——Oh por dios, chicos, ¿oyeron lo que se está contando?
Xiao Zhan levantó la vista para encontrarse con un aspecto emocionado en el rostro de Meng ZiYi; era el que usaba cuando tenía chismes qué contar.
—¿Qué pasó, ZiZi? —preguntó Xuan Lu, sin darse el tiempo para levantar la vista del libro de historia que estaba mirando en ese momento.
—Enserio no escucharon nada... Pero sí escucharon lo que están diciendo de Yibo, ¿verdad?
Xiao Zhan parpadeó.
—¿Qué?
Vio cómo los ojos de Meng ZiYi se agrandaron.
—Oh por dios, ¿cómo es posible que no se hayan enterado? Se lo llevaron hoy... ¡esposado!
Xuan Lu y Xiao Zhan intercambiaron una mirada.
—No es cierto —dijo Xuan Lu, esperando a que Meng ZiYi continuara.
—¿Conocen a una tal Qi Yu? Está diciendo que Yibo la violó.
—¿Pero qué mierda? —preguntó Xuan Lu, incrédula.
—Con ella van tres.
—
Xiao Zhan descartó sus pensamientos afligidos al recordar esa conversación. Todos sabían quién era Yibo, y lo que había hecho. Pero nunca había sido encontrado culpable.
Había un rumor de que su padre le pagaba rutinariamente a los mandamases para que mantuvieran a su hijo fuera de problemas, lo cual no le sorprendía. Qi Ren era dueño de la mitad de la cuidad en el que vivían; y pensando en lo que Yibo le había dicho antes, era probable que pudiera cometer un asesinato si quisiera, sin tener que ir a juicio.
Es lo que hacía que la situación fuera tan retorcida; cada vez que las acusaciones empezaban a levantarse, Yibo iba a la corte, la corte deliberaba y Yibo se salía con la suya, después de que un juez descontento le diera sólo un manotazo en la muñeca. Y, misteriosamente, las chicas que comenzaban las alegaciones nunca volvían a hablar de ello.
Xiao Zhan nunca olvidaría el día en el que había visto las noticias y Yibo había aparecido en la pantalla, saliendo de la corte con una inmensa sonrisa de suficiencia en el rostro y con sus abogados detrás de él. Todos lo sabían, pero nadie se atrevía a decirlo. Yibo era intocable, y el cabronazo lo sabía.
Había pensado que era increíble cómo una sola persona podía causar tanta controversia. Y, como ahora Xiao Zhan sabía, de primera mano... todo era cierto. Y no podía decir nada, porque no quería ser otro jodido canario al que Yibo tuviera que silenciar.
Sin embargo, así de perdido en sus pensamientos como estaba, no se dio cuenta de que los ojos de Yibo habían cambiado y ahora lo miraban.
—¿Qué? —le preguntó Yibo, haciendo que los ojos de Xiao Zhan miraran hacia otro lado por la sorpresa. No había querido que lo atrapara mirándolo.
—Nada —aseguró, volviendo a descansar su cabeza en el amplio pecho de Yibo.
Por dios, vaya que estaba firme...
Xiao Zhan se sacó el pensamiento de la mente con un violento parpadeo, y cambió el tema apresuradamente.
—¿Están tus papás?
—No —contestó Yibo simplemente. Casi toda su atención volvió a la pantalla.
Xiao Zhan mordió su labio. Al menos no había posibilidad de encontrarse con el padre de Yibo, quien era el hombre más poderoso que habitaba esa área. Y por lo que había escuchado, la razón más probable por la cual Yibo estaba tan jodido.

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Dark Side
Fanfiction"Dicen que fui manipulado... que él me manipuló. Tal vez tengan razón, no lo sé. Pero lo que sí sé es que lo que vi en él, en tan sólo un instante... es algo que todos ignoraron durante toda una vida" - Xiao Zhan... nadie delata a Wang Yibo....