El Rey Mago

Capítulo 5: El cementerio de elefantes Parte 2

"Bueno, bueno, bueno Banzai, ¿qué tenemos aquí?"  Preguntó la hembra alfa del trío mientras caminaban hacia Harry, Nala y Zazu.

"Eh, no lo sé Shenzei, ¿qué piensas Ed?"  Banzai le preguntó al otro hombre del grupo que se rió locamente.

"Justo lo que estaba pensando."  Shenzei dijo mientras comenzaban a rodear al trío de Pride Landers.  "¡Un trío de TRASPASADORES!"  Ella le espetó a Zazu.

"Y por accidente te lo aseguro, así que estaremos-"

"¡Espera, espera, te conozco, tu pequeño títere de Mufasa!"  Shenzei se burló de Zazu.

"Yo, Madame, soy el Mayor Domo del Rey".  Zazu resopló indignado cuando la hiena rodeó al trío.

"¿Y eso te haría?"  Banzai le preguntó a Harry.

"El futuro Rey".  Harry dijo mirando a los 3 caninos y tratando de mantener sus ojos en los 3. Recordando lo que su tío Scar le enseñó acerca de la lucha. Mantén tus ojos en el enemigo en TODO momento.  Prácticamente podía escuchar la voz de su tío diciendo esto y recordaba que su tío se abalanzó sobre él porque no escuchó al león mayor.

"¿Sabes lo que les hacemos a los reyes que salen de su reino?"  Shenzei se burló del niño humano.

"No puedes hacerme nada."  Protestó Harry.

"Ah ah ah, técnicamente pueden, estamos en su tierra".  Zazu informó al joven príncipe.

"Pero Zazú, dijiste que no eran más que cazadores furtivos babosos, sarnosos y estúpidos".  Harry le recordó al pájaro.

"Ex-no en el Upid-stay."  Zazu murmuró al príncipe.

"¿A quién llamas Upidstay?"  Banzai preguntó poniendo su rostro frente al de Zazu con ira.

: "¡Oh, Dios mío, mira el sol, es hora de irse!"  Zazu dijo con miedo mientras comenzaba a despegar en el aire y Harry y Nala comenzaron a irse antes de que Shenzei los detuviera.

"¿Cuál es tu prisa? Nos ENCANTARÍA que oyu se quedara a cenar".  Ella sonrió con malicia a los dos niños y al pájaro.

"Sí, comemos lo que sea ... ¡león!"  Banzai dijo y todos se echaron a reír.

"¡Oh, lo sé, lo sé! Haz el mío, un sándwich de vub, ¿qué piensas?"  Preguntó Shenzei mientras los otros dos continuaban riendo antes de que Banzai se diera cuenta de que les faltaba algo.

"Oye, ¿pedimos esta cena para llevar?"  Le preguntó a Shenzei.

"¿No porque?"  Ella preguntó.

"¡Porque ahí va!"  Banzai gritó mientras el trío se alejaba ya unos metros.  Los persiguieron mientras los dos niños trepaban por el montón de huesos que formaban una especie de montaña improvisada.

"¡Harry!"  Nala gritó haciendo que Harry se detuviera y viera a su amigo resbalarse de los huesos.  Gritó mientras las hienas se acercaban.  Harry se transformó y corrió a ayudarla.  Cortó con su garra a Shenzei dejando un corte muy profundo debajo de su ojo, seguro que dejaría una cicatriz.  Shenzei gruñó mientras los dos cachorros escapaban a un terreno más alto.  Se deslizaron por un largo deslizamiento improvisado de huesos de la columna.  En el fondo había una especie de cueva.  Corrieron hacia él y vieron una reunión de redes de algún tipo.  Intentaron trepar pero sus garras hicieron que la red se rasgara y pronto fueron arrinconados por las 3 hienas.

"Aquí, un niño, un niño, un niño".  Banzai gruñó mientras se acercaban.

Harry, ahora en forma humana, trató de rugir al darse cuenta de que ciertas cualidades animales de su forma de cachorro permanecían con él.  "Rawr, rawr, rawr".  Trató de rugir a las hienas para asustarlas.

"Je, ¿eso fue todo?"  Shenzei se burló de Harry.  "Hazlo de nuevo, vamos."  Ella se burló de él.

"¡RUGIDO!"  Harry pareció dejar escapar un rugido de leones adultos.

"¿Eh?"  Las 3 hienas dijeron al mismo tiempo en confusión antes de que algo enorme saltara sobre ellas.  Lo que provocó que los caninos entraran en pánico cuando pronto estaban atrapados uno al lado del otro bajo Mufasa, el Rey de las Tierras del Reino.  Harry, Nala y Zazu, que habían regresado de informar al Rey del peligro de los dos cachorros, estaban sobre el hombro de Harry.  "¡Silencio!"  Mufasa rugió.

"¡Oye, vamos a callarnos ahora mismo!"  Dijo Bonzai.

"Je, lo sentimos mucho."  Shenzei dijo con completo miedo al león sobre ella.

"Si alguna vez te acercas a mi hijo de nuevo."  Mufasa advirtió con un gruñido.

"Oh, esto, ¿este es TU hijo?"  Shenzei fingió conmoción.  "¿Sabía usted que?"  Le preguntó a Banzai.

"¡No, yo-no lo sé, no! ¿Lo hiciste?"  Le preguntó de nuevo a Shenzei.

"¡No, por supuesto que no!"  Ella dijo.  "¿Ed?"  Le preguntaron a su amigo tonto.  Quien, estúpidamente, asintió con entusiasmo.

Mufasa rugió con furia.

"Je, toodles."  Banzai dijo y las 3 hienas huyeron aterrorizadas.

Después de unos momentos, Harry se acercó tímidamente a su padre.  "Papá yo-"

"Me desobedeciste deliberadamente."  Mufasa dijo enojado a su hijo humano.

"Papá, lo siento-"

"Vamos a casa."  Mufasa dijo con firmeza y comenzó a irse, los dos niños y Zazu lo siguieron.

... ...

Rafiki se apareció en Hogsmeade y se transformó en un humano africano.  Su túnica mágica ondeando detrás de él en la brisa del atardecer mientras caminaba por el vasto césped del Colegio Hogwarts de Magia y Hechicería.  Hacía mucho tiempo que había dejado de ser humano, ayudar a la manada de leones de la sabana donde ahora vivía era su propósito en la vida.  Sin embargo ... En raras ocasiones, le haría una visita a un viejo amigo suyo.

"Estoy aquí, para ver al profesor Dumbledore."  Rafiki le dijo al anciano cuidador, Argus Filch, un squib al que todos los estudiantes despreciaban y el sentimiento era muy mutuo.  Filch sabía quién era como había visto antes a Rafiki.

"Está bien, pero hazlo rápido."  El viejo amargado se burló mientras el humano Rafiki se abría paso a través del castillo.

"Ingresar."  La voz de Dumbledore llegó a través de la puerta a la que llamó después de subir la escalera en espiral.  "Rafiki."  dijo sorprendido.  No esperaba ver a su viejo amigo.

"¿Tuviste suerte en encontrar al niño?"  Rafiki preguntó alzando una ceja divertido por su compañero brujo.

"¿Y cómo sabes que lo estamos buscando?"  Replicó Dumbledore.

"El flash de Phoenix emite una explosión mágica cuando viajan".  Rafiki le recordó al hombre mayor cruzando los brazos y sonriendo.  "Nunca lo encuentras Albus. No a menos que los espíritus de los reyes quieran que los de tu especie lo encuentren."

"Sabes dónde está Harry, ¿no es así, viejo amigo?"  Preguntó Dumbledore con ese brillo.

"Sí, fui yo quien lo liberó de las garras de su madre esa noche horrible".  Rafiki le reveló al director.

"Debería haberlo sabido."  Dumbledore se rió entre dientes.  "Muy bien, por el momento, cesaré mis esfuerzos por encontrar a Harry."  Le dijo al animago babuino.

"Los reyes te avisarán cuando llegue el momento, Albus."  Rafiki dijo antes de desaparecer con un pop.

Albus miró fijamente el espacio donde Rafiki estaba parado.  "¿Cómo diablos aprendió a aparecer dentro y fuera de Hogwarts?"  Se preguntó a sí mismo.