El principio de los tiempos

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La espesura de la noche deboraba sin demora el atardecer rojizo sobre las montañas, el aire cálido de media tarde, empezaba a volverse frío, invitaba a refugiarse en casa, lentamente fue callendo sobre el paisaje y finalmente anochecio sobre todo, la oscuridad, fría pero a la vez intrigante hacía salir entonces a los animales nocturnos, que traían consigo ruidos... Ruidos que podían ser aterradores, es entonces cuando la luz tenue de la luna caía sobre Silverhill, sobre el manto verde de las tierras del norte con su historia y sus leyendas y fue entonces cuando todo empezo.
Allí entre los bosques de edificios, se oyó el llanto de un niño, empezaron a iluminarse las ventanas de los edificios adyacentes, lentamente, bajó una mujer, de cabellos castaños ya plateados por el tiempo y voz suave y amable, allí, cerca de un parque una mujer yacía ensangrentada junto a un bebé, un precioso bebé de ojos oscuros como la noche y pelo negro como el carbón, y allí estaba ella, la mujer cabellos plateados... Megara, quién después de asegurarse que nadie la viese cogió al niño y desapareció con él entre las tinieblas de la noche.
A la mañana siguiente los noticiarios mas que informar gritaban el terrible suceso acaecido en elmoon street, una mujer de cabellos dorados y tez pálida había sido asesinada, sin testigos, sin arma homicida, sin identificar; Megara no había visto al agresor, ni el arma, ni nada que pudiera ayudar a la policía, decidió callar el secreto para conservar al que ella bautizo como: niño murciélago.
El niño la observaba, una vez ya en casa, con sus oscuros ojos negros, en silencio, había parado de llorar, su mirada la obligó a salir de la habitación donde lo había dejado, dentro de un cesto con una manta y un cojin, fue entonces cuando llego Alpha, ella le miro, y él, enseguida supo lo que había hecho.

- ¿Cómo as podido...? Ella es la guardiana del tiempo
- Yo solo quería que me devolviera lo que por derecho me pertenece.
- Tu no tienes ningún derecho sobre ese niño- Alpha estaba conteniendose para no gritar- el niño a de encontrar su camino.
- Es solo un bebé -Megara tenía lagrimas en los ojos- aún es demasiado pronto...
- Llevaselo a Agamenon, el sabrá cual es el siguiente paso.
Megara tuvo que resignarse, se presentaría ante el gran consejo.
Con el niño en brazos, de noche, y oculta por las sombras, cruzó las calles con neblina y entro en la iglesia de estilo gótico que dominaba desde lo alto la ciudad...

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Al entrar, el silencio asfixiante la hizo temer, su intención no era mala, solo quería evitar que el hijo de la guardiana del tiempo callera en manos de su padre, Cronos.

-¡Megara! La custodia del niño no te pertenece as desobedecido las leyes de los dioses, ¡y como tal! As de ser castigada según nuestras leyes, deberás reemplazar a Elipse como guardiana del tiempo, y deberas cuidar de su hijo como si de tu propia sangre se tratara - habló Agamenon desde lo alto del pulpito con tono amenazante mientras el resto del consejo guardaba completo y sepulcral silencio.

- Eso no es justo, yo solo quería volver atrás, ¡quería recuperarlo a él!

- Tus razones para llevar a la muerte a la guardiana nos son indiferentes- habló el líder del consejo, con una voz profunda y serena- deberás cumplir el castigo o serás condenada a vagar por el otro mundo como alma en pena.

Llena de resignación, Megara recogió el canastillo y salió de aquella iglesia, recorriendo las calles y barajando el dejar al niño abandonado a su merced en cualquier esquina, esperando que alguien la remplazara como guardiana, es entonces cuando todo se para a su alrededor, ella y el niño se mueven a través del tiempo, a través de las cosas, los ojos de Megara se iluminan, por fin podrá recuperarlo.

P.D. Si aun no te engachado la historia... Será mejor que dejes de leer ya, pero si por el contrario o por alguna extraña razón quieres saber quién es la mujer asesinada, qué ocurre con Megara, y como acaba el niño, continua, por que el misterio, la intriga, el amor y el erotismo estan asegurados.

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