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Capítulo 72

Anthony

Decidí hablar un poco con lo ocurrido con max y el me explicó todo con respecto del proceso de danya, es un poco complejo. Al menos está nos tiene a gabriel y a mí.

Bendita loca suicida con aires de héroe solitaria, está peor que Batman. Aún sigue viva gracias a mis a lo de sus tierras, Gabriel y este servidor. No sé quien estaba peor si yo o el ángel, estaba como loco.

- Le di un maldito collar por si necesitaba mi ayuda, pero no solo lo usa cuando hace todo una locura y casi muere al usar tanto poder y sin descansar por salvar a todos. ¿Pero y ella sino somos nosotros, quién la salva?

- De seguro lo hizo porque no había más alternativas, sabes que ella analiza muy bien las cosas y no es una demente. - Trato de tranquilizarlo.

- Claro - Rueda los ojos. - Se enfrentó con una cantidad inmensa de demonios, aparte de eso se enfrentó a dos demonios de rango muy alto y uno de ellos era un antiguo. - Me tenso y trato de no hacerlo notar mucho, ¿demonio antiguo de alto rango? ¿En qué diablos te metiste ahora danya? - Seguro que ese dato ni lo sabías, sino habría llegado o sino llegó a tiempo a esta dimensión. - El siente culpa.

- Ella está bien y lo estará también no te preocupes tanto, ya verás que en unos días ella estará como nueva. - Le sonrió. - Hiciste lo mejor posible, está viva en parte gracias a ti, llegaste a tiempo. - El asiente no muy convencido. - Además te llamó, sabes que danya no hace nada improvisado, de seguro contó con nosotros en sus planes.

Sonríe sin mucha gracia. - De seguro que sí, parece una niñita que debemos cuidar.

- Recuerda que ella hace sus cosas a solas, es raro que nos intervenga en esos asuntos al llamarnos era muy complejo supongo y confía en nosotros sin dudarlo. - No lo voy a negar en parte al principio, me dolió que su primera opción era él y luego pensé que el fue la clave para ir hacia mí. Eso me ayudó con algunas dudas que tenía al respecto.

Hay cosas que danya decide omitir con el ángel Gabriel, ella sabe lo importante que es para el ser un ángel y tener sus alas. Conmigo sabe que estará más tranquila y no me meteré en más problemas de los que tengo, digamos que somos su soporte.

Vivir diferentes vidas, lo que piensa constantemente y vivir una vida, sin saber que pasó en la anterior es muy duro. Que la persona más cercana que la entrenó y la tuvo en su cuidado muriera frente a sus ojos sin poder hacer nada por un demonio de alto rango.

Tenemos mucho tiempo sin hablar y creo en mi parecer que tantas cosas por hablar necesitamos hacerlo a solas y seguro.

Anthony, toca mi mano.

Esa voz la conocería donde sea que esté, veo otra vez el cuerpo inmóvil de danya en la cama y no la veo despierta. Veo los aparatos de sus alrededores, solo falta que ella decida despertar.

Anthony siéntate a mi lado y sujeta mi mano, necesito hablar contigo antes de despertarme.

No lo pienso mucho y lo hago, acerco una silla me siento una barrera para que no nos interrumpan mientras hablamos creo.

Al tocar su mano caigo en un profundo sueño y cuando abro mis ojos veo el lugar natal de danya, donde me invita a caminar a donde ella está. Voy donde mi indica y nos sentamos en el césped, nuestro alrededor es hermoso su vegetación es como un paraíso. Pero ella se mantenía en silencio, supongo que no sabe que decir.

- Me alegro que estes bien danya, no se que haría si te pasada algo. - Suspira.

- Confiaba en que Gabriel y tú me mantengan con vida. - Vuelve a suspirar. - Era algo obligatorio que tenía que hacer, sino lo hacía mataban a todos los que me acompañaban y de esa dimensión.