Royals ✦Vkook✧

23 ♕

El rumor de que el Rey iba a hacer algo en contra de Jungkook no tardó en correrse por todo el castillo.

Así también los fieles seguidores del rey se pusieron al tanto, tramando y pensando que hacer para que aquel sirviente quede fuera.

Para que deje de ser un obstáculo para el reino y para el futuro que ya estaba planeado.

Se oía ligeramente como un grupo de personas tramaba como dejar a Jungkook afuera, o peor, deshacerse de él.

Lo más grave del asunto era que ese grupo no era el único que planeaba un atentado en contra de aquel sirviente.

Pero es que, ¿cómo no?
Ese tal Jungkook sólo trajo problemas, distrayendo al príncipe de sus actividades y luego de sus labores.

Ahora era peor, pues por él la expansión y la paz del reino estaban en juego.

Todo por un joven sirviente de cabello y ojos oscuros, ¿valía la pena?

O más bien, ¿Valía la pena querer atentar contra un chico inocente por beneficio?

{...}

—Taehyung, estoy asustado. Tal vez estén planeando hacer algo en contra de mí.

—No lo harían Jungkookie, saben que tan sólo con mirarte mal ya corren peligro, dudo que quieran arriesgarse.

Jungkook tenía en su rostro preocupación, lucía un poco decaído. Mirando hacia abajo con sus cejitas fruncidas y un leve puchero en sus brillantes labios.

Taehyung lo notó, el menor era alguien muy bonito, lo amaba tanto que dolía cuando el contrario sentía frustración.

El peliazul que estaba en frente del menor, alzó su cabeza para que lo pueda ver, seguido le brindó una sonrisa tierna y enamorada.

—Además dudo que quieran lastimarme, —dijo suave el Príncipe— ya que sí se atreven a hacerte algo yo sufriría más que cualquiera.

Jungkook sonrió sintiendo su corazón palpitar rápidamente, a veces su amado se ponía cursi de la nada.

{...}

Bajaron ambos a la entrada principal del castillo, ya importándoles nada las miradas furiosas que recibían por ser pareja.

Se alarmaron al escuchar gritos y mucho bullicio por ahí.

El príncipe se acercó a donde estaba un gran grupo de gente reunida.

—¿Qué sucede? —preguntó inquieto.

Se le acercó de inmediato una mujer pelirroja, algo pequeña, vestida de forma muy simple pero muy preocupada.

—L-la princesa, Heejin, no está, tampoco su caballo. —dijo la mujer alarmada al borde del llanto.

Taehyung se asombró.
A ellos se acercaron prontamente los reyes y la reina; madre de Heejin.

—No dijo nada, simplemente se esfumó. Ni siquiera nos habíamos dado cuenta, fue muy hábil. —dijo la Reina Jeon casi neutral.

Se notaba la dualidad de las personas por la desaparición de Heejin, mientras que su madre estaba neutral y algo molesta, la mujer pelirroja —que suponía era su sirvienta o niñera— estaba realmente preocupada.

—¿A dónde pudo haber ido?, ¿Por qué escapar de la nada?

—Yo soy la persona más cercana a ella —dijo la mujer pelirroja cuyo nombre era Chuu— no me comentó nada al respecto, lo cual es más preocupante, ¿Y sí la secuestraron?