Capítulo 15

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Capitulo 15

Jay se alzó de mala gana de la cama y se dirigió hacia afuera.

_______ sopló. Estaba muy... demasiado mareada. Y desnuda. Abrió la puerta del baño, dejando uno de los grandes jerséis de Jay, unas bragas y una toalla grande encima de la encimera del lavamanos y la llave de la ducha empezó a expulsar el agua. Un momento. Esperó hasta que estuvo tibia.

- ¿Qué pasa? - dijo Jay algo molesto.

- Los sensores de movimiento han detectado alguna cosa... - miró a Jay-. Exactamente... dos cosas...

Jay alzó una ceja.

- ¿Crees que pueden ser los secuaces de Donovan? - dijo cogiendo las llaves del armario del cargamento. Siva lo siguió.

No tardó mucho en abrir el armario. Los dos se metieron en el gran almacén.

- Esto es una mina. - Sonrió Siva-. Tienes de todo, querido Jay.

- Por algo soy uno de los más... - levantó un par de cajas - destacados. -Sonrió y le lanzó algo -. Toma, creo que es tu favorita.

Siva miró admirado la Goncz-Hi-Tec.

- Como me conoces...

- Ten cuidado, no te quemes. - Sonrió Jay.

- ¿Estás idiota o qué? - Farfulló Siva-. Sé utilizar perfectamente estas cosas. - Apuntó en el vacío, probando la hermosa escopeta de fuego.

Jay cogió una de sus Uzi cargada y se la agarró bien. Cerró la puerta del almacén detrás de Siva y él.

- ¿Quieres alguna arma blanca por si las moscas?

- Dame - sonrió su compañero -. Sabes que puedo se cínico, y no tengo escrúpulos si tengo que acuchillar a alguien.

Jay negó con la cabeza, riendo.

- ¿Puño americano o corvo?

- Ya lo sabes.

Jay le lanzó el cuchillo y Siva lo cogió al vuelo, mientras él se colocaba el puño americano perfectamente en los nudillos de la mano derecha.

________ se metió en la ducha. Cerró los ojos acariciándose el pelo y desenredándolo con los dedos. No estaba borracha, solo se le había subido un poco. Sonrió.
'Supongo que el jodido mareo se me pasará con la ducha'. Empezó a enjabonarse el cuerpo.

De repente sintió como una mano le agarraba la muñeca. Y otra le tapaba la boca. Vio a un hombre vestido de negro, con un pasamontañas, a través del espejo. Puso los ojos en blanco. Otra vez Jay y sus bromas.

El hombre se inclinó hacia a ella. _______ intentó oponerse, aun que se le escapó una risa floja, pensando que en realidad... le gustaban aquellos juegos. Pero se puso pálida cuando escuchó aquella voz... tan diferente al confortable tono de Jay.

- Para de moverte. - Dijo con un acento algo extraño. Quizás ruso-. No querrás que te haga daño, preciosa...

Se levantó algo el pasamontañas. Pudo distinguir algún corto rizo y unos ojos grises como el cielo en una tormenta, a través de los agujeros en el pasamontañas. Le lamió la cara. _______ sintió ganas de vomitar. Algo se clavó en su trasero. Y no quiso saber para nada que era. Le mordió la mano. Él la apartó.

- Serás puta... - masculló agarrándola con más fuerza.

- ¡Déjame! - Gritó ella antes de que el secuaz de Alexander pudiera volver a taparle la boca-. ¡JAY! - Gritó desesperada.

- A estas alturas, tu Jay ya estará muerto. - Se rió él, golpeando a _______ para que se callara. Pero ella hizo caso omiso a sus palabras.

'No puede haber muerto... Es Jay'

- No vuelvas a abrir la boca, zorra. - _______ sintió como aquel hombre se bajaba los pantalones. 'Dios, no... no...'-. Vas a lamentarte... voy a aprovechar este cuerpo antes de matarte como a una cualquiera.

Los ojos de _______ se llenaron de lágrimas. 'Jay, aparece... por favor...'.

La puerta del baño cayó al suelo.

- ¡________! - Gritó Jay acercándose al cerdo mal nacido que tenía agarrada a su... a su chica. Sí, maldita sea, ________ era su chica, solo suya-. ¡Apártate de ella, hijo de la gran puta!

Ni la misma ________ reconoció a ese Jay... lleno de ira. Hasta ella misma tuvo miedo. Cogió al tipo del pasamontañas, arrancándoselo de golpe, lo agarró del pelo e hizo que saliera de la ducha deprisa y corriendo. Ella cayó, sentada en las baldosas. Las piernas no le respondían. Las lágrimas se camuflaban con el agua que seguía cayendo del grifo de la ducha.
La mirada de Jay se cruzó una vez con la de ________. Esa mirada, limpia, segura... la calmó. Sabía que con él, no le pasaría nada. Que estaba a salvo, que la protegería... pero no solo eso. Esa mirada le decía mucho más que aquello. Esa mirada, encerraba tantas cosas que ________ podía confundir con... amor.

Si Jay no paraba mataría al hombre a golpes. Obviamente había perdido la erección que, asquerosamente, antes le había hecho notar a _______. Y él se había percatado de lo que aquel hombre había estado a punto de hacer. Por eso lo había pagado... y tan bien, torturando.

- Jodido hijo de perra, como le hubieras llegado a hacer algo... - dijo Jay encima de aquel tipo, sin dejar de golpearlo-. Te juro que te mato. ¡Te mato!

El corazón de ________ se aceleró. Las cortinas de la ducha cubrían la horrible imagen de aquella pelea en la que por supuesto, Jay iba por delante. Hasta se habían manchado de sangre, y no quería ver ninguna de aquellas sádicas escenas. Pero esas palabras... a Jay le daba rabia... él no estaba golpeando a aquel hombre por que fuera uno de los compinches de Donovan. Él golpeaba a aquel hombre por que había estado a punto de violar a _______. Y era eso lo que causaba la ira en Jay. Y _________ aun se seguía preguntando '¿Por qué? Si ellos dos... no eran nada... ¿no?' Un tiroteo seguido hizo que se sobresaltara. Dobló las piernas y apoyó sus brazos en las rodillas, escondiendo su cara en aquel pequeño espacio que quedaba entre su torso y los muslos. Tenía miedo... miedo de que a Jay le pasara algo. Si a él le pasaba algo, todo lo demás le daría ya igual. Empezó a llorar, rezando por que toda esa mierda terminara lo antes posible. Admitiendo... que por primera vez, estaba completamente enamorada del hombre que la había secuestrado... para protegerla.

Protégeme - Jay McGuinessDonde viven las historias. Descúbrelo ahora