Cortos de este bonito shipp.
- Los personajes no me pertenecen, son propiedad de Eiichiro Oda del manga y anime One Piece.
- Mi primer fanfic Zolu.
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Espero que les guste ♡.
[AU: Donde Luffy y Zoro no pudieron evitar amarse.]
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Los jadeos acompañados de los gemidos y el rechinar de la cama ser azotada con fuerza eran los sonidos que se podían escuchar en aquella habitación, el cuerpo perlado de sudor de ambos jóvenes era finamente alumbrado por las luces del anaranjado atardecer que atravesaban el cristal de las ventanas, mientras ellos eran consumidos por la lujuria.
Zoro azotaba con fuerza el interior del pelinegro, el cual se deshacía en gemidos a causa de la increíble satisfacción que estaba sintiendo, llevaban alrededor de dos horas en aquella habitación, dándose placer y amando de forma correcta al contrario. Después de unas estocadas más Luffy se había corrido, derramando sus propios fluidos sobre su estomago, Zoro le siguió después, llenado con sus fluidos el condón, ambos respiraban con fuerza intentando recuperar la respiración, y ambos sufriendo los espasmos que dejó su larga cesión de placer.
Zoro salió con cuidado del interior de su acompañante para después quitarse el condón y hacerle un nudo, lo colocó en el bote de basura que estaba a un lado de la cama y después se desplomó a un lado de Luffy, éste acercó su cabeza al brazo del peliverde y se acurrucó allí, para después posar su brazo en el pecho del peliverde, Zoro acercó sus dedos al lizo cabello de Luffy y comenzó a darle suaves caricias, éste roroneaba totalmente complacido ante las caricias, lo que provocó una ronca risa en Zoro.
Pero la burbuja de amor en la que ambos estaban tan sumidos se vio interrumpida por el sonido de un teléfono, específicamente el celular de Zoro, quién sólo bufó en señal de frustración y simplemente se apegó más al menor, el cual sólo miraba en dirección de donde provenía el ruido, y cuando el ruido fue mucho, Zoro quitó su brazo con delicadeza de debajo de la cabeza de Luffy para luego levantarse de la cama y buscar entre todo la ropa esparcida por el suelo su teléfono.
— ¿Qué?— contestó en tono molesto, no le importaba expresar su molestia ante quien sea que estuviera detrás de la línea, del otro lado sólo se escuchó un suspiro.
— Primero quiero que sepas que tampoco es de mi agrado llamarte, cabeza de musgo.— la voz irritada de Sanji de escuchó.— y segundo, tu mujer me llamó preocupada diciendo que no le contestabas ni los mensajes ni las llamadas.— el rubio sólo recibió silencio en respuesta.— oye, no tengo que ser un adivino para saber con quién estás, pero al menos ve y respondele los mensajes a Hiyori-chan.
La llamada se cortó y Zoro sólo suspiró para después ir al chat de quien se suponía era su esposa, y en efecto, el chat estaba lleno de mensajes de ella preguntando que dónde estaba, también habían unas 8 llamadas sin contestar. El peliverde se volteó a mirar a Luffy, el cuál sólo se acercó y lo abrazó, ocultando su cara en el pecho del contrario.
— ¿Ya te tienes que ir?— su voz denotaba su desilusión.— No quiero que Zoro se vaya.— Al peliverde le dolía tener que dejar a su pequeño rey ahí.
— Yo tampoco me quiero ir, Lu, estoy muy cómodo contigo, pero ya no me puedo quedar, al menos no por hoy. Lo siento.— se disculpó.
Zoro se fue alejando del pelinegro con suavidad para después levantarse otra vez de la cama, pero esta vez caminó hacia el baño de la habitación y se duchó sin quererlo, no quería borrar la esencia de Luffy, pero tenía que hacerlo para evitar inconvenientes. Una vez bañado y vestido volvió a la habitación, encontrándose con su pelinegro hecho bolita con las sábanas de la cama, le partía el corazón dejarlo.
— Lu, te prometo que la próxima vez pasaré todo el día contigo, ¿Si?— le dijo en un intento de animarlo.
— Pero yo no quiero a Zoro sólo por un día, lo quiero todos los días conmigo...— su voz rota hacia sentir como la mierda a Zoro, se acercó a Luffy y se agachó frente a él para tomarlo de las mejillas y juntar sus frentes.
— Sólo aguantemos un poco más, un poco más y me tendrás sólo para ti, te lo juro.— Luffy asintió despacio para luego ser besado por el peliverde, luego ambos caminaron hasta la puerta del departamento y se despidieron sin querer hacerlo.
Luffy sabía, sabía que la relación que deseaba con Zoro no podía ser, al menos no por el momento, puesto que éste está casado, también conocía los detalles y el porqué el otro no podía disolver el matrimonio, pero aún sabiendo que Zoro no amaba a Hiyori y que sólo estaba con ella por un trato, le dolía no ser él quien formara un matrimonio con el peliverde.
Sólo podía tenerlo por unas horas y no podía decir nada al respecto, él era sólo la parte lejana o "la otra" en esta ocasión, sólo le quedaba esperar junto a Zoro a que todo acabara para poder estar juntos.
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Holi, ¿Cómo están? Espero que bien, y ojalá les haya gustado el capítulo <3.