Después de que la vida de Harry se fuera a la basura por culpa de una de las personas en la que él más confiaba, Harry comienza a cuestionar sus decisiones del pasado, y cuando una oportunidad para cambiar esas decisiones llega, Harry escéptico deci...
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Todos imitaron al azabache levantándose de su asiento para salir del comedor. Caminaron hasta llegar al sitio donde se impartiría la clase.
Estaban en una zona abierta, al aire libre; cada estudiante estaba posicionado detrás de una escoba mientras miraban a la profesora; Madame Rolanda Hooch, explicar la clase.
-Buenas tardes a todos.- Dijo haciendo que todos contestaran su saludo.- Bienvenidos a sus clases de vuelo.- dijo con una sonrisa.- ¿Qué están esperando? Por favor colóquense a la izquierda de sus escobas.- Todos acataron la orden.- La mano derecha sobre la escoba, y digan ¡Arriba!.- Explicó y todos lo hicieron.
La escoba de Draco subió de inmediato a su mano, la de Pansy tardo 3 intentos en subir, Theo lo hizo a la segunda vez y Blaise también, y se sorprendieron que la escoba de Harry subiera hasta su mano al instante en el primer intento.
Mientras tanto los Gryffindor's estaban teniendo problemas. La escoba de Hermione daba vueltas en el suelo, la escoba de Neville parecía no moverse, y Weasley, pues la escoba si subió pero en el acto lo golpeó en la cara, haciendo reír a la mayoría, incluyendo a los Slytherin's. Esto no le hizo nada de gracia al pelirrojo, pero sé quedó callado debido que ahí estaba Madame Hooch.
-Cuando tengan su escoba suban a ella y sujétenla bien, no se resbalen. Cuando escuchen el silbato quiero que todos golpeen el suelo con fuerza, mantengan el equilibrio, floten un momento, inclínense hacia adelante, y vuelvan al suelo.- Explico Madame Hooch.- ¿Están listos?.- preguntó para luego comenzar a contar y soplar el silbato.
La escoba de Neville comenzó a flotar por su cuenta asustando al chico y preocupando un poco a la profesora, todos los demás estaban confundidos.
La escoba comenzó a tomar más altura y comenzó a volar más rápido hacia el castillo, daba vueltas en el aire; Neville no podía controlarla, la escoba chocaba contra los muros y se sacudía, hasta que pasó por encima de una torre y Neville quedó clavado de su túnica por una estatua, pero la túnica se rompió haciéndolo caer al suelo
Todos se acercaron al chico, La profesora se abrió paso entre ellos, se acercó al chico dándose cuenta que tenía fracturada la muñeca. Ayudó a Neville a pararse, dejó la advertencia que nadie podía volar en las escobas si no querían ser expulsados de Hogwarts, y se llevó al chico a la enfermería.
Mientras todos veían como la profesora y Neville se alejaban, Harry notó algo en el suelo, así que lo levantó. Lo observó unos segundos pero no sabía que era.
-Es una recordadora.- Dijo el chico rubio al lado de él.
-¿Recordadora?.- Preguntó curioso el ojiverde.
-Si, se pone de color rojo si has olvidado algo, pero es un objeto inútil, no te muestra que has olvidado.- Dijo Draco restándole importancia.
-¿De quién es?.- Preguntó Blaise uniéndose a la conversación.
