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Logré llevar a Daryl hasta la casa donde pasaríamos la noche, está inconsciente por la perdida de sangre. Abrí la puerta y los arrastré hasta llegar al sofá, levanté su torso e intenté acomodarlo en dicho sofá, hice lo mismo con sus piernas hasta que quedó completamente recostado.

Tome mi mochila y saqué unas vendas y gasas.

- A ver, ¿Cómo era esto? - Me rasque la nuca algo confundida y desesperada, intentando recordar algo de lo que dijeron en todos esos cursos de medicina a los que mi madre me obligaba a ir todos los veranos.

- ¡Claro!- Me acerque a su pecho y pude escucharlo respirar, luego coloque dos dedos en su yugular y así tomar su pulso. - Sigues vivo, ¿Ahora que? - Me pregunté a mi misma una y otra vez - Había que ponerlo en posición ¿segura?.... ¡No!, Vamos Alynah ¡piensa¡ .... ¡Posición lateral de seguridad! - Coloque a Daryl en la posición correcta (Adjunto abajo una imagen) y comenzé a hacer presión en la herida con las gasas intentando parar la hemorragia.

Después de un rato el sangrado disminuyó un poco y vende la herida, dejando a Daryl en la misma posición. Cada 30 minutos aproximadamente, lo cambiaba de lado y vigilaba que la hemorragia no aumentará.






























Los rayos del sol comenzaron a entrar por las ventanas, me levanté del suelo para revisar a Daryl, pero en cuanto acerque abrió los ojos de golpe, haciendo que me asustara y cayera de espaldas.

- ¡No te levantes! - Alcé la voz y Dixon me miró - Pensé que despertarás más tarde Dixon - El encogió los hombros y yo me acerque a revisarlo.

Todo parecía bien, respiraba normal, seguía sangrando pero era leve y ya estaba despierto.

- ¿Por qué? - Me cuestiono mirando mi rostro.

- ¿Eh? - Respondí confundida mientras terminaba de vendar de nuevo su herida.

- ¿Por qué mataste al hermano de ese tipo? - Deje de hacer lo que hacía y eleve a mirada.

- No es asunto tuyo Dixon - Me puse de pie e intenté alejarme un poco de él.

- Yo creo que si - Voltee a verlo y fruncí el ceño - No puedes molestarte conmigo por preguntar.

- De hecho si puedo - dije y salí de la habitación

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- De hecho si puedo - dije y salí de la habitación.
























- Bien, iremos a Alexandria a qué te curen esa herida.- Le informe a Daryl mientras colgaba mi mochila en mi espalda.

- No, tenemos que ir por las provisiones. - Lo mire sin decir nada y suspiré, era la quinta vez que me decía eso. - No me mires así, no soy un niño y puedo tomar mis propias decisiones.

- No, no lo eres, pero te comportas como un niño berrinchudo. - Me miro mal y yo solo alcé los hombros. - Ven, iremos a Alexandria, te curarán esa herida y yo le explicare a Rick lo que sucedió.....

𝐖𝐚𝐫𝐫𝐢𝐨𝐫 | 𝐑𝐢𝐜𝐤 𝐆𝐫𝐢𝐦𝐞𝐬Donde viven las historias. Descúbrelo ahora