Era un viernes por la noche, Abril se encontraba en su casa viendo películas de romance y comiendo un litro de helado de chocolate, por algún motivo se sentía deprida, había transcurrido más de dos meses desde que Abril había roto su compromiso con Axel, sin embargo, no se había atrevido a buscar a Leonardo, pues a pesar de todo lo que sentía por él, pues por alguna extraña razón su corazón seguía destrozado por Axel, pero ya era demasiado tarde, había tomado una decisión la cual no había concretado, así que se incorporó de la sala, se dirigió a su cuarto, se puso una falda negra arriba de la rodilla de tubo, una blusa color vino con peligroso escote en v de mangas largas, unos zapatos de tacón de aguja y un bolso del mismo color de la falda, salió de su casa hacia el antro passion d'une nuit, al llegar al lugar dudó algunos segundos en entrar, tomó una gran bocanada de aire y se adentró en aquel lugar, atravesó la estancia entre humo de cigarro, gente bailando y luces que deslumbraban, se dirigió directo a la barra donde se sentó, ahí pudo ver a Leonardo platicando con uno de sus compañeros el cual le indicó que había llegado alguien a quien atender, ella agachó la mirada.
- Buena noche señorita ¿qué le gustaría ordenar?.
- Una margarita por favor.
- En seguida.
Leonardo se alejo al otro extremo de la barra y volvió unos segundos después con la bebida.
- Aquí está su bebida señorita.
- Gracias, pero creo que ya había sido clara en que me hablaras de tu.
Abril alzó la mirada y acarició suavemente la mano de Leonardo, el cual se sorprendió al verla ahí después de tanto tiempo sin tener noticias suyas, alzó las cejas sorprendido.
- Hola, ¿cómo has estado?
- Bien ¿y tu?
- Trabajando.
- ¿Estás molesto.
- ¿Por qué lo estaría?
- Porque no te busque después de... aquel día, creo que merecías saber…
- No, no me debes explicar nada, tomaste tu decisión, no podias hacer nada encontrá de tu corazón.
- Tienes toda la razón.
- Aclaraste tus sentimientos por lo que veo.
- Efectivamente.
- Me alegro por ti.
- El problema de todo esto es que nunca me dijiste que era lo que sentías tú.
- ¿Qué?- Rompí con mi novio porque me di cuenta que quería estar contigo, pero no sé qué es lo que tu quieres.
Leonardo sonrió galantemente y le plasmó un beso a Abril en los labios, un beso profundo y lleno de pasión, ella se acarició sus brazos y subió hasta su cuello, ambos volvieron a la realidad cuando escucharon el bullicio de todos los que se encontraban en el bar, animando los a que se dieran otro beso, lo cual los sonrojó un poco, pero al final terminaron accediendo, cuando se separaron por fin todos aplaudieron y poco a poco volvieron a lo suyo, la música del lugar volvió a sonar y la gente a bailar, al verse directo a los ojos ambos supieron que estaban destinados a estar juntos, se sonrieron, él le acarició la mejilla.
- ¿Qué te parece si acabamos esto en un lugar más privado?- Por supuesto, te espero esta?madrugada después del trabajo en mi departamento.
- Muy bien ahí estaré.
Abril le dió otro beso en los labios al bartender y salió del lugar, mientras él la observaba alejarse, la ropa que traía marcaba favorablemente su figura, sabía que su cuerpo sería su perdición, pero ya no había nada que hacer, estaba enamorado, suspiró y sonrió felizmente.
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Passion d'une nuit
RomanceAbril se acaba de comprometer con su novio y va a festejar con sus amigas, esa noche conoce a alguien que podría hacerla dudar sobre su compromiso.