Por Jenni16Cacia
Coincidimos que en toda buena historia se basa en el conflicto, en la lucha de dos fuerzas antagonistas que cada uno busca conseguir sus objetivos que por su naturaleza se contradicen entre ellos. De allí que las mejores obras del Cine o la Literatura debían su éxito en buena parte a la construcción de un villano carismático, profundo y con una motivación que haga que como lectores simpaticemos con él. ¿No crees?
La función dramática de un antagonista es vital para el desarrollo de la historia, a grandes rasgos es él quien genera los eventos que inician el viaje del protagonista y su lucha por conseguir su objeto del deseo. La mejor ejemplificación de esto es la dinámica de los superhéroes: en los cómics muchos superhéroes tienen un trasfondo más bien soso, pero, gracias a la eterna lucha contra sus villanos, sus historias se vuelven interesantes.
Justo por eso, es tan decepcionante ver historias que simplemente crean un personaje malvado y unidimensional que realmente no nos invita a reflexionar o explorar con más detenimiento la lucha del protagonista. Por supuesto, esto tiene una razón: el escritor (o los escritores) tuvieron que haber ignorado los elementos que permiten desarrollar grandes villanos. Si quieres descubrir cuáles son, ¡sigue leyendo!
Dale motivaciones reales:
Lo primero que un villano debe tener, es una motivación clara y poderosa. Si esto se hace bien, las acciones del antagonista pueden ser tan crueles y exageradas como quiera el autor. ¿No me crees? Bueno, pongámoslo así. A la mayoría de los críticos les desespera ver el típico plan malévolo de "destruir/conquistar el mundo" porque lo sienten repetitivo y hueco, pero ese no es el verdadero problema: la cuestión es que no hay una razón que justifique ese plan. Por ejemplo, comparemos a un villano como Snoke (The Last Jedi) con otro como Voldemort (Harry Potter). Si conoces a ambos personajes, sabes muy bien que uno no le trae nada al otro, pero esa sensación no te llega porque sus planes malvados sean distintos. Al contrario, tanto uno como el otro tienen la misma meta: conquistar sus respectivos mundos. Lo que hace que Snoke sea cliché y aburrido, pero Voldemort no es que el segundo tiene toda una historia detrás de él que justifique sus acciones, su odio y su forma de ser. En pocas palabras, las motivaciones de Voldemort son reales y creíbles. Es lo mismo que sucede con Thanos en Infinity War y Endgame, y con el agente Smith en Matrix. Si bien sus metas son hasta cierto punto exageradas y clichés, sus motivaciones están tan bien construidas que la historia se beneficia en lugar de dañarse. Un buen villano siempre hará las cosas por una razón. Podrás no estar de acuerdo con él/ella, pero entenderás su lógica.
La entrada:
Siendo el villano la fuerza contra la que tiene que combatir el protagonista, el momento en que choquen por primera vez debe ser un momento importante en la narración, en el cual se deja en claro cuál es el conflicto que los enfrenta y la postura de cada uno. Recuerdo con mucho cariño una película animada en la que salen Superman y Lex Luthor (si, seguimos con los superhéroes). Hay una escena en la que ambos, protagonista y antagonista se encuentran, y termina con Luthor envenenando a Superman y le dice: "Inclínate ante mí bestia alienígena" y lo hace arrodillarse, kriptonita de por medio. En esa escena se establecen dos puntos vitales para crear un personaje antagónico: El primero es que demuestra su motivación: le tiene envidia a Superman y en lo profundo de su ser le tiene miedo por ser un ser alienígena todopoderoso. El segundo punto: un buen antagonista se muestra en un comienzo como una fuerza mayor a la del protagonista, una prueba a superar y que requerirá un esfuerzo supremo.
ESTÁS LEYENDO
Cactus quiere ser escritor | BLOG
De TodoBLOG. ⇲ Porque escribir lo llevamos en la sangre. Y sabemos que tú también. Somos espinas unidas con un objetivo, una meta. Aprender. Todo aquello que el mundo tenga para darnos, y hoy, nuestro deseo es: Ser...