capitulo 15

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A la mañana siguiente, el suave movimiento de Jimin sobre la cama lo hizo despertar repentinamente.

En algún punto de la madrugada se habían quedado dormidos y no fue hasta ese momento que cayó en la cuenta de lo que había ocurrido horas antes.

Jungkook se incorporó suavemente sobre la cama, cuidando de no despertar al menor, quien se encontraba durmiendo profundamente sobre su pecho.

Sus cuerpos desnudos se rozaron libremente, permitiéndose compartir aquella única  sensación cálida de su piel contra el otro, haciéndoles saber que lo que existía entre ellos era real y no una simple fantasía creada por ambos.

Se giró silenciosamente sobre sí mismo, recostó a Jimin ahora sobre las almohadas y se apoyó con el antebrazo a su lado, evitando caer todo su peso sobre él.

Quitó unos mechones de su frente y delineó su mentón con su pulgar, después lo llevó hacia sus gruesos labios y lo pasó sobre ellos antes de acercarse y con toda la lentitud posible, lo besó suavemente.

Tomó las sábanas y lo cubrió cuidadosamente hasta los hombros, se aseguró de que se encontrara cómodo y salió de la cama.

Observó su reloj, faltaba un poco más de media hora para que iniciara su turno, y por consiguiente la revisión matutina de su enfermero. Aún así, recogió el uniforme que había terminado en el suelo y se lo colocó rápidamente, tomó la ropa de Jimin y la dobló perfectamente, colocandola a lado de su cama.

—¿Jungkook?— el nombrado se dio vuelta con rapidez, dándose cuenta que Jimin ya había despertado.

—Hola, Minnie.— susurró. Después de acomodarse la bata volvió a acercarse a él y se recostó a su lado.— ¿Cómo te sientes?— dijo acariciando su mejilla.

—¿Lo dices por lo que ocurrió ayer en el restaurante o por lo que hicimos
aquí?— sonrió aún adormilado y enterró el rostro en la almohada.

—Ambos.— contestó. Acarició su hombro por debajo de la sábana y al momento, sintió su cuerpo erizarse.— ¿Tienes frío?

—No, es que tu mano está algo fría.— dijo entre sonrisas.

—Lo siento.

—No dije que no me gustara.—Jimin se incorporó y se acercó al pelinegro, le rodeó la cintura con sus brazos y descansó su mejilla sobre su abdomen.

—A la próxima me encargaré de estar calientito para tí.— pasó su mano sobre su espalda, haciendo contacto solo con la yema de sus dedos.

—Supongo que esos dos días de descanso ya no serán posibles, ¿Cierto?— quiso que su voz sonara algo divertida, pero ambos sabían que la situación en sí no lo era.

—No, Minnie.— soltó seriamente.— En verdad desearía poder hacerlo, pero no quiero dejar pasar más tiempo.

—Lo sé.— Jimin tomó su mano y la entrelazó con la suya.— Habría pasado de todos modos.

—Pero ahora las cosas son diferentes.

—Si, lo son.— contestó el menor.

La oscuridad de la habitación le dificultaba una visión clara, pero aún así, no evitó poder sentir los suaves labios de Jimin unirse lentamente contra los suyos. Su mano se detuvo a la altura de su nuca y lo pegó más a su boca.

Jungkook lo tomó de la cintura, y profundizando el beso, deslizó su lengua entre sus rosados labios, dando paso a un sinfín de sensaciones que revivieron en ese mismo instante.

—Creo que debería vestirme, Kook.— rió con timidez.

Jungkook se acercó y comenzó a besar lentamente su cuello, deslizando su mano por su abdomen y llegando hasta su cintura.

Save Me [Kookmin]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora