Revenge (Stiam)

Capítulo 7

El chico respiró hondo antes de estirar su mano apuntando al árbol, Peter le había explicado que no solo podía encender y apagar su brazo, sino que podía disparar las llamas. Llevaban tres días en la casa que Peter les había dejado, y que Noah había prometido pagarle en cuanto vendieran la suya de Beacon. En esos días había hablado del poder del fénix, descubriendo pequeñas particulares. Además de las alas, también podía encender sus piernas, haciendo que su carrera fuera rápida y letal. Había practicado lo de entrar al santuario, pero le estaba siendo difícil. Y lo último que había estado intentando era lanzar fuego, pero no había manera de que Stiles lo consiguiera.

- No te sobres fuerces.- Dijo una voz a su espalda, Stiles se giró viendo a Peter y a Liam en la puerta trasera de la casa. Stiles les sonrió apagando sus brazos y aceptando la botella de agua que Liam le ofrecía.- ¿Has practicado la meditación?- Preguntó Peter mientras se apoyaba en el marco de la puerta, Stiles asintió antes de sentarse al lado de Liam en las escaleras.

- ¿Puedo preguntarte algo?- Dijo Stiles mientras suspiraba cansado, Peter asintió prestando más atención.- ¿Cómo sabes tanto de mi especie? Pensé que éramos raros.- Peter suspiró apartando la mirada mientras chasqueaba la lengua.

- Nuestro bestiario tiene una sección muy grande sobre vosotros, por lo que sé uno de mis tratará tío-abuelo se enlazó con una Fénix, obviamente ella duró muchos años más que mi tío, pero ella nos permitió escribir e investigar sobre sus poderes.- Dijo Peter sonriendo con nostalgia.- Por lo que me explicó mi hermana, ella murió antes de poder encontrar un heredero.- Stiles suspiró triste mientras miraba al jardín trasero de la casa.

- Pensé que éramos inmortales.- Dijo Stiles ligeramente confundido, Peter se rio con suavidad mientras hacía una mueca.

- Lo sois, pero no tenéis vidas ilimitadas.- Dijo Peter ganándose una mirada confusa de ambos adolescentes.- A ver, eres inmortal hasta que cedas el poder.- Stiles asintió de acuerdo con ello.- Pero cada vez que mueras y revivas restaras años a tu tiempo con el poder.- Stiles asintió entendiendo ligeramente eso. Es decir que siempre y cuando no muriera demasiado podría seguir vivo y joven hasta que pudiera pasar su poder.

- ¿Cuántos años tengo?- Peter encogió los hombros antes de negar con suavidad.

- Eso solo lo sabrás cuando entres en tu santuario y hables con tu Fénix.- Stiles suspiró mientras asentía, ahora entendía la prisa que tenía Peter porque entrará a ese prado de nuevo.

Peter se fue de allí dejando ambos adolescentes solos, Liam apoyó su barbilla en la mano mientras miraba las marcas que los pies ardientes de Stiles había dejado en el césped. Desde que lo había encontrado espiándoles des de el Jeep azul le había parecido curioso, y no solo porque obviamente tenía un poder atrayente y superior, sino porque parecía tan perdido y vulnerable que a Liam le dio ternura. Ahora que sabía quién era y todo, más que ternura le daba fascinación. Stiles carraspeó consiguiendo que Liam le mirara y sonrió suavemente.

- ¿Cuántos años tienes?- Liam se sonrojó suavemente mientras bajaba la mirada nervioso, era la primera vez que Stiles hablaba con él, siempre estaba entre las conversaciones del chico y su padre, pero nunca intervenía.

- Tengo dieciséis, hace un año que soy lobo, por eso te noté, soy muy sensible aun.- Stiles sonrió asintiendo mientras volvía a beber agua. Liam se quedó mirándolo antes de desviar la mirada ligeramente avergonzado, sin saber por qué le había dado tanta información.

- Yo llevo desde los dieciséis cuidando una manada de lobos inadaptados que no saben ver más allá de su ombligo.- Dijo con un tono de rabia en su voz que llamó la atención del otro lobo.- Un simple humano a cargo de tantos chicos idiotas, era tan frustrante.- Susurró mirando sus manos, Liam acercó su mano al hombro de Stiles y la apoyó allí dándole apoyo.

- En esta manada no somos idiotas.- Stiles se rio mirando al chico con una sonrisa.- Sé que será difícil dejar los hábitos, pero aquí no deberás estar pendiente de nadie, todos hemos sido educados y entrenados, todos sabemos lo que significa la palabra manada.- Stiles asintió abrazando al lobo, este se sonrojó devolviéndole el abrazo.

El menor aprovechó para inhalar el aroma del chico. Era raro, pero ese toque ha quemado le gustó mucho. Liam se separó y se quedó escuchando a Stiles hablar sobre su antigua manada, aprendiendo mucho más del chico. Después de eso ambos practicaron la meditación para que Stiles pudiera entrar a su santuario, pero no consiguieron nada. Liam se levantó y suspiró antes de mirar a Stiles que lo estaba imitando.

- Deberías irte ya.- Dijo Stiles consiguiendo que Liam lo mirara sorprendido, Stiles abrió los ojos antes de negar entendiendo como había sonado eso.- No quería que sonara así, perdón.- Susurró Stiles antes de reírse.- Es solo que mi padre estará a punto de llegar, y lo más seguro es que no haya conseguido trabajo, así que lo mejor es que estemos solos.- Liam asintió más tranquilo al saber el motivo real.- Pero nos podemos ver mañana.- Dijo con una sonrisa antes de recibir un asentimiento por parte del chico.

- Mañana vuelvo al instituto, así que vendré después de clase.- Stiles asintió viendo como este salía por la puerta de su jardín.- ¿Tú no vas al instituto?- Preguntó Liam apoyándose en la verja, Stiles negó con suavidad acercándose a donde él estaba para acompañarlo hasta la puerta principal.

- No, me gradué antes de las vacaciones.- Dijo con pesar mientras se detenían delante de su casa.- Mi manada aparte de idiotas eran despistados y poco estudiosos, así que siempre tenía que ayudarles. Como los conozco bien, me gradué antes para poder ayudarles en la semana de exámenes.- Dijo Stiles encogiéndose los hombros, Liam asintió con una mueca de desacuerdo.

No conocía a esa manada, pero cada comentario le caían peor. Liam suspiró antes de abrazar de nuevo a Stiles y de irse despidiendo de este. Stiles se quedó comprobando que Liam llegaba bien a casa antes de entrar a la suya y preparar la cena. Tenía la pequeña esperanza de que su padre pudiera haber encontrado algún trabajo. La puerta se abrió y vio a su padre con una mueca decaída, ambos se miraron y Noah negó con suavidad antes de caminar hasta su habitación. Stiles suspiró mientras añadía una ración extra de salsa y patatas a la carne de su padre.