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Porque escribir lo llevamos en la sangre.
Y sabemos que tú también.
Somos espinas unidas con un objetivo, una meta.
Aprender.
Todo aquello que el mundo tenga para darnos, y hoy, nuestro deseo es: Ser...
¡Hola de nuevo, mis queridos visitantes del desierto!
Creo sin mucho problema que uno de los dilemas más recurrentes en un escritor a la hora de empezar sus obras son sus ideas literarias. Regularmente estás pueden surgir de una manera inesperada, llegando incluso a surgir desde ducha (un caso muy recurrente para mí, por cierto), paseando por un lugar muy bonito verde y muy amplio, en medio de las clases virtuales (porque no) o de un sueño.
Pero ¿qué sucede cuando ninguno de estos escenarios puede ayudarnos a crear nuevas ideas literarias?
𝕻𝖗𝖎𝖒𝖊𝖗 𝖈𝖔𝖓𝖘𝖊𝖏𝖔: no debes de alterarte.
Dile a tu cabecita que está bien a veces no tener idea de lo que quieres, no tener una idea clara o no tener una idea en absoluto. Estas ideas literarias son en sí mismas, el comienzo, la raíz de una historia que vas a desarrollar en tu cabeza y material de escritura de elección. Así que está bien tenerle miedo a crearla o creer que está mal, pero JAMÁS de los jamases creer que estas ideas están mal.
Ningún escritor nació con una idea literaria de oro escrita en la frente, todos lucharon para que esa idea fuera una hermosa criatura y en un día creyeron que era mala, pero la trabajaron y se fue tornando más hermosa de lo que era.
𝕾𝖊𝖌𝖚𝖓𝖉𝖔 𝖈𝖔𝖓𝖘𝖊𝖏𝖔: para poder conseguir una buena literaria es enfocarte en lo que quieres de la historia. Por ejemplo, quieras desarrollar una historia de vampiros, una historia de hombres lobo, una historia donde caperucita roja sea una alienígena y ella quiera comerse a la abuelita en guiso Oaxaqueño, una historia donde Harry Styles casé contigo y no conmigo...
A pesar de que suene muy tedioso debes de investigar acerca del tema porque no puedes adentrarte a escribir sobre algo sin saber a qué agujero te estás lanzando.
Otro ejemplo: los libros de Rick Riordan, espléndido escritor que ha utilizado todo el maravilloso mundo de la mitología griega, romana, egipcia y nórdica para la base de sus ideas, este reinventó de las historias antiguas para dejar a muchos lectores (incluida a mí actualmente) envueltos en un éxtasis, en torno a las asombrosas de las aventuras e historias, giros y tramas de los diferentes personajes que ha creado.
Él tuvo que saber y estudiar muchos mitos para meternos esos giros grandiosos por las narices. ¿Qué creen ustedes?
Si tú, mi querido visitante del desierto, quieres adentrarte a un mundo mágico o quieres armar tu propia estructura mágica, es completamente aconsejable investigar y empaparse lo mejor que puedas del tema para poder crear tus bases y desarrollar una idea.
Ojo: la idea de la historia completa no nacerá a base de unas dos o tres lecturas del tema, requiere tiempo y dedicación.
Este sería sobre todo un consejo técnico, pero muy importante.
