Entro al trabajo sintiendo que todos lo miraban, para el todos susurraban a su espalda, llegó a su escritorio con la mirada agachada, el escalofrío recorría su espalda, escuchar la voz de su jefe inmediato complicó aún más las cosas, comenzó a ponerse muy nervioso
- Arthur ¿estás bien? ve a lavarte la cara , debes venir conmigo para hablar de unos puntos sobre la reunión de ayer-
Lo sabía, se dirigió al baño, comenzó a llorar
" Arthur que diablos te pasa, no te educaron de esta manera ¿Que pasa conmigo?"El lo sabía, tenía miedo de fallar en lo único donde se sentía vivo, en lo único donde no sentía que era un trabajo, para el este nuevo mundo era su pequeño paraíso y se estaba desmoronando.
Suspiró y salió a enfrentar las palabras que fueran dirigidas a su persona, así transcurrió su horario laboral, ya estaba caminando de regreso a casa, llevaba la cabeza agachada, metió la llave , el olor de una rica comida invadió sus sentidos, luego unos brazos lo envolvieron
- Arthur, esto no es el final, oye hasta lo más grandes les dijieron un no en sus carreras-
Alzó la mirada sonriendo y abrazándose fuertemente a Francis, estaba feliz
- aceptaron, dijieron que solo son mínimos los detalles pero la obra tiene mucho potencial, Francis van a publicarme, me van a publicar-
Lo levanto comenzando a dar vueltas, estaban contentos, ambos sentían que todo lo que habían enfrentado ahora estaba dando frutos
- felicidades Arthur-
Si, no había mayor felicidad que ver esa gran sonrisa en el rostro de la persona que amaba, sabiendo que no era fingida, esa sonrisa era la de alguien que había triunfado en el entorno que disfrutaba
- te amo Francis-