Epílogo

1.5K 203 39
                                    

Zhan nunca pensó que sería tan incómodo sentir los malestares de un embarazo. Realmente admiraba a su esposo ya que él tuvo que lidiar con todos esos síntomas cuando estuvo embarazado la primera vez.

Durante la última semana la había pasado muy mal, por las mañanas después del desayuno corría al baño a vomitar mientras Yibo se reía de él y lo acompañaba.

La pequeña Xiao Li estaba muy apegada a él, quizá era por lo mimada que estaba por ambos que sintió el ambiente extraño después de que le dijeran que iba a tener un hermanito o hermanita.

Aún recuerda como tomo la noticia.

—Papá Zhan, ¿Por qué a mí papito Yi le está creciendo la panza?

Zhan se rió fuertemente. —Cuando seas grande lo entenderás.

—¿Por qué hasta que sea grande?— se quejó —¿Y por qué mí papito dijo que esperara aquí contigo?— dijo un tanto impaciente.

—Te dijo que tenía una sorpresa para ti— alzó los hombros —...Más bien tenemos una sorpresa para ti.

Yibo tomo la caja que estaba sobre su cama, con ayuda de Zhan había decorado una caja cuadrada para la ocasión, pero no importaba que tan decorada estaba de puntitos azules y rosas en tonalidades pastel, lo que importaba era lo que contenía.

Bajó las escaleras con mucha precaución y llegó hasta donde estaban Zhan  y su hija.

—Papito Yi— no importa cuánto tipo pasará, Xiao Li siempre se lanzaba a abrazar a Yibo. —Mi papá Zhan no me quiere decir por qué te está creciendo la panza— Yibo se ruborizó. —Me dijo que cuando creciera lo entendería.

—Em... Si, cuando crezcas lo entenderás.

—Es lo mismo que me dijiste cuando se casaron— hizo un puchero.

—Son cosas de adultos Xiao Li— intervino Zhan.

—Así es pequeña. Ahora vamos a darte tu sorpresa— dejo la caja en la mesita de cristal de la sala —¡Ábrelo!— dijo Yibo mientras Zhan se levantaba del sofá y se ponía a su lado con una cámara de vídeo.

La niña quitó el moño verde pastel, después quitó la tapa y su carita de ilusión decayó al ver unos biberones.

—¡Felicidades Xiao Li, vas a tener un hermanito!— dijo Yibo muy emocionado, mientras tocaba su vientre.

Xiao Li sonrió, ahora entendía el porque de los biberones.

—¿Un hermanito?

—O una hermanita, igual podrás jugar con él o ella— el castaño cargo a su hija y le dió un besito en la mejilla —¿No te alegra la noticia?

—Si....— grito muy emocionada y abrazo a Yibo por el cuello —Ya no jugaré solita y yo... Voy a quererlo mucho y les voy a ayudar a cuidarlo.

Zhan se sumó al abrazo familiar y segundos después volvió a sentirse mareado.

—Papá Zhan, ¿No quieres que lo cuidé con ustedes?— la tristeza se mostraba en las palabras de Li al notar como su papá Zhan cambiaba su linda sonrisa a una cara horrible.

—No A-Li, no es eso.

—Pequeña Li, tu papá nuevamente se siente mal, no pienses que no quiere que cuides a tu hermanito— dijo Yibo abrazando a su marido.

—Pobre papá Zhan, ¿Te duele algo?

—Digamos que si.

—Digamos que si

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
¡No es normal!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora