Madara Uchiha, el Uchiha mas poderoso y uno de los Shinobi mas temidos, alguien frío y serio. Pero... ¿Qué pasaría si el tuviera una hija?
Los personajes no son mios son de Kishimoto, excepto uno que otro personaje.
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Narra Tsuki:
Di una mordida al palillo de dangos que había pedido, Jiro le dio un sorbo a su té mientras seguía leyendo un pergamino que el se había encontrado. ¿Donde estamos? En un puesto de dangos, ¿por que? Jiro me dijo que quería que fuera con el para que no me sintiera tan sola por la salida de Otōsan, y valla que eso si que ayuda.
Tener a mi lado al idiota y divertido de Uzumaki Jiro si que es divertido.
- Nee~ Tsuki-San, ¿tu crees que logre controlar miKekkenGenkai como tu lo haces como el tuyo?- lo había olvidado, hasta ahora el me había dicho que también poseía un KekkenGenkai como yo, simplemente que no se cual es o de que se trata-
- Deja de ser tan negativo Jiro, si entrenas y crees en ti mismo se que lo vas a lograr- lo anime y le di un sorbo a mi té. El me miro sonrojado y con una sonrisa- ¿Y ahora que tie--?-
- ¡Muchas gracias Tsuki-San! ¡Me esforzaré a ser el mejor!- exclamó con felicidad al mismo tiempo que se acercó a mi y me tomo de las manos, su rostro estaba demasiado cerca del mio, aun tenía ese sonrojo- Si logro controlarlo... ¿Te gustaría enfrentarte a mi?-
- Jiro se ve muy tierno... Por supuesto Jiro, entrenaré contigo al igual que enfrentarnos, ¿que dices?- me dio un abrazo cuando dije eso, si que le gusta el que el y yo nos enfrentemos-
- Ahora que lo pienso... ¿Te gustaría ir a pasear por la aldea?-
- Claro, pero deja primero pago y solo yo, ¿entendiste?- el acepto a regañadientes, no le gusta mucho el que yo pague las cuentas, pero me gusta mucho hacerlo enojar- Disculpe señorita, aquí esta el dinero de nuestra orden, de la mesa nueve, estuvo delicioso- le entregue el dinero a una mujer de la tercera edad, ella solo sonrió y me devolvió el dinero junto a dos dulces-
- Por ser una buena niña, tu y tu amiguito pueden salir sin pagar, la casa invita- me acarició la cabeza con demasiada ternura, ella si que es una gran mujer, tiene mis grandes respetos-
- Pero señorita, no pudo aceptar esto, déjeme pa--
- Tranquila, además es mi negocio, si yo quiero que un cliente se valla sin pagar pues así lo decido. Pero como ustedes, al venir muy seguido y ser muy educados conmigo, la casa invitara esta vez, ¿ok?- iba a decir algo, pero solo asentí, le agradecí a la señora con una inclinación y salí del puesto, Jiro estaba afuera esperándome-
- ¿Y bien? ¿Ya nos vamos?- sentí y empezamos a caminar por la aldea-
- ¿Como te ha ido en tu entrenamiento con Tobirama-San?- el se tensó al preguntarle, tal vez pasó algo y no me enteré-
