🔥Santo Amor Infernal🔥 [Shadonic/Sonadow]

La Impureza.

Sonic: No!, libéralos ahora!

Gritaba en llanto el ángel, quien al haber sido traído al reino de oscuridad fue inmediatamente encerrado en una de las jaulas del lugar, en los aposentos terroríficos del azabache. El cobalto no dijo nada ni se quejó al principio, pues estaba cumpliendo el trato que habían hecho. Pero jamás se imaginó que en aquella tregua había sido engañado.

Sonic: Hicimos un trato Shadow!

Shadow: Si, lo hicimos *Acercándose a la jaula* ¿Y eso que?

Sonic: No puedes faltar a tu palabra! Cumple con lo que acordamos! Libéralos!

Shadow: Creo que eso no se podrá angelito *Sonrió*

Sonic: Tu...me mentiste! ¿Cómo pudiste hacerme esto?! Confíe en ti!

Shadow: JAJAJA ¿Quieres que te cuente un secreto? *Metió su mano entre las rejas y atrajo al ángel del cuello* Jamás...confíes en un demonio *Lo suelta con brusquedad*

Sonic: Tú...snif...

Shadow: Ha... el bien te hace tan ingenuo.

Sonic: Sino piensas liberarlos, entonces déjame ir!

Shadow: Sonic eso no se podrá, tu me perteneces ahora ¿Lo olvidas?

Sonic: No! Tu no... snif cumpliste con el trato, no soy nada tuyo! no pertenezco aquí!

Shadow: Es verdad...no perteneces aquí ¿Qué haré ahora? *Habló melodramático* ¿Qué tal si hago que pertenezcas aquí entonces?

Sonic: No!

Shadow: Vamos angelito, ¿Qué dices? ¿Te gustaría sentir lo que es ser torturado? *Acarició la mejilla del tez melocotón, mientras dejaba a la vista sus afilados colmillos*

Sonic: N-no me toques... *Se alejó con miedo*

Shadow: No importa lo que digas, no tienes opción más que sufrir las consecuencias de ser alguien de buen corazón JAJAJA

El demonio abrió la jaula y se acercó al ángel quien trató de esconderse entre sus alas blanquecinas, con un pequeño chasquido del oscuro aquellas alas desaparecieron al instante, dejando a la vista un erizito azul muy asustado, que bañaba su rostro en lágrimas.

<<Qué bello>> Se dijo a sí mismo, observando a la criatura que tenía enfrente y bajo su poder. Siempre que trataba de conseguir un alma veía al ángel cuando intentaba evitarlo, pero nunca tuvo la oportunidad de admirarlo con detenimiento.

No mentían cuando decían que aquel celestial ser, era la creación más perfecta hecha por el dios Caos. Aquellas púas azules tan cuidadas, esos ojos verdes llenos de brillo por las gotas saladas, la piel del color de un fruto tan precioso y que decir del cuerpo, tan puro y sin mancha. Todo ello tan apetecible para un demonio como él, que tan solo tenía en mente el de profanar tal obra maestra, su naturaleza oscura quizás lo guiaba al deseo de pecar y hacerle daño, ya no había marcha atrás. Si quería que él ángel se quedara tendría que ceder a su naturaleza carnal y despiadada aun si eso le costara la vida al tocarlo.