El inicio

31 8 7
                                    

Con manos rápidas y hábiles, acaricio con adoración la suave piel de porcelana, observando maravillando como esta se calentaba con tan solo un suave rose.

- ¡Quitame las manos de encima!

Exclamó iracundo, alejando de un manotazo las extremidades ajenas.

- Deberías aprender a respetar a tus mayores, pequeñín

- Me importa un carajos lo que debería o no hacer

- ¿Creí haberte escuchado decir que dejarías de fumar?

Pregunto con diversión su compañero Hoseok, dejando un par de cafés humeantes sobre la mesa.

- Y lo estoy haciendo. Ahora solo fumo cuando estoy estresado.

- Tae... este es tu quinto cigarrillo en la última hora.

- Y entre más me recuerdes que estoy fumando mucho, más me estresare y por tanto, fumare más.

Con una mueca de resignación, extendió las manos al aire en señal de tregua. En todos sus años como compañeros, habían aprendido de a poco a conocerse, y por lo que veía, su amigo no se encontraba de humor para juegos ni bromitas.

- ¿Tan mal estaba el muchacho?

- Debiste verlo... parecía un ruedor rodeado de bestias hambrientas. Tuve que pedirle al personal médico que abandonarán la habitación para poder quitarle el catéter de las manos.

Inhalando con fuerza, saboreo la última calada de su cigarrillo, pasándose las manos por el cabello con frustración.

- Solo pudimos lograr que se calmara un poco al ver a Do Kyungsoo, después de eso le aplicaron un sedante.

- ¿Sabes lo que eso significa, verdad Tae?

- Ese infeliz, quien quiera que sea, utilizo el cuarto blanco.

- Esto es una porquería....

El cuarto blanco, también conocido como tortura blanca, era un método inhumano de tortura psicológica; poco usado por el tiempo que requería, pero sumamente efectivo. Limitaba a sus víctimas con largos períodos de aislamiento y silencio absoluto. Aquellos que lo conocían de primera mano solían decir que su objetivo era aplastar tu humanidad.

Cuando encontraron aquel pequeño cubículo de 3x3 en lo que debía ser el sótano de la casa, no creyeron que fuera aquello, la situación ya era lo suficientemente mala con una víctima de abuso sexual.

- Bueno, sea lo que sea que hubiera ocurrido, el único que puede darnos las respuestas es Jungkook.

- Dale un poco de tiempo Ho, el chico ya tuvo una crisis nerviosa; demosle un par de días de tranquilidad.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Sep 27, 2021 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Crueles Intenciones [VKook]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora