ᴘʜɪʟᴏꜱᴏᴘʜʏ ꜰᴏʀ ᴅᴜᴍʙ ᴛᴇᴇɴᴀɢᴇʀꜱ

𝗘𝗹 𝗔𝗺𝗼𝗿

El amor, que sensación tan dolorosamente bonita, esa preciosa casualidad que te hace creer que todo es diferente cada vez que la sientes, esa unión involuntaria que afecta a dos personas que un día fueron desconocidos, pero de repente con el tiempo sienten una unión que les hace pensar que no pueden vivir uno sin el otro.

Pero no hemos venido a hablar de los finales felices, todos hemos pasado por el desamor, esa desilusión y frustración interna la cual convierte una maravillosa sensación en un recuerdo apagado y los peores casos la pérdida de toda esperanza.

Aun así si te paras a pensar en todo lo que ha pasado y entiendes que no hay culpables, que solo pasó, o más bien que no pasó como querías, puedes hasta sentirte egoísta o estúpido, ¿quién tiene la culpa de esas ilusiones que te diste el lujo de sentir?

Nadie nunca te dijo que te tocaba vivir una historia de amor, nadie te permitió soñar, y si aun así te das el lujo de hacerlo, siempre tienes que estar preparada para fracasar, porque los fuertes son aquellos que están dispuestos a soñar sabiendo que puedes caer.

Cuando paras a pensar y te das cuenta de que tu punto de vista solo es una mala interpretación de la realidad o que esas emociones solo tú las sientes, te sientes estúpida por todos los lloros, la aparente pérdida de tiempo y los sentimientos que un día iluminaron tu vida ahora la nublan haciendo que dejaras de disfrutar de cosas que te encantaban.

Pero no creas que todo se reduce a eso, lo peor es que las secuelas quedan, puedes salir de todo eso, pero el miedo a volver a sentir, de volverte a enamorar, de que te vuelvan a dañar...

Todo vuelve y con la incertidumbre de no encontrar a esa supuesta persona indicada sientes miedo a volver a pasar por lo mismo, te niegas a recaer y te cierras a todo tipo de oportunidades o experiencias, generas capas y capas para no mostrar emociones, convencida de que así acabará tu dolor.

Sin darte cuenta haces una inmensidad de capas para sentirte segura, alejándote de todo y todos poco a poco, pero por mucho que sonrías y te muestres firme delante de la gente, esas heridas a veces siguen presentes, siguen sangrando, y aunque pienses que solo necesitas más tiempo para que sanen, lo único que haces es guardarte todo eso solo para ti lo que haces es ocultarlas cuando deberías centrarte en superarlas para cerrarlas y avanzar completamente.

Todo proceso tiene tiempo, pero nada llega solo, aquellos que se esfuerzan por seguir serán los más propensos a conseguir algo, porque esta vida es injusta, ya que puedes dar la piel y dejarlo todo, pero aun así no conseguir nada, siempre que lo intentes tendrás una respuesta, pero tienes que caminar sabiendo que no siempre será lo que quieres y no por ello tienes que detenerte.