que había comido ese día en el suelo y vía do por fin sentí que ya nada me retenia ni nada me mantenía paralizada. Solté un desgarrador grito que hasta sentí que mis cuerdas vocales se rompería en ese mismo instante.

        . Repentinamente la Policía entro al sótano y vieron la horrible escena.

        . Empecé a tirar de mis cabellos en un acto desesperado de intentar sentir dolor para saber si en realidad todo lo que me esta pasando es una horrible pesadilla o la cruel realidad.

        . En serio quería que todo esto fuera nada más que una horrible y fea pesadilla.

By:D3ly-Queen