¿Feliz?

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Sabes, no me preocupa el no poder controlar este mundo, la muerte, por ejemplo, es una de las muchas cosas que no puedo decidir cuando viene, cómo o posponerlo. Y la verdad, no me preocupa que mueras, sé que estarás en un lugar mejor y, más que nada, sé que no sufrirás por tener un cuerpo.

Lo sé...

Y aun así, estoy llorando en silencio en la habitación siguiente por esa impotencia.

Sintiendo cada lagrima que sale de mis ojos, son tantas que mi vista se nubla y mis mejillas quedan completamente empapadas.

"Sé que estarás bien"
Me sigo repitiendo una y otra vez.

Ya no sé si es para convencerme de ello o por qué realmente lo creo.

Pero lo que sí entiendo, es que por saberlo, este dolor es completamente mío y que las razones son, a la vista de otros, egoístas.

Porque lloro, no por que te vallas, sino por qué no sé si llegare a algún día asimilarlo.

Si algún día seré capaz de aceptarlo y dejar de torturarme por todo lo que te dije que ya no lo pienso y por todo lo que pienso pero que jamás te dije.

No sé si, en el momento en que te vallas, podré seguir adelante y no dejar todo atrás.

No sé cómo dejar de pensar en esas cosas que aún no pasan y que ya están atormentandome antes de dormir.

Y lo que más me desespera es que todos parecen tan felices, despreocupados de lo que puedan perder de un día para otro.

Los envidio por qué ellos disfrutan pero yo estoy ahogandome antes de entrar al agua.

¿Debería de ser feliz también?

¿Esta mal que yo esté así?

¿Por qué aun pienso que su bienestar depende de mi?

Al contrario de estar orgullosa de esto última como lo harían otros, yo siento que tengo más peso sobre mis hombros y que algún día caeré para nunca levantarme.

¡No quiero sentirme así!

¡Lo odio!

¡Pensé ya haber aprendido que no soy responsable de su felicidad!

¡Ya estoy cansado!

En ese momento mis pensamiento se dividen, entre:

"Con que ellos sean felices, no me importa sufrir"

Y

"Por qué piensas así, es incorrecto, ¡prioriza tu bienestar! "

...

Entonces, cuando me calmo, solo me pregunto:

"Entonces, ¿debería de estar feliz?"

"Si he fingido estarlo antes, ¿por qué es tan difícil ahora?"

"¿Alguna vez estuve feliz?"

Desearía contarle a alguien, pero no quiero arruinarle su felicidad. Aún que sea te tengo a ti Dream.

Con lágrimas secas en ojos cansados, abraza al peluche blanco y, sin más fuerzas, cae dormido en busca de un sueño que pueda apaciguar todos esos pensamientos. Sabe que no es una solución, que sólo es un anestesiante, pero qué más se puede hacer cuando no confías en las personas cercanas a ti.

Una vida que crearDonde viven las historias. Descúbrelo ahora