En la Guerra y el Amor

Capitulo I

"En la Guerra y el Amor" Tercer libro
Trilogía "Amor en el Oeste"

Capítulo I

El día de ir a Lakewood había llegado, Susana, Kely y Margot estaban felices, ya se habían empezado a hacer ideas en su cabeza, sueños inalcanzables por los que lucharían con todo su ser, sin importar que, no era que estuvieran enamoradas de alguno de ellos, para nada, pero si el poder y el dinero les llamaba la atención como abejas a la miel, sobre todo ahora que estaban en quiebra.
- Mis niñas, no debemos perder esta oportunidad que se nos presenta, si es necesario deben meterse en su cama y si alguna de ustedes por cualquier cosa no es virgen, gritan como si lo fueran y colocan un poco de lo que hay en este frasco (dándoles un frasco con sangre), debemos obligarlos de una u otra manera a que se responsabilicen de ustedes ( ambas chicas tomaban el frasco), bien ya están las maletas en el coche así que nos iremos a la casa de los Andrew para de allí partir todas a Lakewood.

Eleonor y Pauna se encuentran completamente emocionadas, se hacia la ilusión que sus hijos al fin sentaran cabeza con las damas "correctas", unas que tenían años de conocerlas, las mujeres que ellas, habían elegido para ellos, ellas pensaban que todo saldría a pedir de boca, la decisión ya estaba echa y no pensaban tomar en cuenta la voluntad de sus hijos, la cosa era sí o sí.

Días antes
Tanto Eleonor como Pauna se ponían de acuerdo para hablar con sus respectivos esposos y darles a conocer que las Marlow irían con ellas a pasar unos días a Lakewood, para "descansar" de la presión de la ciudad. Pues ir a fiestas de sociedad, de compras, medirse ropa contante mente, pues era mucha presión mantenerse al día con el cambio de moda y claro no se podía repetir vestido en las fiestas e incluso el uso de las joyas debía de ser espaciado (pobres mujeres si estaban cansadas y estresadas)

Como siempre William y Richard llegaban a la mansión Andrew, uno a descansar y el otro para llevar a su mujer a su casa. Las dos mujeres se pararon para saludar a sus respectivos cónyuges.
- Querido necesitamos hablar con ustedes, si nos permite un minuto Richard por favor, dijo Pauna señalando las sillas ubicadas enfrente de ellas (ambos hombres se miraron extrañados por la actitud de las damas, pero decidieron escucharlas) - bien, dijo William, haciendo una seña que para que siguieran con lo que les querían decir. - Pauna tomo la palabra y con algo de nerviosismo dijo, invitamos a las Marlow, pues como sabrán ustedes están solas y se sienten estresadas del andar de esta ciudad tan ruidosa, pues ya están cansadas de tanto andar , estudiaba la reacción de los hombres que permanecían sin hacer algún gesto que les indicarían como se sentían, sin embargo ambos se miraron, William levanto una ceja y Richard entre cerro los ojos, los dos eran viejos zorros y olfateaban todo a metros por algo eran empresarios líderes en su ramo.

William tomo la palabra y dijo - Me imagino que ya es imposible dar marcha atrás a esa invitación, sin embargo les he de decir que no me gusta la idea para nada, desconozco si es el mismo pensar de Richard pero esas mujeres no me caen nada bien , desde ahora te digo Pauna, sé que la invitación que hicieron SIN CONSULTARLO CON NOSOTROS, como debían haber hecho ( señalándose ), no me gusta nada Pauna y te digo yo no estoy pintado, ,e parece una falta de respeto de tu parte, recuerda que tu como mujer estas sometida a mi y debes de consultar las decisiones que tomes, ya te dije no una, van varias veces, esas mujeres no me gustan para nada, ya les dije que están en la quiebra y las están utilizando a ustedes para llegar a nuestros hijos, definitivamente eso no me gusta nada. Desde este momento te lo advierto Pauna ( parándose, desabrochándose el saco y aflojándose la corbata para después colocar una mano en su cadera y señalando con el dedo, moviéndolo de un lado de a otro) si pasa algo allá con esas mujeres y quieren responsabilizar a mi hijo, desde ahora te digo yo lo apoyare con cualquier decisión que tome y tu con esa actitud lo que lograras es alejarlo de nosotros, espero que entiendas y sepas valorar lo que es realmente importante, si no tomas conciencia prepárate para tener problemas con migo, por desobedecerme, ESTA CLARO. - Pauna empezó a sudar frio, pero ya no se podía echar para atrás, así que asustada solo pudo mover su cabeza con movimientos de afirmación. - Eso espero porque no deseo tener problemas con nadie. Pero Pauna ya no escuchaba solo podía pensar- En que problema me metí, espero todo salga bien y las cosas marchen como deseamos.

Richard mira a Eleonor y toma la palabra- Eleonor, tu sabes que te amo y que por nuestro amor e renunciado todo, pero no pienso renunciar al único hijo que tengo por tu necedad, debes entender esas mujeres no son lo que parecen y tampoco me gusta esa amistad que tienen con ellas ya te lo he dicho, jamás me gusto, desde que estábamos en New York conociéndonos, jamás me gustaron, sin embargo no te ha importado lo que yo piense y te diga que dejes esa amistad. Espero no tengan problemas con mi hijo, allá en Lakewood porque entonces te tocara decidir entre mi persona o las Marlow, espero que te quede claro, porque si te decides por mi no la quiero volver a ver o a saber que la visitas, si la eliges a ella, te olvidas de mi y de todo lo que tenemos.- Eleonor se suelta a llorar diciendo - no amor, te lo juro no pretendo obligar a algo que no quiera a mi hijo, solo quiero lo mejor para él. Pero no pienso metérsela por los ojos, solo vamos de vacaciones sin ningún otro motivo, decía mintiendo al sentirse descubierta - Bien, dijo Richard, espero que no nos estén queriendo ver la cara de y sea cierto lo que ustedes dicen, no me gustaría perder algo tan hermoso como lo que nosotros tenemos por unas extrañas. - Si amor no tendrán problemas.
- Eso esperamos decía William muy molesto, no entendía que les habían dado esas mujeres a sus esposas, para que no quisieran dejar esa amistad.

Dejando todo en claro, decidieron dejar el tema por la paz.

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Como el tiempo pasa más rápido de lo que uno cree, el día de llegar de ir a Lakewood, el carruaje con las Marlow llegaba a la mansión Andrew, William y Richard le hicieron una mirada de advertencia a sus respectivas esposas, ellas solo asintieron y las Marlow se bajaban de su carruaje, ordenando que se bajara su equipaje para que lo colocaran en el carruaje que tomarían rumbo a Lakewood.

Las mujeres subieron al carruaje sin saber lo que el destino les tenía preparado.

Una ves se fueron ambos hombres abordaron un carruaje con destino la mansión Brawn, en la que se encontraba Rouse Mary y la tía abuela Elroy. Días antes- Richard le dice a William, no me gusta para nada ese viaje en compañía de las Marlow, por desgracia creo que no podemos confiar en nuestras mujeres en esta ocasión, se van a dejar llevar y cometerán un gran error al querer forzar algo que solo esta en su imaginación ( suspiro de frustración y tristeza) quisiera tener a alguien de confianza para que llegara allá de sorpresa, decía mientras se masajeaba las sienes por la tensión.- William se puso los dedos en la barbilla y dijo- tu no tienes a esa persona pero yo tengo a dos, dijo levantándose y tomando su saco, nos vamos, dijo invitando a Richard, este se paró y siguió a su amigo. Tomaron el carruaje y se fueron a la mansión de la hija mayor de William.
- Hija, hermana, dijo saludando con un beso en la mano a amabas mujeres. Vincent dijo dándole la mano a su yerno, a la ves que Richard saludaba a ambas mujeres y a su otro amigo. William tomo la palabra y dijo- esta no es una visita de cortesía, necesito un gran favor de su parte, les dijo, contándoles el problema en que pensaban se podían meter sus esposas, además sabían que las Marlow no eran santo de la devoción de ninguno de los allí presentes. Yo la verdad no entiendo que le pasa a tu madre con esas mujeres, no abre los ojos y ve que es alguien que está por puro interés y esa es la intensión de meter a su sobria e hijos a fuerza con nuestros hijos, por eso le quería pedir la autorización a Vincent para que le diera permiso a mi hija Rouse de ir a Lakewood acompañada de mi hermana, para que sean nuestros ojos y oídos, también para que nos avisen de cualquier situación.- Vincent acepto y dijo- cualquier cosa mandan un mensaje que nosotros partiremos hacia allá tan pronto lo recibamos. Así todo quedaba arreglado.
- Llegando el día de ir a Lakewwod, minutos después de que sus mujeres salieran, iban a despedirse de Rouse y Elroy Andrew, desconociendo ellas también las sorpresas que se llevarían al llegar allá.

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Los carruajes iban llegando a Lakewood después de un duro viaje llegaban, ya casi al anochecer y siguiendo el plan pidieron que colocaran a las chicas en las recamaras contiguas a las de sus hijos y pidiendo les preparaban un baño, cuando salieron de el arregladas, la servidumbre recibían a Rouse Mary y Elroy, quien pedían una habitación cercana a la recamara de su hermano e invitado.- Disculpe señorita podemos darles las de enfrente, pero por ordenes de su mamá colocamos a las invitadas en habitaciones contiguas a las de ellos. - Pero siendo sincera, ellos ya van dos noches que no llega a dormir y ha pedido mucha comida que llevan los peones cada día a la cabaña.
Rouse Mary y Elroy intrigadas, decidieron de ir al día siguiente a hacer una visita a la cabaña.

Continuara.........................................................